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Viernes, 12:00 del mediodía, hoy saldríamos temprano del trabajo y era perfecto para llevar a cabo mi idea.
—Johann— masticaba un bocado de su almuerzo.
—¿Mmm?— respondió, dando a entender que tenía su atención. Nos encontrábamos en la cafetería de la empresa, era nuestra hora de descanso y decidimos almorzar aquí.
—Después del trabajo, ¿Me acompañas a comprar pintura?— esperó a pasar el bocado para hablar.
—O sea cómo, ¿Pintura de cuál?
—Para paredes, quiero decorar la habitación de huéspedes— Me observó con los ojos entre cerrados. —¿Qué?
—Tú misma dijiste que era innecesario pintar esa habitación, ¿Por qué ahora sí?— no respondí y seguí comiéndo, haciéndome la boba. —Espera... ¡CLARO!, Ahí se está quedando la señorita enigmática— dió en el clavo. —¿Acaso quieres decorarle su propia habitación?— preguntó, con un tono adorable.
—Agghh, que pesadito. Pero sí, pensaba en preguntarle sus colores preferidos para pintar la habitación.
—Creí que no se quedaría mucho tiempo en tu casa.
—Pues pensamos igual— crucé mis brazos colocándolos encima de la mesa, seguido de un largo suspiro.
—¿Entonces?
—No sé, estuve pensado en que tal vez... No es tan malo tenerla ahí, me agrada— Johann, sin despegar sus labios, tenía una gran sonrisa en su rostro, sus manos sostenían sus cachetes y los codos, posados encima de la mesa. —¡¿Ahora qué?!.
—Que haces cosas lindas por ella, ¿Apoco ya te estas enamorando?— me sonroje al escuchar eso.
—¿Qué? Claro que no, pff, solo quiero que se sienta cómoda, que tenga algo a lo que llamé "hogar"— me miró con una expresión de "no te creo nada"
—Sisisisi, ajá, lo que tu digas Calle. Por ahora es así, pero verás que pronto vendrás a mi diciendo "Johann amó a Poché con locura ¿Qué hago?"— dijo, imitando mi voz.
—Ah mira que gracioso jajaja— finjí reír. —En primer lugar, mi voz no suena así, en segundo lugar, te estas adelantando a cosas que no— aclaré. —Y tercero, ¿Me vas a acompañar o no?
—De mí te vas acordar Daniela Calle, respondiendo a lo tercero, te acompañaré— reí por lo bajo, mientras negaba con mi cabeza.
~ [ • • • ] ~
Ya habíamos comprado la pintura, ahora parqueaba en la acera de mi casa, abrí la cajuela para sacar los botes de pintura y meterlos a la casa, Poché estaba muy curiosa cuando le pregunté por sus colores favoritos.
✧*。
—¿Hola?— dijo, una vez contesto la llamada.
—Hola Poché, solo hablaba para pedirte algo pequeño.
—¿Qué pasó?
—Nada malo, solo necesito que me digas cuáles son tus colores favoritos.
—¿Por qué?
—No preguntes, solo dime— no respondió. —¡Vamos!, En cuanto llegue a casa verás.
—Azul y negro, esos son mis colores preferidos.
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A r c a n a | Caché
Любовные романы"Me arriesgue a ayudarte sin conocerte, sin saber tu nombre, sin saber tu paradero, sin saber tus intenciones. Un verdadero enigma." - Lee el Prólogo para adentrarte más en la historia - Historia 100% creada por mi © Derechos de @NCacher