Una semana más había pasado, durante esa semana Mafuyu tuvo que ver a Uenoyama paseando por todas partes con ese rubio bonito y le calaba hasta los huesos, pero no podía decir nada, Uenoyama no estaba haciendo nada malo y era el quien le había pedido un tiempo separados ¿entonces por qué le molestaba tanto?
Era la última clase de aquel día viernes, ese día tenía ensayo con la banda y tendría que ir ya que las tres semanas de plazo que le habían dado se vencían ese día y lo peor es que tan solo había logrado escribir la mitad de una canción que ni siquiera podía considerar buena. Akihiko y Haruki iban a matarlo, pero lo que más le preocupaba era ver a Uenoyama. Lo extrañaba, lo extrañaba tanto que sentía que podía morir, pero sus sentimientos seguían inestables y no quería llegar a él sin haber aclarado nada ¿entonces para que sirvieron esas semanas? No había logrado nada, tan solo extrañarlo hasta la locura.
Mafuyu se encontraba en el salón de ensayo, fue el segundo en llegar solo después de Haruki quien se encontraba conectando los amplificadores
–Akihiko está en camino, Uecchi tampoco debe tardar – comentó Haru iniciando una conversación con el pelinaranja quien se veía extremadamente nervioso – ¿y bien? ¿Qué tal estas semanas?
–Los extrañé – dijo rápidamente Mafuyu – ya quería volver – sonrió
En ese momento pudieron escuchar voces en el pasillo platicando mientras se iban acercando, una de las voces era de Uenoyama. Mafuyu sintió su corazón detenerse por un segundo nuevamente y cuando la puerta fue abierta sintió como si alguien tomara su corazón y lo apretara.
Eran Uenoyama y el rubio platicando muy amenamente como tuvo que verlo toda la semana en la escuela. ¿Qué demonios hacia ese chico en su ensayo?
Uenoyama al ver a Mafuyu dejó de sonreír y se puso nervioso, evito mirarlo directamente y dirigió su mirada a Haru quien observaba la escena con cierta curiosidad
–H..Hola, este es un nuevo compañero, fue recientemente transferido a la escuela – intentó presentarlo a ambos en la habitación pero estaba tan nervioso que sonó robótico
–Mucho gusto, mi nombre es Takeshi Rei – dijo el rubio con una sonrisa amable
–Mucho gusto, Takeshi-kun. Mi nombre es Haruki y el chico callado de por allá es Mafuyu Sato– contestó Haru intentando aligerar el ambiente, Mafuyu no dijo nada – ¿A qué debemos esta visita? Uenoyama nunca trae compañeros al ensayo, bueno excepto la vez que trajo a Mafuyu
Ese comentario irritó más a Mafuyu, pero evitó demostrarlo y se limitó a sonreír incómodamente. Nadie más que Uenoyama lo notó, pues conocía bien las verdaderas sonrisas de Mafuyu
–Como soy nuevo no tengo muchos amigos y no conozco mucho de por aquí, Ritsuka-kun me dijo que tendría un ensayo con su banda y sentí mucha curiosidad así que le insistí en venir, pero me retiraré en un momento, no quiero molestar
¿Ritsuka-kun? ¿tan cercanos se habían vuelto en una semana que ya le hablaba por su nombre? Mafuyu estaba enojado…no, estaba celoso. Odiaba ese sentimiento, se sentía tan diferente al Mafuyu real, él no era así. En cualquier otra situación el también habría sido amable con el chico nuevo, pero verlo tan cercano a Uenoyama cuando él no podría estar más alejado de él le dolía y sacaba lo peor de sí mismo. Mafuyu observó desde su lugar como Uenoyama se despedía de Takeshi y se incorporaba en su lugar conectando su guitarra
–Uenoyama-kun… – dijo Mafuyu con voz quedita llamando la atención del guitarrista quien enseguida lo volteo a ver – ¿podemos hablar al terminar el ensayo?
–C..claro, Mafuyu – contestó Uenoyama nervioso
Akihiko llegó unos minutos después y tuvieron un ensayo agotador, ya que no se habían visto todos durante 3 semanas tuvieron que compensar todo ese tiempo perdido.
La banda se encontraba guardando sus instrumentos en silencio cuando Akihiko habló llamando la atención de todos
–¡Chicos, nuestra cuenta de Twitter llegó hoy a los 10 mil seguidores! – dijo entusiasmado mientras mostraba el teléfono
–¡Wow! ¿En serio? Pero si hasta hace unos días no pasábamos de los 3 mil – comentó asombrado Haruki – ¿Cómo pasó?
–Al parecer Uenoyama publicó hace unos días un video en la cuenta y se volvió viral – respondió Akihiko como si fuese cualquier cosa. Todos miraron enseguida a Uenoyama
–¿Por qué me miran así? Ustedes fueron quienes nos dijeron que mantuviéramos la cuenta activa – dijo mientras ponía su mano en su hombro como señal de nerviosismo – fue un cover de una de mis canciones favoritas de The Doors
Mafuyu tomó su teléfono para ver la cuenta, realmente no había estado activo en ninguna red social y usaba su teléfono tan solo para comunicarse con su madre cuando era absolutamente necesario
–Bueno, como fuese. El tweet alcanzó los 30 mil likes y fue retuiteado 15 mil veces…y ganamos unos cuantos miles de seguidores, aunque la mayoría son fan girls de Uenoyama – dijo Akihiko con su típica voz cansina
–¡Es una gran oportunidad para mostrar nuestra música a más personas, bien hecho Uecchi! – dijo divertido Haruki mientras le daba un golpecito amistoso a Uenoyama en el hombro, haciendo que este se sonrojara
Después de aquella conversación Mafuyu y Uenoyama se encontraban caminando a casa juntos en silencio. Uenoyama fue el primero en hablar
–Te extrañé – dijo finalmente y Mafuyu lo miró con ganas de llorar – ¿Por qué me miras así? – preguntó alarmado mientras tomaba a Mafuyu de los hombros
–Yo también te extrañé – contestó el peli naranja para arrojarse a los brazos de su novio, envolviéndolo en un cálido abrazo. Ya no quería pensar más, su cuerpo en ese momento le gritaba que quería estar con Uenoyama.
Deshicieron el abrazo y continuaron caminando agarrados de la mano, Mafuyu decidió hablar
–Parece que últimamente tengo mucha competencia ¿no es así?
–¿De qué estás hablando?
–Hablo de todas tus nuevas fans en Twitter, además de las chicas de la escuela…y ese chico nuevo Takeshi. Pareces gustarle – dijo esto último un tanto molesto, dejando ver claramente lo celoso que se encontraba
–Mafuyu, ¿estás celoso? – dijo Uenoyama burlándose, le parecía adorable ver a Mafuyu así
–¿Y qué si lo estoy? No es nada fácil tener un novio así de atractivo, eres tan guapo y genial que a todos les gustas y yo no puedo competir con todos ellos
Uenoyama se quedó en silencio dos segundos observando el adorable puchero que Mafuyu le dejaba ver. Era algo que no pasaba a menudo, y por a menudo es nunca. Nunca antes había visto esa expresión en Mafuyu y aunque sonara infantil, le encantaba verlo celoso
–¿Competir? ¿Para qué? No sería una competencia justa, ninguno de ellos se compara a ti, nadie se compara a ti – contestó dulcemente el de ojos azules observando como su novio se sonrojaba
Esa noche caminaron juntos platicando y riendo, Uenoyama acompañó a Mafuyu hasta su casa y se despidió con un dulce beso en la frente y un “hasta mañana”
Hasta mañana – susurró Mafuyu tan bajo que solo él lo escuchó mientras veía la espalda del pelinegro alejarse de su casa y acariciaba sus labios con sus dedos. Quería un beso.
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Sol de invierno [Given]
FanfictionHa pasado un tiempo desde que Uenoyama y Mafuyu comenzaron a salir y desde eso ha sido poco el contacto físico entre ellos. Uenoyama creía que se debía a la timidez de Mafuyu, pero ¿Qué pasará cuando descubra que es en realidad por otro motivo? ¿Pod...