¿En Qué Estaba Pensando? (TERMINADA) (Spider-Gwen x Ladypool)

No podía evitar hacerlo

...

— No estoy segura de esto...—

— Cálmate Gwendy, ese tipo "S" dijo que aquí era...—

— ¿Esperas que eso me haga sentir más mejor?—

— No te preocupes... Sí algo sale mal, tal vez mis poderes nos salven...

— ¿Ya me dirás cuales son?—

— Será una sorpresa...—

— No te entiendo... ¿Porqué tiene qué serlo? Qué extraña eres...—

Habían pasado varias semanas desde esa vez en el bar, el anónimo se había convertido en su informante, se comunicaban através de ese número qué les dió, por alguna razón quería qué Host fuera capturado. Gwen no se sentía del todo confiada, era demasiado bueno para ser cierto, aunque... Sus mensajes eran acertados, habían estado muy cerca de quienes tratan con el sujeto en lugares abandonados o los menos considerables... Hasta ahora.

S les envió un mensaje diciendo les que Host estaba en una vieja sala de emergencias abandonada... No se esperaban encontrarlo tan pronto, por su puesto, Wanda no dudó en ir pero Gwen no estaba convencida.

Sigilosamente ambas entraron a el oscuro lugar, repentinamente una luz se encendió, una lámpara en la mesa del recepcionista.

— Lo siento señoritas... Llegan tarde, Host se ha ido...— Dijo una voz tosca pero algo familiar.

Era un tipo desconocido castaño, bien parecido, sentado en esa mesa, mirando las cínicamente.

— Oye... Te conozco... También estás en la base de datos de criminales en la policía, eres... Str...— Mencionó Gwen olvidándose de el nombre.

— Strike, y me alaga qué pienses en mí Ghost-Spider...— Dicho ésto, el hombre se acercó descaradamente hacía la chica, tomó su mano y le dio un suave beso en la antepalma de forma caballerosa. Gwen por alguna razón no pudo evitar que pasara.

— Oye-oye ¿¡Qué crees que estás haciendo fulano!?— Gritó molesta Ladypool apuntando sus armas contra él lista para disparar.

— Cálmate, solo es un saludo...—

— ¿¡Quieres calma!? ¡Pues yo te haré descansar en paz sí sigues de coqueto!—

— Ladypool, está bien... Sé que hacer...— Habló Gwen, causando confusión en su compañera.— Escucha, podemos evitar qué hagas un berrinche antes de mandarte con los policías o...—

— ¿Me amenazas?—

— ¿Pues qué más podría ser? genio...—

— Eres muy cruel... Qué lástima, me empezabas a gustar.—

— Uy si, mira como me afecta...— Dijo sarcásticamente la chica.

— Pero bueno, fue un placer conocerte antes de qué mueras... ¡Ya pueden salir muchachos!— Dicho ésto el se alejó de ellas y a su alrededor habían varios tipos con armas apuntando las.

Ambas se quedaron heladas, pensando como escapar.

— Wanda... ¿Algún plan?...—

— Tranquilizate, sé qué hacer... Voy a obligarlos a dispararnos...—

— Wanda, ¡¿estás loca?!—

— ¡No! ¡Estoy caliente!— Dicho ésto empezó a caminar como sí nada.— Oigan... No tienen qué matarnos justo ahora... ¿Enserio le temen tanto a ese sujeto? No pueden matarnos, antes de que yo le diga unas cuantas cosas a el galán de Strike.—

— ¿Ahora qué lunática?— Preguntó un poco irritado, muy distinto a como era hace unos minutos.

— Tú no tienes derecho a toquetear a mi chica Gwen ¿oíste? ¿Crees qué puedes venir con tus encantos masculinos y seducirla?—

— Si.—

— Oh, pues, mala suerte... A ella no le interesas...—

— ¿Ahora qué está haciendo? Hará qué la maten...— Dijo en voz baja Gwen algo incomoda.

— Ok, entonces sí es cierto, besala.—

Todo el lugar quedó en silencio.— Será lo último qué hagas antes de morir, rápido ¿qué esperas?—

— Espero qué quedes bien ardido...— Dicho ésto, Wanda empezó a acercarse a Gwen, haciendo qué esta se sintiera aún más incomoda.

Ambas estaban frente a frente.— ¡Wanda! ¿¡Qué-que estás haciendo!?— Dijo nerviosa.

— Tranquila... Confía en mí...— Su voz era distinta, era más suave y dulce.

Gwen estaba confundida y avergonzada y asustada, eran muchas emociones juntas esparciendo se por su mente. Pero en el fondo, no podía evitar querer hacerlo...

Levantaron sus máscaras hasta sus narices, estaban tan cerca qué sentían el aliento de la otra, por su puesto, Gwen estaba demasiado sonrojada.

Muy cerca de juntarse, Wanda repentinamente tomó una de sus pistolas y les disparó a varios sujetos a su alrededor pero no era tan rápida.

Por lo que, quienes aún quedaban abrieron fuego contra ambas. Wanda se posó frente a su amiga para recibir las balas, Gwen estaba horrorizada.

Cuando se acabaron sus municiones, Gwen los detuvo a todos con sus telarañas. Vió a Wanda en el suelo con su cuerpo destrozado por los impactos y estaba apunto se sintió terrible.

Buscó a su alrededor a Strike, pero no estaba, había escapado seguramente.

Se quitó su máscara y la de Wanda, apoyo el cuerpo de ella contra el suyo abrazándola sentada en el suelo.— ¿Porqué lo hiciste?...— Ella rompió en llanto y la abrazó aún más fuerte.

Así fue por unos minutos... Hasta qué...

— Debes sobrevivir, Rose... Deja qué mi cuerpo se sumerga en el frío océano, ya no llores por mí...— Repentinamente Wanda volvió a hablar.

Gwen por su puesto estaba atónita y sin palabras.— Oh, cierto... Regeneración acelerada.—

— ¡¿Qu-qué?!—

— Si, es asombroso, cualquier herida mortal que sufra puede sanarse rápidamente, aunque está el tema del fuego... No sé qué me pasaría sí me quemó completamente, no habría nada qué regenerar sí solo soy un montón de cenizas... Eso creo... ¿No?—

Gwen la abrazó inesperadamente... Enserio, esperaba un golpe o algo por haberla hecho creer que había muerto, pero no.

— Eres una idiota ¿Porqué tenías qué fingir? Te ví morir, lloré por tí.—

— Awww, eso es muy dulce.—

— Olvídalo, vamos enseguida. Ahora hay otro sujeto que detener.

...

— Luego de eso, nos volvimos muy cercanas, creo qué... Aveces suelo perder el control con ella pero, siempre logro arreglar todo... Esta vez... Parece que no fue así, Peter.—

— ¿Y sí no fue así? ¿Y sí algo malo le ocurrió?—

— No lo sé... Pero ya no importa... Ella no confía más en mí, cree que soy débil y me alaga por ser fuerte al mismo tiempo... No sé qué hacer...—

Peter se levantó repentinamente de la banca.— ¡Ve por ella! No importa sí quiere o no, es tu amiga y te necesita aunque no lo reconozca, demuestrale que estas dispuesta a morir por ella.—

Gwen dudó un momento pero luego se dió cuenta de que tenía razón.— ¡Si! No me importa ¡Me necesita y yo a ella! ¡Gracias Peter!— Dicho ésto dejó a su amigo y se fue corriendo rápidamente.

Su sentido arácnido había estado actuando extraño desde qué conoció a Wanda, pero en está ocasión, la guiaba hacía el desembarcadero de esa vez.

Así que apuró su paso.

...