FEAR (JEONGCHEOL)

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- ¿Este niño está loco o qué le pasa?- soltó Jihoon. Jeonghan quedó sorprendido al saber que la persona (si se le podía llamar así) con la que quería dormir el pequeño,era él. Era fantástico que cada vez menos personas le temían, Dino era especial, en ningún momento tuvo miedo de él, siempre le sonrió y fue amable, sería estupendo si todos fueran como el pequeño niño

- De acuerdo- dijo felíz

- ¡¿QUÉ?!- Dijeron Joshua, Jihoon y Seungcheol al mismo tiempo

- Ven conmigo pulgoso- dijo extendiendo sus brazos. Dino corrió hasta él subiendo a sus brazos y el Príncipe subió las escaleras en un segundo, haciendo revolotear todos los cuadros de las paredes

- ¡DINO! ¡JEONGHAN!- Les llamó le pelinegro. Tan pronto como se fueron, regresaron al pie de las escaleras, sacudiendo en cabello y las ropas de todos, el pequeño no podía carcajearse más fuerte, estaba divirtiéndose a lo grande

- ¿Cuál es nuestra habitación?- preguntó el rubio

- Primer piso al fondo, la puerta es- Jun no pudo terminar de hablar pues de nuevo se esfumó por las escaleras con el niño en los brazos- Como sea- dijo girando- Quedamos nosotros tres y una habitación más- dijo señalando a los humanos

- Yo me quedaré con él- SoonYoung pasó su brazo por encima de los hombros de Jihoon

- Claro que no- dijo intentando zafarse- Ve a dormir a la sala

- Tenemos un asunto pendiente- se agachó para susurrar en su oído- ¿o quieres le cuente a todos que tu... bebiste de mi sangre?

-Pensándolo bien- habló de prisa lanzando lejos al humano- Puedo dormir con él, nos llevamos bien después de todo- Luego de eso comenzó a reír escandalosamente. Al igual que Jeonghan subió volando las escaleras

- Esto será divertido- concluyó SoonYoung - ¡Espérame Jihoon! - gritó antes de salir corriendo junto a él

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La noche cayó para todos en la cabaña, estaban tan agotados que nadie había pensado o sugerido una cena en todo el día. Cuando todos se instalaron en sus respectivas habitaciones, se ducharon y cambiaron sus ropas. Jeonghan y Dino tomaron un baño juntos en la bañera de su habitación, para Jeonghan fue todo un reto hacer prometer al niño que no se convertiría en lobo mientras lo bañaba, pues Jeonghan odiaba el olor a perro mojado. Luego de jugar un rato en el gua, vestirlo y acomodarlo en la cama, ambos cayeron en un sueño profundo.

Jeonghan creyó que no despertaría hasta la mañana siguiente, pero un ligero dolor en su entrepierna lo hizo moverse. Sintió algo alrededor de su miembro, algo húmedo y tibio, estaba succionando su erección. Se levantó de prisa y descubrió a alguien bajo las sábanas blancas, las apartó de encima cuidando que Dino a su lado, no se despertara, sólo las velas de la mesita de a lado alumbraban la habitación pero fue suficiente para distinguir esos cabellos negros y rebeldes entre sus piernas

- ¡¿Qué crees que estás haciendo?! ¡¿Cómo entraste aquí?!- termino sus preguntas gimiendo un poco, Seungcheol estaba ignorándolo por completo, estaba concentrado en su miembro y nada más. Jeonghan tuvo que apoyarse con los codos sobre el colchón, empezaba a sentir su orgasmo acercarse, ¿Estaba eso bien? Seungcheol y él no se habían dirigido la palabra desde su discusión por la mañana y ahora se había metido en su habitación para aprovecharse de la situación, y aún así... Jeonghan no estaba molesto, mentiría si dijera que lo estaba. Disfrutaba del roce de la lengua de Seungcheol contra la punta de su miembro, disfrutaba sus labios apretando toda su extensión. Abandonó las sábanas para sujetar su cabello negro y marcar su ritmo