Jooheon prendía un fuego en el cuerpo de Changkyun cada vez que lo tocaba, y Changkyun sólo enrollaba sus dedos en el cabello del peli negro y lo besaba como si su vida dependiera de ello.
Y tal vez así era.
Todavía se encontraban después de la escuela e iban juntos a la cafetería.
Después, Changkyun se iba a casa y se inyectaba.
Nunca se inyecataba lo suficiente como para dejar a Jooheon permanentemente; nunca lo sería.
Todo lo que quería era drogarse y mantenerse drogado.
Pronto, Changkyun se colaba unas cuantas dosis antes de la escuela.
Luego se colaba algunas en el baño durante el almuerzo, a veces durante la detención, sobre todo después de la escuela.
Jooheon comenzó a darse cuenta muy pronto.