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Lucia.

-él me explicó lo sucedido, también dijo que te merecías lo mejor, por eso fue a buscar algunas cosas que le dejó su abuelo

-no era necesario -le dije entre lágrimas -tal vez
nunca volverá, no mami, él no me pudo haber dejado,
no por favor dime que no es cierto -le supliqué. mientras lágrima tras lágrima salían de mis ojos.

*Tres Meses Después*

Me dirigía corriendo al baño, era la quinta vez en el día que vomitaba, lo sabía.. o al menos lo percibía, tenía que sacarme mis dudas pero, no aún no, quiero esperar, tal vez es solo un malestar.

Hace tres meses que no veo a Joaquín, me llama todos los viernes para para preguntarme como estoy, nos comunicamos por WhatsApp y las redes. El sigue diciendo que fue en busca de nuestro bienestar. No sé lo que planea, solo se que lo extraño.

A mi padre ese día después de hablar con mi mamá, lo mandé al demonio, por haberme alejado tanto tiempo de la mujer que me dio la vida y haberme hecho pasar años al lado de una persona la cual me odiaba, y despreciaba. Me enteré que sigue en Buenos Aires, no ha vuelto a Europa.

Ayer vino Sergio a visitarme, me pidió disculpas por lo de aquella vez, me ofreció trabajo pero lo rechacé. Es que siendo sincera no me he sentido bien últimamente.

Sali del baño, con mis ojos llorosos.

-no crees qué hay que ir a la farmacia? -me pregnta con una sonrisa en el rostro Engracia.

-si, tienes razón -susurré.

Así fue, llegamos a la dichosa farmacia, yo estaba temblando entera. No sabría que hacer si sale positivo.

-un test de embarazo -le pedí a la chica apenas entramos a la farmacia.

Pagué y enseguida volvimos a casa. Al llegar antes de entrar al baño, leí detenidamente las instrucciones. Me senté en el sofá, estaba muy nerviosa. Mi mamá se sentó a mi lado.

-tienes que estar tranquila -me dice tomando de mí
mano -tienes mi apoyo, sabes lo que te amo hija.

-gracias ma, no sabes la falta que me hiciste todo este tiempo, me haces sentir mucho más calmada. Aunque a veces pierdo la tranquilidad, pues yo me metí en esto, no? -me metí al baño, me miré al espejo.

Estaba sudando, bajé mis pantalones e hice
todo lo que tenía que hacer, a los minutos estaba
esperando los famosos resultados, esto si que se
demoraba, mire a todos lados de pronto salió la
primera rayita.

-ay joder, me están comiendo los nervios -de pronto salió otra rayita más. Mis ojos se llenaron de lágrimas. Era una mezcla de emoción y miedo. Salí con el test a la sala.

-¿qué salió? -me preguntó Engracia, la quedé mirando y susurré

-positivo, estoy embarazada...

-ay mi Niña! -corrió a abrazarme -felicidades mi
amor, que feliz me estas haciendo, seré abuela -dijo
abrazándome con más fuerza, luego de los minutos
me soltó, yo aún estaba completamente impactada,
embarazada, embarazada aquellas palabras
resonaban en mi mente.

Mi madre me miró, nos sentamos en el sofá, tenía mis
ojos llenos de lágrimas, ella tomó de mi mano

-puedes contar conmigo, siempre -me dice con una gran sonrisa en su rostro.

-gracias -fueron las únicas palabras que salieron de mi boca en ese momento.

-que ocurre, no estás feliz? es eso?

Sexo con Timidez Donde viven las historias. Descúbrelo ahora