AUN TE AMO - JiKook

16

El resto de la tarde noche la pase muy agradable con Min, había aceptado el hecho de intentar algo a su lado, y olvidar de una vez a Jungkook. Fue muy agradable estar con Min, a cada momento podíamos reír de algunas anécdotas, en algunos momentos llego a darme algunos cumplidos, causándome un sonrojo de vez en cuando; claro que no me quede atrás ya que también se la devolvía con comentarios sobre lo tierno que es nervioso o su similitud con un pequeño gatito.

Estuvimos caminando un rato después de nuestra cena en un restaurante, solo que ahora estábamos sumidos en un silencio muy cómodo. Me encantaba la vista que tenía de la ciudad oscura, aquellas vistas las había aprendido a apreciar más desde que decidí estudiar fotografía.

Me encontraba tan inmerso en mis pensamientos que no sentí cuando Yoongi comenzó a acercar su mano a la mía, solo hasta que sentí como entrelazaba nuestros dedos.

-Min...-

-No digas nada Jimin, solo déjame sostener tu mano- miro directo a mis ojos- por favor-

Y así como lo pidió, no dije nada, continuando nuestro camino al edificio donde vivíamos.

Al llegar subimos al ascensor, presionando el piso en que cada uno vivía, al yo vivir en una zona más baja, mi destino era antes, por lo que al abrir las puertas del mismo solté el agarre que aún manteníamos; puse un pie fuera, mismo que regresó porque Yoongi jalo de mi manga nuevamente.

-Jimin, gracias por todo- su vista estaba clavada en nuestros zapatos- Prometo hacer lo posible para que sientas lo mismo que yo siento, y espero me perdones- lo último no lo entendía, por lo que decidí contestar algo con respecto a lo primero.

-Creo que yo te agradeceré a ti, la pase muy bien Min- sonreí e intenté que soltara mi mano, pero su agarre se hizo más fuerte- es hora de irme, nos vemos maña- las palabras quedaron retenidas, debido a que unos pequeños y delgados labios hicieron presión en los míos.

Abrí más mis ojos, encontrándome con que Min estaba justo en mi cara, besándome... no sabía qué hacer, por lo que solo me quede quieto, se separó lentamente y pego su frente a mi hombro- Lo siento- soltó mi brazo y cerró inmediatamente las puertas del ascensor.

Me quede en el mismo lugar por un tiempo indefinido ¿El acababa de besarme? Un gesto muy tierno, ahora entendía por qué se disculpó desde antes. Aquello esperaba que causara algo en mí, pero no fue así... En esos momentos solo deseaba que quien hubiera actuado de esa forma fuera Jungkook. Esta tarea de dejarlo ir sería más difícil de lo que pensé.

Un nuevo día se asomaba, la mañana se veía muy hermosa pero eso no evito que mi humor fuera de lo peor. Al parecer la frustración de ayer por saber qué Kook estaba en una relación, apenas hacía acto de presencia. Me levanté rápido y aliste para ir al trabajo, no quería toparme a Yoongi y hacerlo pensar que mi actitud era por lo de ayer, aunque eso también lo teníamos que hablar.

Camine desde el edificio a la cafetería, necesitaba despejar mi mente, para así tener la actitud necesaria para el trabajo; obviamente llegue con retraso, por lo que los regaños de Seok Jin no se hicieron esperar.

-¿Por qué nuevamente estas tarde niño? ¿Qué no ya habíamos hablado sobre lo retrasos?- su tono era grueso, odiaba que me hablara como si fuera un pequeñito, y más el hecho de que Namjoon no opinaba nada por miedo a su pareja.

-Jin no estoy de humor, lo hablamos luego- me di media vuelta con la esperanza de que el tema quedara ahí, pero la suerte nunca estaba de mi lado.

-NO TE HE DICHO QUE TE RETIRES JOVENCITO- ¿Ahora me estaba tratando como su hijo? Esto no terminara muy bien- Yo tampoco estoy de humor para aguantar tus berrinches Jimin- se paró de su asiento- Escúchame bien Jimin, si tuviste un día de mierda, no lo descargues en mí, suficiente tengo con que llegues tarde para que ahora- no quería seguir oyéndolo, así que sin dejarlo terminar me di media vuelta y golpe con el puño su escritorio.

-Mejor escúchame tu a mi Seok Jin- mis ojos se posaron en él, ignorando por completo a Namjoon quien estaba atónito por mi acción de hace un momento- Desde ayer mi día es una completa mierda, solo en minutos me sentí destrozado y también confundido, ayer pude ver como el hombre del que he estado enamorado por más de cuatro años era recibido cálidamente en los brazos de una chica, la cual déjame decirte es su novia- lagrimas empezaron a salir, todo a causa de mi impotencia reunida- Todo para después salir con un chico el cual me da miedo lastimarlo por no poder corresponder sus sentimientos ¿Y sabes que es lo peor?- lo mire esperando una respuesta, cosa que no llegó- Lo peor es que aquellas acciones que hizo este chico solo me hacían desear que Kook estuviera en su lugar-

No aguante más, y caí en la silla nuevamente, todas esas lágrimas que ayer pudieron ocultarse con risas, al fin salían. Sentí como unos brazos delgados me rodeaban, gire mi vista y ahí estaba Jin abrazándome; era raro recibir cariño de su parte, pero sin duda eso era lo que más necesitaba, cariño de la persona correcta.

Siempre se había encargado de cuidarme, y aunque detestaba que me tratara como un niño la mayoría de veces, siempre le agradecía. Cierto que Namjoon siempre era el que me daba cariño y llegaba a consentir de muchas maneras, pero el que mantuvo una fuerte imagen paterna para mí, era Seok Jin; cuando ingrese a la Universidad, él fue quien me dejo hasta la puerta, dándome consejos para mi nuevo rumbo. Cuando me enamore por completo de Jungkook, él estaba ahí, amenazandolo para no romper mi corazón. Cuando le propuse matrimonio, él era quien derramó las lágrimas por el nuevo paso... Cuando me dejaron en el altar, él fue quien cuido a cada instante de mí, ayudándome a seguir adelante.

Ahora, nuevamente era él quien me abrazaba, dándome todo el apoyo que necesitaba en estos momentos...

-Perdona Minnie- su voz estaba entrecortada- no llores más por favor, lo siento por gritarte, sé que esto no es fácil para ti, pero en el fondo sabes que es lo mejor- sus manos acariciaban mi cabello- no sabemos qué nos espera en el futuro, pero sin duda será algo que enfrentaremos juntos, sé que odias que te trate como un niño, pero ¿Cómo no hacerlo si te conozco desde que estabas más chico? ¿Cómo no quieres que lo haga si vi cómo te hiciste todo un hombre? Además de que te comportas como uno- una risa salió de mi boca- ¿Sabes por qué aún no hemos adoptado a un pequeño?- pregunto removiendo un poco su cuerpo para que lo mire al rostro.

-¿Por qué no te gustan los niños? ¿Por qué aún no están casados? ¿Por qué el pequeño mejor escaparía por tu carácter?- respondí mientras limpiaba algunas lágrimas de mi rostro

-Tal vez, suena lógico y muy gracioso Park- respondió a cada pregunta limpiando los rastros de alguna lágrima y me sonrió- La verdadera razón es porque ya tenemos uno- lo mire confundido- desde hace siete años que pareciera que nosotros tenemos un niño, y ese eres tu Jimin- rodeo mis hombros- eres mi pequeño Jimin, te he visto crecer y he notado como cada día eres un hombre más fuerte, logrando todo lo que te propones, cierto que no te tuve cuando eras un mocoso, pero aun así no sabes lo orgulloso que estoy de que seas como lo eres, y más aún haber soportado varias de tus facetas de joven rebelde-

Sonreí por todas las palabras que dijo, él no me decía nunca lo que pensaba, pero el hecho de hacerme saber lo importante que era yo para él me reconfortaba. Lo abracé nuevamente, y en instantes sentí como otra persona se unía a nuestro abrazo, Namjoon quien todo este rato se quedó en una esquina en silencio, ahora nos abrazaba a ambos mientras sollozaba.

-Gracias, no saben lo mucho que los quiero-

No éramos una familia unida por lazos sanguíneos, pero sin duda el cariño que sentíamos entre los tres nos hacían ser una, pequeña, pero era mi familia. Podría decir que ellos eran la fuerza de mi vida para seguir adelante, y solo saldría de todos mis problemas para ver que ellos estuvieran orgullosos de mí.

Soltamos nuestro abrazo y nos miramos con una sonrisa. Era lindo estar así con ellos, pero mejor era romper la atmósfera antes de que comenzaramos a llorar de nuevo.

-Bueno... creo que mejor regreso al trabajo- me levanté de la silla y me dispuse a salir

-Está bien Jimin, que no se repita, y cualquier cosa ya sabes que aquí está mi oficina para que me cuentes- respondió Jin, recomponiendo su postura y arreglando un poco su maquillaje que quedó arruinado por llorar. Sonreí y salí.

Al momento en que voltee a cerrar la puerta, vi la hermosa escena de un Namjoon orgulloso de su novio, a quien abrazaba fuerte aun soltando unas pocas lágrimas, mientras el pelinegro acariciaba su cabello en señal de calmarlo.