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[Foto de referencia 👆]

[Dia de la boda]

El omega se encontraba más nervioso de lo que creia que iba a estar. 

—Inhala y exhala... Todo va a estar bien...

—Si, eso mismo te iba a decir...

—¡Jimin! —el omega camino rápidamente hasta llegar a su mejor amigo y abrazarlo—, Que bueno que ya llegaste. 

—Estoy aqui, listo para rescatarte. Por cierto, te vez hermoso.

—Gracias —dijo con las mejillas sonrojadas— ¿A qué te refieres con rescatarme?

—No se, tal vez te arrepientas de casarte con mi hermano y yo estaré aquí.

Ambos rieron.

—Es imposible, es como preguntarte ¿Te arrepientes de estar con el príncipe Min?

—¡Claro que no! —dijo con exageración—. Pero es cierto de que me siento un poco triste al posponer mi boda.

—Bueno, ustedes pueden hacer eso... En cambio tú hermano y yo no, son las cosas más difíciles.

—Pero el pueblo lo acepta.

—El pueblo acepta a un chico sin rostro, solo lo aceptan por ser el hijo de la diosa Luna —suspiro—. Si yo saliera y dijera que soy el hijo de la diosa nadie me creería porque crecí en el pueblo, luchando junto a mi mamá y viviendo al igual que los demás. Incluso tu madre no me hubiera aceptado si el rey no le hubiera contado su historia junto a la mía.

—¿Sabes Tae?, Eso es lo que te hace especial, no te serviría haber tenido un palacio ni mucho dinero. Era el destino quien te enseño a ser humilde, a tener un hermoso corazón y a enseñarnos a amarte. Y créeme que así será con el paso del tiempo junto al pueblo. Si, ahora será una pequeña boda pero dime ¿En realidad quieres algo más grande lleno de hipocresía y malos tratos?

El Omega nego rápidamente y abrazo a su amigo.

—Gracias Jiminie, esto era lo que necesitaba.

Los dos se quedaron así un tiempo hasta que escucharon la puerta ser abierta de par en par y dos bellas mujeres entrando por ella.

—¡Mamá! —dijo Tae al ver a su preciosa madre Luna— Haz venido.

—Claro que si —dijo extendiendo sus brazos y recibiendo a su pequeño entre ellos— ¿Cómo perderme la boda de mi único hijo y el más precioso de todos?

Los otros dos miraban estupefactos a Tae y a la diosa Luna. ¡Eran idénticos! Y tienen una belleza sobrehumana.

El par se separó y con felicidad miró a Jimin.

—Jimin, te presento a madre Luna y mamá te presento a Jimin, mi mejor amigo.

El Omega más pequeño no sabía si hacer una reverencia o desmayarse. Era irreal, esa Diosa que les protegía y hacia posible tus sueños... Estaba frente a ella.

La mujer extendió su mano y el rubio la tomo rápidamente.

—Me siento feliz de que Tae haya tenido a alguien junto a el todo este tiempo. El me contó sobre ti en muchas ocasiones.

El mencionado sonrió al ver a su madre y a su amigo conociéndose.

—Y supongo que ya conociste a la reina.

Ambas se miraron.

—Claro que si —dijo la diosa—, ella pensaba que no era real.

Las dos rieron y la reina se sonrojó.

A tu lado [HopeV] OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora