Capitulo 6

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| Abril |

El tenia ganas de hablar, asi que hablo casi toda la noche hasta que por fin cayo rendido, era tiempo ya que se durmiera, tomo su muñeca que habia dejado sobre mi cintura aprisionandome intentando no despertarlo la levanto con algo de fuerza pero solo logro que me pegue mas a el, vuelvo a intentarlo y escucho un gemido somnoliento de su parte

—¿Que haces? Pense que estabas dormida —se remueve incomodo, su voz ronca hace que mi corazon palpite con rapidez, feo no esta pero loco si y yo no estoy con personas de manicomio.

—Lo estaba pero quiero ir al baño —respondo ahogando el jadeo por sentirlo tan cerca, olfatea mi cuello por un momento como si fuera un perro pero lo ignoro porque mientras menos hable mas rapido salgo de aqui.

—Bien —quita su brazo de mi cintura dejandome libre—. Apurate ¿Quieres? Si intentas escapar volveras a la celda —me amenaza volviendo a la normalidad, que hijo de perra mas bipolar de el mundo, yo quiero saber si es que se cayo cuando lo sacaban del culo de su madre.

—Que bipolaridad jesus.

—Te escuche.

—Si no me lo dices no me doy cuenta.

—No comiences otra vez Abril, agradece que estas aqui y no en la celda porque si quieres volver con gusto te mando de regreso.

—En primer lugar tu me sacaste o tu otro tu que tiene ojos dorados y es mas gentil, yo nunca te dije que me sacaras —contraresto recordando como me saco como loco de la celda y luego comenzo a reclamarme cosas que no eran de su importancia.

—Entonces volveras mañana a la celda —sentencia en tono serio volteandose en la cama, lo ignoro, que siga soñando, si yo dije que voy a salir de aqui voy a salir.

—Bien, todo es mejor que estar a tu lado maldito bipolar —actuo normal como si no estuviera planeando mi escape. Me levanto de la cama enojada dirigiendome a una de las habitaciones pero su voz vuelve a interrumpirme.

—Esa es la terraza.

—¿Por que no es transparente la puerta?

—Porque no me dio la gana.

>> Arg! ¡No lo soporto! <<

—Yo tampoco te soporto.

>> ¿Queee? <<

Ni siquiera le contesto y sigo mi camino hacia la otra puerta que si el es baño, aleluya ya no soporto respirar el mismo aire que el, observo el baño buscando algo que me ayude para salir de aqui pero ni siquiera hay una ventana, que loco ¿Como no tiene ventanas en su baño? Yo tengo, me gusta ver la luz de el dia cuando me vayo, es realmente bueno, muy bien si no puedo salir con sexo, ni salir de aqui por una ventanilla, toca salir de aqui por el hospital.

Coloco seguro en la puerta antes de dirigirme al espejo delante de el lavamanos.

—Tu seras mi gran amigo en este viaje, solo no me mates ¿Esta bien? Que pase todo como la otra vez ¿Bien? —le ruego al espejo delante de mi por no morir, casi muero la otra vez, realmente estoy loca.

¿Que que paso la otra vez? Lo mismo que ahora solo que no antes no habia un bombon afuera de el baño, un bombon psicotico pero al fin y al cabo un bombon, escucho como toca la puerta algo molesto porque estoy durando mucho, la otra vez paso que me dejaron entrar al baño, rompi el cristal y me corte las venas pero no sere tan drastica esta vez, casi muero, estoy loca pero eso me llevo a la libertad.

Tomo una extraña figura de plata y le doy con todo a el cristal para luego esconderme detras de la puerta, no tan cerca claro, no vaya a ser que me golpee cuando entre, algo golpea la puerta tan fuerte que la desprende de su lugar, causando que quedara algo descubierta por no decir completamente.

Encadenada al AlphaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora