capitulo 4

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Los papeles decían de una zona a la que debo ir junto con un asesinato, sin detalles tengo que investigarlo.

{{Hyscidonia}}

Regrese a mi cuarto sin encontrar a Kaede ni Harukawa, espero que se encuentren bien.

Sobre la mesa se encuentra una, estaba en blanco pero al tentarlo sabía que tenía un mensaje, cómo si alguien hubiera escrito en una hoja antes y está quedará con las marcas de la pluma pero no con la tinta.

Me acordé de algo en el pasado que me hizo sonreír.

***
-¡Vamos, hombre!- antes de venir aquí hace dos o tres años, estudiamos con una amiga, Tenko Chabashira -Da más que eso ¡Es fácil!-

Conmigo era ruda y exigente al contrario que con Kaede.

La rubia calló rendida al no aguantar las lagartijas y nuestra maestra, Tenko, se dirigió a ella, en ese momento pensé que la reprendería pero no.

- Puedes ir por tu botella y volver en un momento- no lo creí, pensé que era sarcasmo pero la dejo descansar.

-¿Qué miras?- me lanzó una mirada amenazante y seguí con las lagartijas.

Aprendimos a defendernos con ella, sabíamos que el mundo está muy loco y las personas aún más, éramos nosotros dos en ese entonces.

Mi tío a veces mandaba este tipo de hojas en blanco, cómo mensajes privados que me enseñó a leer.

En el descanso de un entrenamiento tanteaba la hoja para leerla y me hacía gracia sus bromas.
-¿De qué te ries?- chabashira se acercó enojada a mi-¿Te estás burlando de alguien?- estaba a punto de tomarme para hacerme algún tipo de quebrada o llave.

-¡No! Estoy leyendo.

La ruda chica se asomó para ver la hoja - No hay nada escrito.

-¿Qué dice la carta?-llego kaede emocionada, sabía lo que significaban esas hojas.

-¿En serio dice algo?- pregunto Chabashira, y la rubia tomó la mano de tenko para que sintiera la hoja.

-Se siente como algo sobresaliente ¿No?- le explicó kaede - ese es el mensaje.

-Debes mmm ver las letras en tu mente, es sencillo- después de tener la hoja por un buen rato empezó a reír igual que yo hace un momento.

Entonces supe que pudo leer el chiste tonto que viene escrito.

-Ustedes dos son raros- nos dijo la oji verde -aprenderé a leer estás cosas para ser mejor que tu- me señalo decidida, con una risa de orgullo.

***

Hace mucho que no la he vuelto a ver, espero que no se enoje por no habernos despedido. La hoja estaba algo arrugada, confundiría algunas palabras.

[Para mis sobrinos.

He estado trabajando un buen rato aquí y pienso que se me hará más rapido mi regreso.

Estoy cerca de descubrir quién es el infiltrado de este lugar, y hay cosas que no sé realmente si son ciertas.

Están trabajando para que un hombre sea el primero en vivir oficialmente en la luna de plata, además del asunto con las cuevas, verán si hay alguna forma de que esos seres no vuelvan a salir.

Al otro lado del océanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora