Dónde está Sunshine? Buscando el verdadero amor.

30.

La luna con su luz natural, la mama de Jung que esta mirando la ventana con gran ilusión así como Kook tomando mi mano. Me hacen la chica mas afortunada del mundo en estos instantes.

-Eso si que estuvo increíble- menciono la señora Jung mientras regresaba para recostarse en su cama- Y veo que también lo disfrutaron-

Sonreí.

Jung y yo nos encontramos con su madre en el hospital. Después de decirme que ella estaba sola, ambos corrimos a visitarla.

Mi madre debe de estar durmiendo, ya que los últimos días estuve visitándola. Sus defensas habían caído, lo cual me preocupo mucho. Pero nada que los medicamentos puedan solucionar.

Mi padre... bueno el esta seguramente tomando solo en aquella casa.

-Me gusta que estés feliz-

La mama de Jung miro nuestras manos, las cuales seguían entrelazadas; Jung la acariciaba lentamente. Algo que me gustaba mucho. Aun así, ella no dijo nada, solo rió levemente.

Acomodo sus cobijas cubriéndose la mitad del cuerpo.

-¿Cómo se siente señora Jung?-

Ella miro de reojo nuestras manos, para darme una sonrisa fugaz.

-Muy bien Honey- Nos miro- Ahora muy bien-

El teléfono de Kookie comenzó a sonar. El lo tomo, miro la pantalla, y se levanto soltando mi mano.

Pensé que se iría sin mas; pero dejo un beso fugaz en mis labios. Demasiado rápido para tan siquiera reaccionar. Sonreí ante ese gesto.

-Así que...- la señora me miro- Creo que eso es mas que suficiente para que deduzca todo-

Reí nerviosa. Era la primera vez que me encontraba en una situación como estas.

-Si, bueno- planche mi falda con mis manos- Creo que.... No necesito decirle nada, tampoco decirle a el sobre quien soy. Eso....- suspire- Ya no importa-

-Me alegra saberlo. Es lo único que necesitaba saber-

Jung regreso un poco.... Distraído y distante. Espere que el volviera a tomar mi mano, pero no lo hizo.

La noche paso, de hecho comenzaba a amanecer, la madre de Jung hablo con nosotros, he inclusive jugamos juntos "UNO" donde la señora Jung y yo, derrotamos a Kook.

Ahora caminamos de regreso al edificio.

Las calles están llenas de serpentinas de colores azul y rojo; mientras que los anuncios de algunas tiendas nos muestran al tío Jack.

Ahora no estamos en una escena de película como lo estábamos ahora.

Jung no tomaba mi mano, ni mucho menos estaba usando su abrigo como en toda película cliché.

De hecho después de aquella llamada todo cambio repentinamente.

-Ah..- suspire- ¿Estas bien?-

El giro a verme.

-Mmm, Claro-

Después de eso nadie pronuncie palabra alguna; al parecer la magia que se veía demasiado real como para ser verdad. Había desaparecido con tan solo una llamada.

Llegamos a estar frente a la puerta de mi departamento.

No dije nada. Jung estaba delante mío.

Solo me acerque a él, tome sus mejillas para besarlo. Y aunque para mi fue lindo.

Jung no movió sus labios. Solo se quedo estático como una figurilla de metal. Pensé que si probablemente hacia eso, él.... Dejaría aquel comportamiento.