Inevitablemente estoy pensando en tí,
Me recuesto en mi lecho de rocas
Y, mirando al cielo,
Recuerdo tu rostro en cada constelación.
La luz de tu sonrisa me invade,
Me invade con el brillo de las estrellas.
El fondo es negro, cálido como un abrazo
Frío como la soledad,
Lejano...
Cómo tú.
Inevitablemente estoy pensando en tí
Y me duele la cabeza;
La inmensidad de tu belleza, ¡es eso!
No hay espacio en mi mente.
Y es ahí, donde te veo sonreír otra vez,
Y es ahí, donde yo, como un tonto,
Sonrío en mi soledad e imagino,
Tu rostro en el firmamento sonriéndome.
Ahí están, tus bellos ojos cafés.
Sí, cafés, gracias por esos ojos,
Porque siempre detesté el cliché:
Frescos ojos verdes,
Pacíficos ojos azules,
Ardientes ojos lila.
Pura palabrería,
¿Para qué epítetos vacíos?
Si puedo perderme en la hermosura
De tus ojos cafés.
Inevitablemente vuelvo a pensar en tí,
Y es triste,
Porque me queda una vida sin tí.
Ahora que no estás, soy dueño de:
Dulces lágrimas que me saben a hiel
Y del seco arrullo del viento.
En mi lecho de rocas, sé
Que sin dudas pasaré,
El resto de mis noches
amando constelaciones
E inevitablemente, pensando en tí.
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Tu Constelación
Poetry¿Te has fijado en el cielo nocturno? Seguro que has visto las radiantes estrellas que hay en el firmamento y todas las historias que parecen contar, mientras realizan su gloriosa danza. Caballos, leones, arqueros y carros se unen cada noche y nos da...
