15

41 2 2
                                    


Me encontraba en mi trabajo, ya había pasado un tiempo desde que pise el establecimiento, y lo que me sorprendió fue que Min no tocó el tema de ayer desde mi llegada. Lo agradecía internamente, a pesar de que lo pensé gran parte de la noche, aun no le tenía una respuesta, y es que el hecho de volverme a enamorar de alguien que no era Jungkook me aterraba.

Pasaron las horas y nada, incluso podía admitir que el ambiente estaba algo tenso en todos los que trabajamos en el local, buenos casi todos; Tae se encontraba hablando en el mostrador con Hoseok, quien había ido a visitarlo en su hora de almuerzo. Ese chico era realmente atento con mi amigo, y el hecho de verlo sonreír de esa manera, me mantenía feliz, aunque claramente yo tenía varias cosas por aclarar con él aun, aquella incertidumbre no se alejó de mí, y esta aumentó más cuando Kook se acercó a saludarlo muy amistoso ¿Cómo es que se conocían?

-Hey Jimin, saliendo vamos a comer a algún lado ¿Te parece?- Min interrumpió mis pensamientos.

-No lo sé Min... Creo que se tus intenciones de esa comida, y no estoy seguro aun- confesé algo apenado, pero era mejor decirle la verdad, a hacer que se ilusione.

-No te preocupes por eso Jimin, te esperare lo necesario, solo, vamos a comer como amigos- y me mostro sus sonrisa de gomita, ese chico estaba aprendiendo a manipularme.

-Está bien Min... Saliendo me esperas y vamos juntos- solté resignado.

Yoongi me dio un rápido abrazo que lo sonrojo de una manera muy tierna, y finalmente se retiró. Es un buen chico, pero no quiero lastimarlo, mis sentimientos por Kook siguen intactos, y el hecho de aceptarlo sería cruel.

-Debo pensar como decirle...- pensé en voz alta.

-¿Decirle que a quién?- oí esa pregunta de la persona que trataba de evitar a toda costa. Su repentina aparición me provocó un pequeño susto- perdón, no quería asustarte, pero te escuche hablando solo y pensé que sería buena oportunidad para que hablemos- y me mostró esa sonrisa de conejo tan brillante como la he recordado.

-No hay problema Jungkook- me gire completamente a él, si quería superarlo en algún momento, era mejor confrontarlo y acostumbrarme a su presencia ya que lo tenía que soportar un mes completo- dime ¿De qué quieres hablar?-

-Oh pues... Podríamos conocernos un poco más, creo que hemos empezado con el pie izquierdo, me gustaría que fuéramos amigos- ¿AMIGOS? Ok, creo que con eso me altere un poco ¿Podría ser amigo de aquel que me rompió el corazón e incluso pareció olvidarme? Supongo que podría aceptarlo, sería un gran paso para por fin olvidarlo.

-Me parece bien- sonreí amable, y acomode mi postura- Hola Jungkook, son Park Jimin tu compañero de trabajo- extendí mi mano, a lo que es castaño soltó una risa.

-Mucho gusto Park Jimin, mi nombre es Jeon Jungkook tu compañero por lo que resta de este mes, un gusto- y junto su mano con la mía. En cuanto sentí su tacto mi corazón se aceleró, sus manos eran más grandes que las mías, tal y como lo recordaba, omitiendo el hecho de que ahora está tenía abundantes tatuajes; empezó a reír algo avergonzado y retiró su mano- sabes, te me haces muy conocido Park-

Aquellas palabras golpearon mi pecho fuertemente, realmente parecía que era la primera vez que hablamos, dándome a entender que efectivamente me había bloqueado de su mente.

-Jaja, que ocurrente eres Jungkook- solté sin más, no sabía que responder ante aquello- ¿Qué hora es? No quiero que Jin me regañe por no estar a tiempo en mi zona- comente cambiando de tema.

Miró su muñeca donde se encontraba un lujoso reloj negro- pues tenemos menos de media hora para conversar, así que dime Park ¿Qué haces en tus ratos libres?- y así es como dimos comienzo a una muy amena plática, aquellas que me transportaron a unas semanas antes de ser pareja, cuando apenas nos conocíamos, era todo igual, ambos haciendo preguntas al otro para conocernos mejor, saliendo entre ellas alguna broma que nos hacía estallar de risa.

AUN TE AMO - JiKookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora