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Entré a la sala de ensayo tratando de actuar lo más natural posible, sabía que al menos la mitad de toda la empresa ya había llegado a trabajar y era probable que las chicas ya estuvieran ensayando para el performance de hoy en inkitsu.

—¡pero miren quien llegó al fin! —exclamó Haneul con una sonrisa aparentemente sarcástica.
—Sann, creímos que estarías aquí.. ayer te fuiste del departamento a media noche —decía Sukko mientras me estrechaba entre sus brazos
—estuve aquí toda la noche... Ensayando... Le dije a Sunhee que aquí estaría.. no me encontraron porque estaba en la cafetería —me encogí de hombros  y me removí incómoda cuando Sukko empezó a oler mi hoodie desde el hombro hasta mi cuello

—¡Sann! —gritó en un susurro, se veía realmente emocionada —ven —me tomó de la mano y me llevó fuera de la sala de ensayo —estuviste con alguien

—No —contesté de inmediato
—tu hoodie huele a loción para hombre, un hombre con muy buen gusto eh? —subía y bajaba las cejas

—es mi perfume tonta —le dí una pequeña palmada en la mejilla y rió de manera pícara

En realidad no estaba segura de cómo manejar la situación, yo sabía mentir muy bien pero esta vez las palabras no podían fluir de mi boca con normalidad y los gestos en mi cuerpo me delataban, ya sentía como mis manos comenzaban a sudar y el rubor en mis mejillas se hacía presente.

Antes de que Sukko pudiera decir algo más, entré de nuevo a la sala de ensayo, empecé a hacer los estiramientos pensando en qué pasaría si alguien llegase a saber que pasé la noche con alguien y aún peor con uno de los Idols más famosos del momento.
Seguramente, sus fans se molestarían mucho y las entiendo, yo solía ser así pero también estaba la posibilidad de que los fans se sintieran decepcionados de mí. Por otra parte temía lo que él CEO pudiera hacer al respecto.

Sacudí mi cabeza tratando de reprimir todos esos pensamientos.

—Sann, dime ¿Estuviste con alguien anoche? —llegó de nuevo Sukko, no se cansaba de insistir y sabía que tarde o temprano terminaría sacándome información así que preferí decirle lo que quería escuchar.

—si, estuve con alguien, ahora ya déjame en paz —le dije arta

Ella me tomó por los hombros mientras gritaba y daba saltitos emocionada.
—cuenta, cuenta — hizo un puchero

Rodé los ojos. ¿Ahora que le diría?

—bien, pero sé más discreta por favor —le pedí ya que logró captar el interés de varios de los que se encontraban en la habitación.

Asintió ansiosa, ambas nos sentamos en la duela recargando nuestras espaldas en el espejo.

—estaba practicando y se me ocurrió que sería buena idea ir por un trago, fui al bar que está pasando la avenida, entonces conocí a un chico y me invitó  a bailar... Eso es todo, supongo que por eso el hoodie huele así — me encogí de hombros

—pero que hay de Ju... Ya sabes, de... Él —susurró aún más

—Sukko, solo bailé una canción con un chico que ni siquiera volveré a ver... Además "él" pasó a otro término, ni siquiera somos amigos —mi tono de voz pareció convincente ya que Sukko solo suspiró y se levantó para continuar con los estiramientos.

También suspiré, me sentía aliviada.

Las horas pasaron y se acercaba el momento de grabar los performances por lo que nos dirigimos al estudio donde se llevaban acabo casi todas las grabaciones de inkitsu.

Bajamos del auto y nos adentramos en el edificio, caminamos por un largo pasillo hasta llegar a nuestro camerino.

Ya teníamos puesto nuestro vestuario, por un momento envidié el oufit de Lynn que constaba de un jean de cuero negro y una blusa de lentejuelas sin mangas, en cambio yo llevaba el mismo conjunto que usé por primera vez cuando firmé el contrato. Siempre me consideré una persona detallista y me parecía que era un buen atributo, sin embargo ahora mismo estaba odiando esa parte de mi personalidad ya que recordaba absolutamente todo, el olor, la textura, los sonidos... Recordaba específicamente ese momento cuando el CEO me tocó y nadie hizo nada.

—¿sann?¿Por qué lloras? —Sunhee llegó a mi lado, en su rostro podía ver la preocupación que la reacción a mi recuerdo estaba causandome  de manera involuntaria

—no quiero usar esta ropa, me siento muy incómoda —dije entre sollozos
—lo siento, es parte del trabajo... Pero llegando a casa puedes usar lo que quieras — me tomó por los hombros viéndome directamente a los ojos, reí al ver cómo intentaba consolarme diciendo palabras que para ella eran muy conmovedoras.

Sunhee, era así, por más que quisiera ser linda o tener esa habilidad de reconfortar a las personas con palabras, su frialdad siempre salía a flote y es que no decía ese tipo de cosas para hacer sentir mal a alguien si no que ella lo intentaba teniendo las mejores intenciones y eso era lo que la hacía especial, cuando pasabas tiempo con ella jamás podías aburrirte o deprimirte porque estar a su lado ya era reconfortante sin que ella se lo propusiera aparte de que su sentido del humor te hacía mantener una sonrisa todo el tiempo.

—gracias, me haz hecho sentir mejor —la abracé y le agradecí sarcásticamente
Ella solo se limitó a reír y pasó su brazo por encima de mis hombros mientras me revolvía el cabello con la otra mano

—ustedes parecen dos enamorados, es como si Sunhee fuese el chico que ha hecho llorar a su novia pero de inmediato lo arregla haciéndola reír ¡Qué lindo! — exclamó Sukko llegando a nuestro lado, tenía sus manos entrelazadas a la altura de su pecho

—¡si! Es tan lindo, ¡¡ahora que las novias se den un beso!! —gritó Lynn
—!beso! !beso! —siguió Dae-rin

—creo que debemos darles lo que quieren —dije mirando a Sunhee, ella se encogió de hombros y procedió a acorralarme contra la pared, acercándose peligrosamente con una mirada intimidante, de a poco acortaba la distancia que al casi tocar mis labios, tomó mi mentón haciéndome girar la cabeza hacia un lado para finalmente depositar un ligero beso en mi mejilla.

Al ver eso, las  chicas enloquecieron, gritaban y saltaban de emoción como si estuvieran en plena grabación de un drama para adolescentes.

—así es como haces que Sann deje de llorar — aseguró Sukko

Era cierto. No sabía que haría sin ellas en momentos como este pues siempre se encargaban de consolarme ante las dificultades y no solo las mías si no que entre todas nos apoyabamos la una a la otra. Sentí tanta conmoción que de nuevo comencé a derramar algunas lágrimas.

—¡Sukko! La hiciste llorar otra vez —rió Dae-rin
—Sann ¿Te han dicho que eres muy llorona? — preguntó Lynn a lo que yo respondí con un asentimiento de cabeza. Eso también era cierto, siempre fui muy sensible ante todo.

—chicas tienen que salir al aire en diez minutos —anunció el manager quien me miró y su semblante cambió a uno más serio cuando se dió cuenta de que había estado llorando

—¡Retoquen el maquillaje de JeonSann! ¡No tenemos tiempo! —gritó y salió del camerino tan pronto como había llegado.

.........

Todos los grupos que se presentaron, estaban reunidos sobre el escenario y Jun y yo permanecíamos al frente como anfitriones del programa, tenía mi tarjeta con los diálogos en la mano, lista para anunciar los resultados.

—qué maravillosas presentaciones —dijo Junhee
—si, todas fueron espectaculares pero ahora sabremos quien será el ganador de ésta noche —continué

—y los ganadores son... ¡A.C.E! —anunciamos al mismo tiempo

Hice entrega del trofeo a Jun quien era el líder de A.C.E, el grupo ganador. Me sonrió y se quedó pasmado viendo mis ojos, me pareció una eternidad así que solo me giré hacia el otro lado donde estaban sus compañeros de grupo y me acerqué a felicitarlos para luego ir con mi grupo y dejarles espacio para festejar sobre el escenario.

Al bajar del escenario, dejé de contener el aire que se había acomulado en mis pulmones al tener a Jun tan cerca y aún más cuando los fans gritaron mucho más fuerte cuando el tonto no dejaba de mirarme.

-Dancing in the Stage-#2 Jun// A.C.E..[PAUSADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora