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Alargaré un poco el maratón para que este 9M no se aburran y puedan encontrar algo en qué entretenerse<3 sigan resistiendo.

Hyun Jin había llegado a Sandir llamando la atención un poco, aunque pronto los elfos volvieron a sus actividades

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Hyun Jin había llegado a Sandir llamando la atención un poco, aunque pronto los elfos volvieron a sus actividades. El rey de Pimery fue hasta donde se encontraba el padre de Jeong In y amablemente conversó con él avisándole del viaje que tendría pronto, aunque las cuestiones aparecieron, el pelinegro respondió sin dudar y totalmente seguro de lo que haría, finalmente hizo saber que Jeong In iría con él en aquella aventura, cosa que sorprendió un poco a Lino, aunque ya sabía que ambos jóvenes tenían una relación bastante estrecha.

— Obedece en todo momento al rey, hijo, y protégelo.— Indicó Lino a su hijo, quien terminaba de empacar sus cosas.

— No hará falta, mi señor, y será al contrario, yo cuidaré de su hijo, es mi invitado.— Lino amplió una sonrisa al escuchar aquello, estaba tan orgulloso de ese muchacho.

— Cuida de ti, padre, volveremos en varios días.— Jeong In abrazó a su papá por un corto tiempo antes de subir a su caballo.— Volveremos saludables.

— Nos vemos, hijo, cuida de él entonces, Hyun Jin, es mi tesoro.— El rey humano asintió seguro observando como las mejillas de aquel chico se ruborizaban un poco por aquello, pero no podían perder más tiempo, así que tan pronto como pudieron comenzaron a cabalgar en dirección a las costas.

Seung Min se había ocupado, así que despedirse en persona de su amigo fue imposible, sin embargo, dejó una carta en su habitación para hacerle saber que estaría de regreso en días posteriores, además de hacerle saber las intenciones que tenía previstas para elaborar en aquel viaje.

— Jeong In, te ves muy bonito hoy, ¿un nuevo peinado? — Habló el más alto mirándole de reojo.

— Ah, señor... Una amiga de mi padre se ofreció a peinarme distinto para el viaje, así que sí.— Y aunque su rostro siempre estaba libre de cabello, esta vez la mitad superior estaba recogida y decorada con varias trenzas.

— No me llames así, incluso dejé la corona para que no me llames de esa manera cuando estés conmigo a solas.

— Es solo que es complicado hablar sin más con el rey.

— Vamos, soy yo, el mismo chico al que salvaste aquella ocasión, solo que ahora más guapo, ¿no crees? — Jeong In solo rodó los ojos, era obvio que lo era, y en demasía.— Ya, no seas cruel, dime que soy bonito, anda.

El rubio observó unos segundos el rostro del más alto dejando salir al final un suspiro, podía observarlo por todo el tiempo y jamás se cansaría de disfrutar su belleza.

— Eres bonito.— Mencionó Jeong In notándose seguro y sin pizca de duda, cosa que alcanzó a avergonzar ligeramente al otro.

El camino era largo, así que hicieron varias paradas durante este, sin embargo nada emocionante sucedió en ellas, cada uno dormía por su sitio, ninguna amenaza estaba cerca y las mantas que los cubrían eran suficientemente calentitas para ambos, por lo que pasaban noches tranquilas.

En la mañana, luego de la última parada que tuvieron, el calor se iba haciendo presente conforme avanzaban, así que el tipo de ropa que llevaban no era tan adecuada para ese sitio.

— Ven.— Llamó el humano, quién se bajó del caballo para acercarse a Jeong In.— Te peinaré, hace calor para que lo lleves suelto.

— No hace falta, estoy bien.— La frente del rubio brillaba ante la fina capa de sudor, Hyun Jin limpió de ella con su manga negando.

— Deja de ser necio.— Se posó por detrás del elfo comenzando a trenzar el resto de cabello que caía sobre la espalda de este, al final la ató terminando por elevarlo en una coleta.— ¿Mejor?

— Sí, es fresco, gracias, mi señor.— Jeong In pasó su mano por su nuca sintiendo como el sudor iba desapareciendo de su piel.— ¿Quiere que lo peine?

— Mi cabello está mucho más corto que el tuyo, así que no puedo atarlo aún, pero me encantaría peinarte a ti.— Al estar frente al príncipe le sujetó de las manos.— Jeong In...

El sol era fuerte y los cubría por completo en ese momento, sin embargo, la fresca brisa que corría por las costas les hacía olvidarse de aquel acalorante sol. Jeong In sentía como su corazón golpeteaba con fuerza sobre su pecho, pero todo lo que quería decir simplemente no podía salir de su boca, estaba bloqueado en ese momento al estar tomado de las manos de aquel y teniéndolo tan cerca.

Yagsog [ HyunIn ] Finalizada.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora