12.

507 54 23
                                    

Lucia.

— ella es novio de el?— me preguntó sobre la
película cuando se acostó junto a mi.

— si, pero ella está enamorada de su hermano— le dije
llevándome un bocado a la boca, de pronto lo miré.

— qué miras?— me pregunta.

— ¿por qué le mientes a tu mamá?

— eso no te importa—  dijo con su típico tono de voz, sexy.

—  hmm tenes razón

No lo pensé ni por un segundo, y comencé a
besarlo, me subí puse sobre el a horcajadas.

Joaquín me miraba extrañado y sorprendido por mi actitud, recorría sus manos por mis caderas, yo inmediatamente le bajé los pantalones para luego bajar su bóxer. Para esto el bulto de Joaquín seguia caído todo fue tan rápido que aún ni se excitaba, puse su miembro en mi boca, lo lamí unas cuantas veces y ya se había puesto como yo queria; erecto. Lo volví a meter a
mi boca, él jadeaba, yo tenía el control esta vez, no
faltaba casi nada para que se corriera.

—queres más? — le pregunto con una sonrisa
picara.

— oh si nena, claro que quiero más.

— que lastima le digo riendo— me hice a un lado y
lo dejé con todas las ganas de penetrarme, estaba
a punto de llegar al orgasmo y lo dejé, saben lo
frustrante que es eso? Imagínense como deje a Joaquín, atónito no lo podía creer, estaba con todas las ganas encima.

El simplemente me miraba impactado, para mí que nunca ninguna mujer lo había dejado con las ganas, pero dicen por ahí que siempre hay una primera vez para todo.

— por qué hiciste eso?— me pregunta aún con sorpresa.

- ay Joa, es mejor que te guardes tu miembro,
no vaya a ser cosa que se te empiece a tullir- le dije
sin parar de reír, estaba tentadisima riéndome.

De pronto vi algo que tal vez nunca imaginé ver,
cuando estaba inventando todo este plan, Joaquín
se comenzó a reír conmigo.

Comencé a comer la comida china aun riéndome,
Joaquin se seguía riendo, si ahora se ríe, con su
bella sonrisa, se subió el bóxer y los pantalones.

— a que se debe esta venganza?— me pregunta.

— para que te des cuenta que no eres tan irresistible
como crees- dije mirando la película

— tan irresistible?— me pregunta en tono de broma,
yo asiento riendo mientras lo miro

— idiota— susurro

— qué?.

— eso idiota, crees que eres irresistible, que sos único, créeme que eh conocido hombres más
guapos que vos— digo desafiante.

— esa no te la creo, hombres más guapos? a caso el
imbécil de Diego? Ah, no o el imbécil de tu jefe?- me
pregunta parándose de la cama. Este tarado se había enojado.

— primero que nada— me paro al frente de él
desafiante— Diego, es guapo pero imbécil como vos,
segundo, mi jefe no es ningún imbécil de hecho me
atrevería a decir que es mucho pero mucho más guapo que tú— digo mirándolo fijamente con mis ojos oscuros.

— no me digas.. — me dice- y yo asiento— pues no te creo- me agarra de la cintura— no te creo— me vuelve a repetir, esta vez en susurro cerca del oído.

Me empezó a besar apasionadamente, acaricia mi cuerpo entero, obviamente yo correspondo a sus besos. Ambos estábamos agitados, demasiado agitados, mis brazos abrazaban la fuerte espalda de Joaquín.

Sexo con Timidez Donde viven las historias. Descúbrelo ahora