-Narra Andy-
La noche es fría, solitaria, oscura. No hay nadie en las calles, no se escucha ningún ruido exceptuando el aire azotando las ramas de los árboles. Necesitaba despejarme, que la brisa me refrescase las ideas. No sé por donde ando y eso es lo mejor de deambular solo. Tendemos siempre a buscar a alguien que nos saque del agujero, de nuestros problemas. Siempre pensamos que la solución está en alguien, ese alguien que nos libere, que nos haga olvidar, que nos haga sentir en el cielo estando en el mismo infierno. Alguien que nos seque las lágrimas, alguien en el cuál apoyarnos cuando nos tropezamos pero siempre sin mirar al salvavidas; vemos que nos saca pero no que la estamos arrastrando al agujero. Vemos como nos lleva al cielo pero agarrándonos de sus alas rotas. Vemos como nos seca las lágrimas siendo ella una laguna. Vemos como nos recoge del tropiezo estando de rodillas.
-Narra Selena-
-Hija ¿puedes sacar la basura?- Dice mientras se seca y moldea sus preciosos tirabuzones rubios.
Está radiante hasta en pijama. Me causa risa que no nos parezcamos nada, ella es rubia, tiene los ojos de un gris extraño y yo sea morena y tenga los ojos más negros que haya visto nunca.
Es muy coqueta, siempre lo ha sido. Siempre ha sido de tardar horas y horas arreglándose para estar perfecta. Es una mujer muy delicada y fina. Da igual como se encuentre, aunque el mundo se le fuera a caer encima, ella va a estar perfecta siempre.-Por cierto, este fin de semana salgo.- No puedo creer lo que está diciendo. Me quedo con la boca abierta, me mira se ríe y vuelve a mirar al espejo para seguir peinándose.
-No me mires así boba, ni que te hubiese dicho que es una cita.-
-Mamá, ¿es una cita verdad?-
-A ver, no es verdaderamente una cita, solamente he quedado para cenar con un hombre.-
-Mamá, eso es una cita.- Digo señalándole y partiéndome de risa por la respuesta de mi madre. -¿Se puede saber quién es?
-Vale te lo cuento.- Suelta el secador y se dirige dónde me encuentro para coger las cremas de noche.-¿Te acuerdas cuándo nos mudamos que teníamos un vecino justamente a lado de Florencia y su marido?- Asiento y dejo que termine.-Pues él. Me lo encontré esta mañana en el supermercado. Resulta que se divorció de su mujer y se fue a vivir de nuevo con sus padres pero no está muy lejos de aquí.-
-Vaya... se ve que la señorita no desaprovecha ninguna.- Apoyo la mano en la mesa y espero con ansias su contestación, me encanta chincharla.
-No, y a ver si tu también haces lo mismo, tienes diecisiete años y todavía no te he visto con nadie-. Dice aplicándose las cremas.
Termino por apoyar la otro mano.-No creo que me veas con nadie, es muy complicado eso-. Digo mirando hacia arriba.
-¿Complicado? No hay ningún chico que te guste? Aunque pensándolo mejor si que es complicado. Nunca te gustó ningún chico, ni tan siquiera famoso.- Se queda en silencio unos segundos y me mira espantada. -Pero que si te gusta las chicas no hay ningún problema, ¿nos será eso no? Vamos yo nunca te dije que no a eso. Dime que no, ya lo que me faltaba que me hayas estado ocultado eso.-
-No, no mamá.- Me río. -De momento.- Sus caras me está haciendo la noche. -A ver es verdad que nunca me han gustado mas allá de parecerme atractivos pero a lo mejor será eso, que me gustan las chicas.-
-Pues mira, lo prefiero. Prefiero que traigas a una chica por la puerta antes que las cosas que me ha pasado a mi por estar enamorada de un hombre.-
Pongo los ojos en blanco y me despego de la mesita. -Esta conversación esta yendo muuuuuy lejos. Me voy a tirar la basura.-
-No te vayas a enamorar de una chica por el camino- Dice a voces mientras bajo las escaleras.
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Ily
RomanceSiempre serás las cuerdas de la guitarra que nunca te dejé tocar con mis dedos. Siempre serás la melodía que hará mi corazón vibrar. _____________________________________ No todo es como queremos o imaginamos. A veces los estereotipos, lo que pensa...