Parte 2

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Brianna

No veo a Maximo en las áreas reservadas, así que asumo que esta en su oficina, voy en camino cuando él va saliendo de ella a encontrarme, me sonríe, me abraza efusivamente y me da un sonoro beso, me mira de arriba abajo, y me hace dar una vuelta.

– ¡Felicidades, Amor!, vamos a disfrutar mucho este día.

– ¡Estas hermosa Brianna!, voy a ser la envidia de todo el lugar, no puedo esperar para quitarte ese vestido. – dice susurrándome al oído.

– Por Dios Maximo, ya habrá tiempo para eso. – le guiño un ojo – anda y vamos que ya hay gente esperando por ti.

Me suelta con desgana, toma mi mano y vamos rumbo al reservado donde se encuentran ya varias personas. De los invitados ahí veo que ya está MaryAnn, Thiago, la novia de Alejandro... pero y Alejandro, ¿acaso no vendrá?, despejo mi mente y mientras felicitan a Maximo, saludo a MaryAnn, me dice que la fiesta es perfecta y que todo esta genial.

Traigo a MaryAnn a nuestra mesa y claro ahí esta Kassandra, nos miramos y solo asentimos en forma de saludo, es muy claro el desagrado de la una por la otra. Le presento mi novio a MaryAnn, se saludan y empezamos a convivir.

El alcohol no deja de llegar a las mesas y el festejo va en crescendo, todos brindamos y con las primeras botellas de Crystal, llega Thiago al lado de Alejandro, puedo ver como la novia se le va a yugular, Dios esa mujer me desespera, volteo y Thiago me esta observando, se acerca y nos saluda a mí y a MaryAnn, ese hombre me cae muy bien, tiene algo que lo hace atractivo, será su buen humor o su desfachatez al hablar y halagarme estando enfrente Maximo, en fin cuando él esta la pasamos muy bien.

En el antro retumba la música de felicitaciones a mi novio, y llega su pastel con el numero 30 y sus velas saltando chispas, se ve feliz y contento, y eso me da satisfacción, poder ser parte de esto y estar en su vida, me toma por la cintura, sopla las velas, me besa y todos decimos salud... yo ya me siento mareada, pero aún lejos de estar borracha. Seguimos brindando Maximo sigue presentándome a gente, gente que sé que mañana no voy a recordar, me rio para mis adentros, pero bueno supongo que esa es función como novia del cumpleañero esta noche.

He notado a Alejandro viéndome en varias ocasiones, pero claro si yo lo he notado, él también me ha notado a mi viéndolo, me siento mal pero no puedo evitarlo, tengo que parar esto porque no es justo para Maximo, él es un gran hombre y aunque nuestra relación apenas es joven, sé que me quiere, yo sé que lo quiero, pero Alejandro me puede...

La música está en su mero apogeo, la gente comienza a bailar,y MaryAnn me dice que ballamos a bailar, invito a Maximo y me dice que en un momento me alcanza, le doy un beso, y sigo a mi amiga a la pista.

Bailamos al ritmo la música, y la estamos pasando muy bien, el alcohol en mi sistema empieza a hacer efecto, levanto mis manos y cierro mis ojos, muevo mi cuerpo de un lado a otro y me pierdo... siento unas manos que me recorren mis costados de arriba abajo, ha llegado Maximo, mantengo mis ojos cerrados disfruto su toque, se siente bien, este hombre me quiere poner caliente froto mi nalgas en su regazo y su mano recorre de mi pecho al abdomen, gimo cuando acerca su boca a mi cuello y pone un beso en el... de pronto siento como un empujón casi nos hace caer, abro los ojos rápidamente, siento mi cara arder al ver que el que pensaba que era mi novio no era más que mi "amiga", mierdaaa... veo a MaryAnn mirando a Alejandro con ceño fruncido, cuando él le responde con un perdón.

Estoy desconcertada por la actitud de MaryAnn quiero pensar que es el alcohol lo que ha hecho que actuara de esa forma, aunque después de la forma en que me toco, no lo creo, le digo que nos dirijamos a la mesa y ella asiente normal, como si nada hubiera pasado, sin embargo, yo me siento muy incómoda, voy a tener que enfrentarla y preguntarle que fue eso, pero no es el momento lo dejare para otro día.

Llegamos a la mesa y están varias personas, pero no Maximo, lo busco entre las otras mesas y no esta, necesito alejarme de MaryAnn estoy aturdida y molesta por su comportamiento así que le digo que voy a buscar a mi novio.

No lo veo por ningún lado, supongo que esta atendiendo algo o salió del lugar. Voy hacia el baño, cuando pasando por la puerta de su oficina escucho un ruido de algo que se rompe, sin pensarlo abro la puerta y ahí esta de espaldas a mí, su cabeza metida entre las piernas de una rubia que está casi acostada con una mano en su cabeza y el codo en su escritorio, mi mano se cierra fuerte en la manija y empiezo a temblar de coraje, ella me ve, sonríe y lo alienta a continuar...

– Así Max, sigue, ahhh, dime cuanto extrañabas chuparme, contéstame, ahhh – gemía.

– Eres una maldita ¿por qué lo haces?, joder claro que lo extrañaba – hablaba entre cortado mientras continuaba con lo que hacía. – pero es la última vez Aidee, deja de joderme, yo estoy con alguien.

– Max, Max, Max... ¿y donde esta esa?, ella nunca te va a dar esto, nunca te va a hacer sentir lo que yo – se retorcía de placer con su mirada fija en mi y jalando el cabello de Maximo.

Estoy en shock, mi hombre perfecto que no merecía lo que yo estaba haciendo, ¡soy una estúpida!, la rabia me invade, cierro de un portazo la puerta y empiezo a aplaudir... voltea Maximo y me ve...

– Así es Maximo es la última vez... ya no la vas a extrañar mas porque lo podrás hacer las veces que quieras... - grite.

– Brianna, esto...

– ¿Esto no es lo que parece vas a decirme?, Ja ja, ja ¿es en serio? No te preocupes aquí, como era tu nombre, ¿Aidee? si Aidee ya me lo explico.

– ¡Por favor espera vamos a hablar! – decía tratando de incorporarse, pero ella lo aferraba.

– Vete a la mierda Maximo no quiero volver a saber de ti, continúa disfrutando tu cumpleaños hijo de puta...

Mis ojos no podían resistir más y en cualquier momento empezarían a caer lágrimas, mi cuerpo temblaba de coraje, como permití que me vieran la cara de estúpida, no me dolía tanto lo que me hizo, me dolía más mi orgullo, Maximo seguía forcejeando con la mujer, di la vuelta y salí apresurada de ese maldito lugar.

Salgo tan aprisa que no me doy cuenta de la alfombra, el zapato se me atora y estoy a punto de caer, cuando un aroma que reconozco me agarra, lo veo y no puedo evitarlo me abrazo a él, a mi chef, me avergüenzo de esta así frente a él, pero lo único que quiero es que me lleve de aquí.

– ¡Por favor, sácame de aquí! – sollozo en su pecho, me mira y me arrastra a la salida.

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!Feliz domingo! una disculpa, generalmente publicamos los viernes, pero esta vez se nos complico, pero ya nos pondremos al corriente. 

Un saludo a todos los que nos leen ya, y a los que apenas empiezan a leer nuestra historia. 

Con cariño... 

.María y July.

Gastronomía del amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora