Capítulo 7 📚 Culpas

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Culpas


-¡Prefiero hacerlo sola! – chilla Luca.

El profesor Beltrán nos ha asignado una investigación en la que debemos entrevistar y registrar las respuestas de diferentes profesionales con respecto a los fundamentos éticos que ellos consideran importantes en sus trabajos.

Como la investigación es un poco larga, ya que debemos recopilar no sólo los resultados de cinco entrevistas distintas sino agregar conclusiones, comentarios a manera de ensayo y referenciar correctamente, el profesor nos dividió en parejas eligiendo nuestros nombres al azar.

El primer grupo que eligió está conformado por Luca y Luisa.

-No puede realizar el trabajo usted sola, señorita Velmonte – dice el profesor Beltrán -. Una de las bases más importantes de la ética profesional es tener la capacidad de trabajar en equipo a pesar de las diferencias personales.

Luca aprieta los labios y las aletas de su nariz se mueven mientras mira a Luisa con aversión.

-Mariana Cifuentes y Fernanda Ruiz – continúa el profesor, convencido de que Luca se tragará su inconformismo.

Yo suelto aire, aliviada. No me imagino qué haría si tuviera que trabajar con Luisa o Rafael.

-¡No hay forma alguna en la que yo me siente con esa idiota en la misma mesa, profesor Beltrán!

-¡Señorita Velmonte! – masculla el profesor subiendo la voz – No voy a permitir que se utilice ese tipo de lenguaje dentro de mi clase.

Luca arquea una ceja y cruza los tobillos.

-Entonces déjeme elegir otra pareja.

-Yo tampoco quiero estar al lado de una desviada, profesor – replica Luisa, frunciendo el rostro con desagrado.

Luca se pone tensa como una vara y antes de que nos demos cuenta, salta por encima de una de las sillas con las manos extendidas. Su mirada es desbocada y una vena le sobresale de la frente.

Nunca la había visto tan enojada.

Yo también intento avanzar en medio del alboroto porque Rafael y las amigas de Luisa se han puesto a su lado y sé que van a defenderla. Sin embargo, Camilo es mucho más rápido y tira de Luca justo antes de que ella se abalance sobre Luisa. La rodea con ambos brazos mientras ella sigue forcejeando y mostrando los dientes.

-¡Yo soy una desviada, pero al menos no me he acostado con la mitad de los hombres de este pueblo! – escupe Luca - ¿Sabe tu padre lo del aborto en la secundaria?

Es el turno de Luisa de perder el control y araña los brazos de Rafael en un intento por liberarse. Luca sonríe de forma vacía.

-¡Velmonte y Belalcázar, vengan conmigo ahora mismo! – exclama el profesor Beltrán a punto de perder la serenidad – Los decanos de sus facultades estimarán la sanción conveniente para cada una. Los demás, comiencen a trabajar en sus proyectos hasta que yo venga – sacude la cabeza -. Y pensar que me convertí en profesor de universidad porque estaba cansado de lidiar con riñas escolares y estudiantes revoltosos – resopla mientras sale del salón.

Luisa y Luca lo siguen, cada una, esforzándose por caminar muy separada de la otra.

No me preocupo mucho por ella porque tanto el padre de Luca como el de Luisa son benefactores y mecenas de la universidad, así que la sanción no será trascendental. Quizá tengan que disculparse y prometer que no volverán a hacerlo, pero no pasará de ahí.

Mi Ave Fénix, Libro IDonde viven las historias. Descúbrelo ahora