Mis pasos resonaron por los escalones de la casa mientras escuchaba como se azotaba la puerta y varios pasos se acercaban al lugar en donde yo estaba, intente ignorarlos, pero de repente comenzaron a seguirme los dos hermanos hasta el cuarto de pepino, en donde se encontraban mis cosas.
–¿Quién era ese Nicole? – Melón fue el primero en entrar y el primero en hablar, lo miré de manera fría e impasible y me giré sobre mis pies para abrir mi maleta que ya estaba sobre la cama de Pepino, creía que lo justo es que me mudara de su habitación, ya no estaba en una relación con él y no era correcto.
–¿Por qué les importa? No es alguien que comprometa mi misión con Pepino, solo me vino a checar– comencé a sacar mi ropa de algunos de los cajones del armario con cajoneras que estaba situado en frente de su cama, los chicos simplemente miraban con atención cada uno de mis movimientos como si estuviese haciendo algún acto de suma importancia.
–Porque nos gustas– dijeron al unísono, me detuve por un segundo con la cara roja y empecé a doblar mi ropa y meterla a la maleta frenéticamente, hicieron una pausa y continuaron hablando –. Espera, dijiste "checar" ¿Por qué? –
–Mi jefe... vio el reportaje sobre nosotros Melón, y tu Pepino, nunca le gustaste, y resulta que su padre es enemigo de mi padre... Es el famoso innombrable– dije entre suspiros esta vez ya de cara a ellos, ambos estaban tratando de procesar la información. Tuve un pequeño viaje al pasado al recordar como de chica mi papá se enojaba y gritaba por toda la casa, mi madre siempre me decía que cuando él se ponía así era por el "señor innombrable". Nunca supe quién era, hasta hoy.
–Eso ya lo sabíamos Nopalito, somos de familias enemigas, y sé que a tu padre nunca le he gustado y estoy seguro que Edric le gustará todavía menos–. Melón miró con cara de culo a Pepino mientras hablaba –. Pero no contestaste nuestra pregunta, ¿Quién es él? –. Me miró seriamente acercándose junto con su hermano, suspiré.
–Es mi primo frutas, ya basta con esos celos de bestia–. Dije rodando los ojos para después volver mi atención a la maleta, la cerré y me la lleve hasta la salida con las dos frutas siguiendo mis pasos, me acerque a la puerta de enfrente y la abrí para meter mi maleta, las frutas me esperaban en las escaleras.
–Entonces... ¿Cuál es su siguiente paso? –. Preguntó Melón mientras bajábamos las escaleras, giré mi cabeza para mirar a Pepino quien estaba atrás de mí, pero al hacerlo mis pies no cacharon el siguiente escalón y sentí como casi caía al suelo de no ser porque sentí la mano de Pepino agarrándome de la ropa pegándome a su cuerpo y a su vez Melón me tomaba por la cintura haciendo lo mismo.
–¡Buenas mis amores hermosos! –. Un grito agudo se escuchó por toda la entrada de la casa, los tres giramos nuestras cabezas hacia esa dirección y una señora de la edad de mi mamá se encontraba con muchas bolsas de tiendas reconocidas y en una pose exagerada. Nos quedamos estáticos mientras ella nos miraba un tanto impactada por la escena.
Me sacudí entre los dos chicos empujándolos a ambos, los dos me miraron indignados, pero me valía madres porque estaba ante su madre, y no quería que se enterara de todo el embrollo que teníamos entre nosotros tres.
La señora achino los ojos acercándose específicamente a mí, retrocedí dos pasos, pero me detuve porque, en perra empoderada nadie me intimida, puse una mirada seria y tragué fuerte. Me barrio de pies a cabeza –. A la sala. YA– los chicos se tensaron por el tono de la vieja quien no me quitaba la mirada de encima y camino hasta la sala, los tres la seguimos, ¿Era bipolar o que pedo? De repente había cambiado su humor.
Se sentó de manera recta en el sillón individual mientras que nosotros nos sentamos en el familiar, nos miró a los tres y luego se detuvo en mí y me hizo un movimiento con la barbilla indicándome que me fuera, capté en seguida y salí de ahí con la cabeza gacha, estaba segura que le iba a decir una sarta de cosas sobre mí la vieja esa a mis hombres.
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¿Melón o Pepino? [+18]
JugendliteraturNics es una joven rebelde de 17 años que no quiere asistir a la escuela, pero necesita el certificado de estudio para poder ser empleada. Ella entra a una escuela para ricos (obligada, por cierto) con un solo propósito: Terminar sus estudios para ob...