A tu lado [HopeV] Omegaverse

32

Tres meses después...

Taehyung estaba preparando un delicioso pan casero junto a un guisado. Estaba esperando por Hoseok quien había salido a cazar y por un poco de leña.

Su vida estaba siendo demasiado perfecta. Hoseok no se negó a aprender del omega quien le enseño a cosechar, limpiar e incluso le ayudo un poco con la caza de conejos quienes eran más escurridizos que cualquier otro animal. Claro, todo esto antes de que se empezara a notar más su pancita. Ahora se cansaba más y su cachorro empezaba a reconocer ambas voces y comenzaba a moverse cada que Hoseok llegaba y daba un pequeño beso en su barriguita.

En su estadía en la cabaña la conexión con su madre había sido casi nula. sin embargo, ella le explico acerca de los riesgos si se comunicaban muy seguido. Pero aún podía sentir la protección de su madre por medio del dije que le había sido regalado. O tal vez simplemente es lo que quería creer.

Sintió el aroma de su alfa cerca y salió a recibirlo. Sin embargo, venia cojeando a lo que Taehyung camino rápidamente a ayudarlo y pedir una explicación.

—¿Que ha pasado? ¿Nos han encontrado?

Taehyug se estaba alterando. Desde que llegaron Hoseok no lo quiso guardar ningún secreto, grave error. El omega se había vuelto más paranoico, aunque no siempre lo demostraba, sin embargo, él se mantenía muy alerta y más cuando los meses pasaban y su pancita crecía junto a él.

El omega estaba bastante alterado.

—Tae, mírame —al tener la atención del omega y un poco más tranquilo le explico rápidamente —. Al regresar no calcule mis movimientos sobre el rio y había una gran piedra la cual me hirió esto. Estamos bien tae, nadie más sabe dónde estamos.

El omega respiro unas veces más hasta calmarse. Asintió y le pidió a Hoseok quitarse sus botas para poder curarlo.

Al estar de rodillas, Taehyung se dijo así mismo que se calmara. El ha estado aprendiendo a defenderse, sin embargo, cada vez su lado omega se hace más paranoico y agresivo ante cualquier sonido.

Todo esto sucedió desde hace dos meses, cuando todo parecía ir perfecto.

[Flashback]

—Tae, le prometí a mi padre estar al pendiente cada mes sobre lo que pasa en el reino. El me insistió diciendo que es mejor que estemos seguros, pero no debo dejarlo, no ahora.

Tae sintió una opresión en su pecho y entendía a su alfa. Ahí esta su pueblo, su madre y su padre. Ellos no sabían nada del pueblo desde hace un mes y Hoseok sabia que es tiempo de ir a apoyar a su padre.

—¿Cuánto tiempo estarás fuera?

—Dos días a lo máximo. No pienso dejarte tampoco.

Tae asintió. El también quería saber sobre la situación del pueblo. Así que preparo comida para el camino y después de un largo beso, Hoseok se marchó.

Por su lazo se comunican y se sienten uno al otro. Pero en esos momentos un escalofrió le recorrió la espala a Tae, algo no estaba bien...

[Dos días después]

Hoseok venia cabalgando con el corazón destrozado. Le había prometido a tae que no había nada grave, pero claro, su lazo decía lo contrario.

Al estar cerca de la cabaña sintió el aroma tenue de Tae logrando que se calmara un poco. Y al estar cerca de la puerta vio a su omega esperando por el como un cachorro al esperar por su dueño. Algo bastante adorable en él.

El omega lo recibió con brazos abiertos y una cena maravillosa. Sin embargo, había llegado la hora de hablar.

—cuéntame que sucedió allá.

El alfa respiro profundamente y toco el vientre de su omega y con la otra mano sostuvo una mano de su omega sintiendo así la fuerza suficiente para poder hablar.

—Quiero que respires y no te alteres.

—Hoseok, estamos bien —Tae lo dijo al sentir la preocupación del alfa por los dos.

—Cuando iba llegando a las orillas del pueblo —comenzó a relatar — se podía sentir un ambiente pesado, los arboles empezaban a perder color y al llegar al pueblo —Hoseok mordió su labio para intentar detener sus ganas de llorar — todo parecía gris. Yacían cuerpos de ancianos, adultos, jóvenes y niños en el suelo. La bruja esta arrasando con todo a su paso. Mi padre empezó a llamar a los reyes de otro pueblo, sin embargo, las respuestas han sido casi nulas por que le temen a la bruja. Esta intentando crear un ejército, pero apenas son unos cuantos. Mi madre intenta ayudar en todo lo posible porque mi padre... —Las lágrimas de Hoseok empezaron a fluir —- El esta cada día más débil. No quiere demostrarlo, pero puedes verlo a través de su piel y sus ojos. Temo perderlo. 

El alfa lloro en los brazos de su omega como si de un niño pequeño y asustadizo se tratase. También conto sobre una pequeña guerra que hubo con unos licántropos. Unos seres que no llegan a ser ni humano ni lobos, gobernados por la misma bruja.

—También en mi camino de regreso tuve un encuentro con uno de ellos —Hoseok sintió su lazo tensarse—. Pero logre matarlo antes de que el me hubiera hecho algo.

—Hoseok, ¿Y si ya saben dónde estamos?

Hoseok ciertamente no pudo responder a eso, ya que el tampoco estaba seguro.

[Fin Flashback]

Desde ese día Taehyung ha estado más alerta. Hay noches que no puede dormir por estar atento a todo lo que pasaba. Hoseok apenas y podía calmarlo al decirle que ya habían pasado dos meses y nada más había ocurrido desde entonces. Sin embargo, su omega no podía entender eso ya que el instinto de protección estaba aumentando cada día más y más al estar más cerca del día de dar a luz.

Tocaron la puerta y ambos se tensaron. Sin embargo, al sentir el aroma conocido Taehyung se levantó rápidamente y abrió la puerta con los ojos llorosos.

—¡Mamá! ¿Qué haces aquí?

La Diosa luna lo recibió en sus brazos sintiendo a su pequeño llorar entre ellos. La protección la sintieron ambos al estar con ella en casa.

—He venido a avisarte que te asistiré en el parto.

Taehyung agradeció a su madre. Aun faltaban unos meses, sin embargo, aún no habían discutido ese tema y su madre seria más que perfecta para esto. No podían arriesgarse a traer a nadie más a la cabaña si que fueran descubiertos antes. También pensó tenerlos en su forma lobuna, pero eso adelantaría mucho las cosas y se perdería del crecimiento de su bebé.

Hoseok saludo a la diosa. Sin embargo, sabia que aquella visita tenia más de un propósito.