-Riley tía, ¿como te vas a poner eso? Dice Megan limándose las uñas.
-¿Voy enseñando mucho? Tiro del short negro hacía abajo mientras me observo en el espejo.
-Digo, ¿Cómo que vas a enseñar tan poco? Viene hacia a mí y tira nuevamente del pantalón esta vez, hacía arriba. Las demás se ríen.
-¿Y que vas a hacer con Andy? Dice Trina encendiendo la maría envuelta en el papelillo.
-¿Cómo que qué voy a hacer?- Me vuelvo hacía ellas: Megan se está repasando el maquillaje en el tocador, Lauren tumbada en mi cama haciéndose los últimas fotos antes de salir y por último Chiny tiene su mirada pegada al espejo ajustándose el vestido rojo escotado que lleva esta noche.
-Tía todas sabemos que a estas fiestas se viene a coger y eso si eres de las estrechas. Se sube de un impulso en el escritorio. -Supongo que Andy no vendrá o por lo menos no contigo.
-Andy no sabe que voy a la fiesta. Todas se vuelven sus ojos hacía a mi y sonrío torpemente.
-¿Cómo que Andy no sabe nada? Se incorpora Lauren de la cama, se acerca a mí y me acaricia los hombros.
-Estoy bien de verás, estamos bien. Aparto las manos de Lauren de mí y esta se vuelve a las demás.
-Chica, todas las de aquí sabemos que no estás bien. Te conocemos de hace mucho y ese chico no te hace bien.
-Ningún chico te hará bien, son todos gilipollas. Dice Chiny mientras intenta pronunciar aún más su escote.
-Tú cállate Chiny. Dice Megan cerrando la máscara de pestañas. -Nunca has estado con uno.
-No, nunca, si no ha sido para tenerlo entre mis piernas, nunca. Venga, ir saliendo que vamos a llegar tarde. Coge su bolso y Lauren la imita. Salen de la habitación. Megan se acerca a mí.
-Deja de mirarte con esa cara en el espejo Riley, eres perfectamente sexi. Solo mírate.
Me acaricia la cintura y me deja el cabello a un lado. -No te martirices más, estás guapísima. Hoy solo tienes algo por lo que rayarte, pasártelo de puta madre.
Se pone de puntillas para darme un beso en la mejilla y a continuación, sale también de la habitación.
-Narra Selena-
-¡Voy a por algo! Al final Angus se hizo con la suya, vino a mi casa y no paró de insistirme hasta que me trajo. Estaba muy desanimada, el día de ayer no terminó muy bien y mi madre no me dirigió la palabra en todo el día.
-¿¡Qué!? ¡No te oigo!
-¡Me voy a por otra bebida! Le digo a Angus y me dirijo con mucha dificultad por la cantidad de gente que se encuentra en la casa. Llego a mi destino. La mesa está casi totalmente cubierta por la multitud: hay un par de chicas subidas en ella bailando, un par de adolescentes enrollándose, otro par brindando echando la mayoría de alcohol al suelo y en una esquina, Andy.
Está apoyado en la esquina derecha de la mesa con una cerveza en la mano libre. Está solo. Sin pensarlo, me acerco a él.
-Vaya la ladrona de llaves, ¿Qué haces tú aquí? Me río y le sigo el rollo.
-Lo mismo que tú, sin nada mejor que hacer un sábado, si te digo la verdad, no creía que fueras capáz de llegar a casa con el colocón que llevabas a anoche.
-Ya ves, puedo sorprender. Intenta hacerse con las últimas gotas de cerveza. -Me voy a por otra.
Le persigo hasta la nevera. Me mira, sonríe con la boca pequeña y vuelve su mirada a la nevera.
-Si quieres follar me lo dices y nos ahorramos esta gilipollez. Dice sin más, cerrando la nevera de una patada y dándole un trago a su otra victima.
-¿Yo? ¿Follar contigo? Antes me bebo toda la mierda que hay en esa nevera.
-Pues cuándo te la bebas, me avisas y follamos.
-¿Quién te has creído que eres? No recordaba lo irritante que podría ser este chico.
-Lo siento, suponía que serías la típica virgen que se cree diferente o interesante por serlo, pero no lo es, claro está. Se ríe y pega otro trago a la botella de vidrio.
-Vete a la mierda Andy, no te haré caso, seguramente estarás puesto hasta arriba como siempre o te habrás quedado sin neuronas de tanto que te metes. Le doy la espalda y me gira cogiéndome del hombro hacia él.
-Estaba de broma. Relájate. Me mira fijamente a los ojos, nos quedamos unos segundos así. Tiene las pupilas dilatas y apesta a alcohol. Puedo ver como el sudor resbala por su frente, como su pelo esta chapado por lo mismo.
-¡Seleeeeenaa! Me saluda Valeria. Sacudo la cabeza para espabilarme, creo que he bebido suficiente alcohol por hoy. Miro de nuevo al chico irritante, está mirando el móvil con los labios pegados en la boquilla de la botella.
Me acerco a Valeria que se encontraba en frente mía. Rodeo la mesa con torpeza y me reúno con ella y con su nueva amiga.
-¿Qué haces tía? Me da dos besos en la mejilla. -¿Quién es ese chico tan guapo eeh? Me da esta vez un codazo insinuado algo.
-No es nadie, déjalo. La aparto un poco para observar a la chica que tiene al lado y me doy cuenta que estaban agarradas de la mano. Valeria se da cuenta de ello y la suelta rápidamente.
-Ella es Ingrid, mi compañera de plástica. Ingrid me dice hola tímidamente y me disculpo por no haberla reconocido.
-¿Con quién has venido tía? Espera que lo adivino, ¿con él verdad?
-No que va. Me acaricio molesta el brazo derecho y le explico a continuación, -Vine con Angus, fue el que me dijo que había una fiesta, en realidad no tenía ganas de...
De repente, se hace el silencio. Todos escuchamos más de una botella romperse. Valeria sorprendida, me llama la atención para que mire al frente.
-¡ESTÁS LOCA RILEY! ¡LOCA! Riley se acerca a él y le pega una bofetada en la cara. Andy se cubre la mejilla con la mano e intenta cubrirse la otra; no llegó a tiempo.
-¡Estabas coqueteando con aquella! ¡LO ESTABAS HACIENDO! ¡ME HAS DESTROZADO LA VIDA! Le empuja contra la encimera ¡ME HAS DESTROZADO LA VIDA ME OYES! Le vuelve a empujar y esta vez, desconocidos se meten de por medio separándolos. Dos chicos cogen por los hombros a Riley entre pataletas y arañazos varios además, de chillidos acompañados de insulto hacía Andy. Mientras, él sigue apoyado en la encimera cubriéndose la mejilla izquierda donde recibió el primer golpe. Nota como todos los que estábamos alrededor lo observamos.
-¿Qué miráis? ¡Estoy bien! ¡Que siga la puta fiesta! Alza los brazos al aire y abre mucho los ojos.
-¡Eso digo yo! ¡Que siga la fiesta! Dice el chico de la casa, Dave. También conocido por el problemático a la vez de chulo del instituto. No entiendo como un ser como él puede tener tanta repercusión pero me tengo que callar, pues, yo también estoy en su fiesta, en su casa. Rápidamente el ruido se vuelve a formar y los altavoces suenan más fuertes.
Andy me mira de reojo, resopla y se marcha de la cocina. De nuevo, voy detrás él.
Se para en seco en la puerta principal y se gira hacía a mí -Si creías que íbamos a follar, no era así, no me gustas nada, ¡Nada! ¿No lo entiendes? Deja de perseguirme, de buscarme, porque me encontrarás y no de la manera que quieres.
Después de aquellas palabras dirigidas hacía mi, se da media vuelta.
-Eres odioso. Se vuelve a girar.
-Y tu una puta gilipollas que vive en su mundo de yupi con sus cereales de mierda que lo único que quiere es llamar la atención porque no tiene o no sabe hacer otra cosa, ¿sabes qué? Quédate con mis putas llaves, o mejor no, porque tu vida es tan aburrida que serías capaz hasta de entrar en mi casa tan solo por un poco de atención. Sigue viviendo en tu mundo de yupi niñata malcriada.
Y sin más, sigue su camino.
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Ily
RomanceSiempre serás las cuerdas de la guitarra que nunca te dejé tocar con mis dedos. Siempre serás la melodía que hará mi corazón vibrar. _____________________________________ No todo es como queremos o imaginamos. A veces los estereotipos, lo que pensa...