- Todo fue un juego, una apuesta para quedar bien, nunca sentí nada hacía ti. - sus palabras eran tan secas que con cada cosa que salía de su boca me dolía - olvida lo que pasó porque realmente no fuistes nada en mi vida.
Las lágrimas querían salir...
Sentí como unos brazos me rodeaban y me levantaban cuidadosamente. Cuando abrí un poco los ojos vi unos ojos oscuros desconocidos pero a la vez familiares, no le di importancia y me encogí en ellos, respire profundo y olía a una leve colonia masculina igual de desconocida pero familia.
Escuche una puerta abrirse y después cerrarse unos segundos sentí la suavidad del colchón y después sentí como alguien se sentaba alado mío y me acariciaba levemente la cabeza.
Me desperté y fui directo al baño me duche, me cepille los dientes y todo lo necesario.
Me vestí
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Y salí, al salir me encontré con todos los chicos sentados.
- Buenos Días.
- Buenos Días.- Respondieron todos menos Contray.
- Una pregunta quién me llevo a mi cuarto de noche?
Pregunte con curiosidad ya que me había acordado ver unos ojos obscuros pero nadie tiene los ojos obscuros, los únicos que los tenían eran los gemelos y Contray pero dudo que hallan sido ellos.
- Fui yo.
Una voz atrás de mi me sorprendió y al girarme me encontré con lo que jamás me hubiera gustado encontrar.
- Nos volvemos a ver Gina.
( ... )
Salí lo más rápido posible de hay y fui al de mi hermano, toque y por suerte salió el ya listo.
- Tenemos que hablar
Me miró confundido como diciéndome con la mira << ahora? >>
- Ahora.
Y asintió cerrando la puerta y caminando pero antes de pasar por mi habitación salió el.
- Gerald.- Sonrió maliciosamente.- cuánto tiempo ¿No? Amigo.
Gerald se paralizó cuando lo vio por primera vez después de hace mucho tiempo y me miró sorprendido y yo asentí. Por fin cuando Gerald reaccionó me puso detrás de él y se puso en defensiva.
- Que haces tú aquí. - Gerald se empezó a enojar
- O vamos que pasó antes ya se olvidó verdad Gin.
A me empezó a molestar que esa sonrisa juguetona y malicia no desaparecerá.
