A tu lado [HopeV] Omegaverse

33

Moon Byul hablo con Taehyung y Hoseok hasta que el Omega se quedó dormido en los brazos de la mujer. Ahora parecía estar más tranquilo con la presencia de la diosa.

Hoseok tomo a Tae entre sus brazos y lo dejo descansando después de dejar un beso en su frente y otro en su creciente pancita.

Cuando salió de la habitación sabía lo que se venía.

—Hoseok —dijo la diosa—, tenemos que hablar sobre el reino. Y ella sabe que algo estamos tramando.

—Pero ningún otro Dios quiere ayudarnos, usted solo está dispuesta porque es su hijo —realmente el alfa estaba enojado, no había modales para esto—. Pero solo por eso, los pueblos no le importan.

—Estoy caminando contra las reglas. Me importan más los pueblos de lo que te imaginas, sin embargó, lo que más me importa es acabar con ella. Y por eso llevaremos a cabo un plan, pero tú debes  hacer un sacrificio...

La diosa le contó su plan a Hoseok. El corazón del alfa peso al pensar en todo lo que podría suceder. "Pero no somos dueños del destino" se dijo a sí mismo.

[•••]

Taehyung despertó con su madre acariciando su cabeza. El se siente feliz teniendo a su madre con él, y aún que cada día se veía más humana, no podía evitar sentirse egoísta al saber que podría tenerla más tiempo junto a él.

—Vamos a cenar, tomaste una buena siesta.

El Omega aceptó feliz y acompañó a su madre y a su esposo a una cena amena. Claro, tampoco podía ignorar lo que estaba pasando allá afuera, pero solo por un momento lo necesitaban.

Moon Byul —la diosa— pidió al esposo de su hijo y a su hijo que la llamen de esa manera. Se dedicó a estar con ellos y hacer momentos felices.

Ella, a pesar de ser una diosa, realmente tenía sentimientos y preocupaciones. Siempre las tuvo desde el momento en que los dioses la eligieron como la siguiente heredera al puesto. Se preocupó desde que dejó a una chica con el corazón roto y con un odio creciente hacia el amor.

Y es que la vida siempre tiene a su Yin y a su Yang. Moon Byul a pesar de pertenecer a la luna, su corazón irradiaba más luz y pureza que nada en el mundo. Solar, por otra parte, a pesar de pertenecer a la luz terminó en la oscuridad, llena de rabia. Polos tan opuestos.

Y a pesar de todo el corazón de Moon Byul aún pertenece a Solar. Siempre fue así, sin embargo ella se cegó, dejó endurecer su corazón.

Sus días como diosa estaban terminando, porque a pesar de pensar en que son eternos, no, ellos no lo son. Incluso el dios del destino cambia, porque así lo tiene escrito el universo. Al pasar los días ella se vuelve más humana, vuelve a sentir el dolor, vuelve a ser como era antes, con más sentimientos que absolutamente nadie.

Pero todo esto lo estaba apreciando. Estaba feliz de tener a su hijo con ella, de pronto tener un nieto, y por eso iba a luchar contra toda persona que quiera hacerle daño. Porque a pesar de todo, ella quiere recuperar todo el tiempo perdido con Taehyung.

Ahora había una guerra que no se podría evitar. Ni siquiera el dios del destino podía evitarla, pero peleará hasta morir si es necesario. Todos lo harían y todos tenían sus razones para pelear hasta el fin.

Es cierto. Moon Byul está caminando en contra de las reglas, pero nada vale más que la vida de sus seres queridos. Incluso si tiene que terminar con la vida de aquella persona a la que tanto amo, lo haría.

Taehyung empezó a cantar un poco en lo que preparaba un pastelito. Eran sus antojos de media noche y no podía dormir sin haber comido un poco. Si bebé cada vez era más inquieto y muchas veces, Taehyung al cantar, sentía que su bebé apreciaba su voz desde su barriguita.

Y ahora no era la excepción. Su mente iba creando una melodía y su voz una letra. 

"You sleep so happily
I wish you good night, good night, good night
Good night, good night

Imagine your face
Say hello to me
Then all the bad days
They’re nothing to me
With you

Winter bear
Ooh, ooh, ooh
Sleep like a winter bear
Ooh, ooh, ooh
Sleep like a winter bear"

Su cachorrito pareció calmarse al escuchar la voz de su papi Omega. Tae sonrió al sentir la misma paz y al querer tener a su bebé ya en sus brazos.

Sintió unas manos rodearle su cintura y unos cálidos besos en su nuca.

—Cantas precioso —le dijo su alfa.

—No es nada —habló Tae con las mejillas sonrojadas.

Hoseok abrazó con más fuerza a su Omega, claro, sin llegar a lastimarlo. Pero muchas veces, y a pesar de ser un alfa, tenía miedo. Miedo a perder a su familia; su padre, madre y ahora a Moon Byul junto a su Omega y próximo heredero. 

—Puedo sentirlo, pero ahora yo también he prometido defenderte. Defender a quienes amo. Lo sé Hoseok, hay cosas que simplemente no podemos ignorar.

—Perdón por llenarte de mis preocupaciones. Ahora tenemos un cachorro en camino y esto es injusto para ti.

—Injusto sería no saber lo que pasa por tu mente y no ayudarte a siquiera calmar tus pesares. Recuerda Hoseok, ya no estamos solos, ahora somos uno.

Abrazo y beso profundamente a su Omega. ¿Cómo no iba a amar a semejante Omega? ¿Cómo no luchar por él y por su hijo?