Capitulo 34

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Narra pablo..

Fui a mi cuarto a cambiarme, me puse una bermuda de jean azul con una remera simple color celeste, y mis crocs negras. Bajé rápido a la cafeteria y me senté con mis amigos.

Tomas: Che pablo te quedaste dormido?

Pablo: Si

Guido: Hoy hacemos water ski?

Tomas: Dale negro! Te apuesto lo que quieras que aguanto mas que vos

Guido: El que pierde se chamuya a la buchona -dirigimos la mirada a pilar que estaba sentada en una punta ella sola-

Pablo: Pobrecita

En ese momento la puerta de la cafeteria se abre y entra marizza con una ajustada remera blanca que le llega por arriba del ombligo,dejando a la vista su hermosa cintura, y un short comun de jean. Todos la miraban embobados.

Tomas: Cada vez mas buena se pone la loca -suspiró-

Guido: Se imaginan tenerla abajo tuyo? -se agitó la remera-

Iba hablar pero si actuaba en el papel de celoso podian sospechar y no queria eso. Aunque sean mis amigos me enoja que hablen así de ella.

Pablo: No se que le ven de lindo

Tomas: Menos mal que hasta ayer te parecia linda -dijo bromenando-

Pablo: Tiene buen cuerpo nomas, solo la iba usar para curtir -mentí-

Guido: Y porque ahora no estan juntos?

Pablo: Le dije que me aburrí y se enojó..bueno dejemos de hablar de ella

Todos terminamos de desayunar y fuimos a la playa.

Mauro: Bueno chicos los que quieran hacer alguna actividad acuatica vengan conmigo

Tomas y guido me dejaron solo y se fueron con mauro, un grupo de chicos y chicas de otros cursos tambien fueron con el.

Visualizé a lo lejos a marizza sola tomando sol en unas reposeras. Me levanté y caminé hacia ella, me senté disimuladamente en una de las sillas que estaban al lado de ella. Miré para los dos costados y no habia nadie que nos esté prestando atención.

Pablo: Marizza! -susurré-

Marizza: Porque susurrás? -rió-

Pablo: No se por las dudas -me encogí de hombros- Seguime

Me paré y empezé a caminar hasta el hotel, marizza llegó al rato. Le agarre la mano y la guié conmigo hasta el lugar donde venía cada vez que vengo al vacance club. Era un hueco, casi como una cueva pero toda abierta, tapada por una mini cascada que se formaba con la poca agua que llegaba del mar hasta este lugar tan alejado de todos.

Marizza: Que lindo lugar -sonrió-

Pablo: Yo venía acá cuando me enojaba de chiquito con manuel o con tomas y queria estar solo

Marizza: Siempre viniste a las vacaciones del colegio?

Pablo: Si, prefiero venir acá que rme de vacaciones con mi viejo

Marizza: Vos decis que acá nadie nos ve?

Pablo: Exacto

Marizza: En ese caso -se acercó a mí y nos besamos-

El beso comenzó lento pero despues se fue conviritiendo en algo mas apasionado. Al estar con bikini acaricié toda su espalda. La agarré de los muslos y la subí encima mio. Busqué con la mirada un lugar para sentarme y ví una piedra perfecta, asi que me senté con ella todavia encima dandome besos en el cuello. La apreté mas hacia mi cuerpo y seguimos besandonos, bajó su mano dejando un recorrido de caricias por todo mi abdomen, hasta llegar al short de baño. Metió la mano y comenzó a masajear mi miembro, yo solo suspiraba entrecortadamente. Se levantó un poco de mi regazo y se corrió la bombacha de bikini para luego meter mi miembro dentro de ella. Comenzó a moverse lentamente, me estaba matando, hasta que sus movimientos se hacian cada vez mas rapidos y mas exitantes. Los gemidos de ambos resonaban por ese lugar, y aunque tratabamos de callarlos era imposible. Ella se separó de mi y se acomodó la bombacha, me di cuelta que se estaba por venir, y que bueno que se separó porque yo tambien. Ahí me di cuenta de algo.

Pablo: Marizza no usamos proteccion!

Marizza: Uy mierda me re olvidé! -se tocó las manos con la cabeza- Bueno, igual traje la pastilla del día despues por si me pasaba algo como esto asi que tranqui

Pablo: Bueno pero vamos y te la tomás ahora si?

Marizza: Vamos muñequito -nos dimos un beso y fuimos al hotel-

Al llegar fuimos a su habitación y ahí se tomó una pastilla.

Pablo: Te amo -la abrazé-

Marizza: Que pasa? -rió-

Pablo: No puedo decirle a mi novia que la amo? -hize pucherito-

Marizza: Yo tambien te amo -sonrió y nos besamos-

Pablo: Cuanto me amas? -dije con vos de bebé-

Marizza: Mucho mucho -dijo con la misma voz-

Reímos y nos besamos.

Pablo: Bueno vamos a la playa?

Marizza: No porque allá no te puedo dar besitos -puso pucherito-

Pablo: Entonces nos quedamos acá?

Marizza: Nop

Pablo: Y a donde queres ir?

Marizza: Vamos a escaparnos

Pablo: Vamos a una heladería?

Marizza: No bobo, vamos a irnos de acá, querés?

Pablo: Con vos me arriesgo a todo

Marizza: Bueno primero tenes plata?

Pablo: Obvio

Marizza: Bueno prepará tus valijas y veníte acá, en el aeropuerto vemos a donde vamos

Pablo: Sos una loca -reí y le dí un beso-

Salí de su habitación y fuí a la mia, me cambié y comenzé a guardar la poca ropa que usé estos dos dias. Al terminar fui al cuarto de marizza con mi valija pero ella no estaba. Me senté en su cama a esperarla hasta que escuché un ruido por la ventana, miré y entró marizza por ahí.

Pablo: Que haces entrando por la ventana? -reí-

Marizza: En la salida del hotel hay guardias de seguridad y si nos ven con la valija le van avisar a dunoff, despues hay camaras por todas partes, pero no hay camaras por las escaleras de emergencia así que bajamos por acá, y saltamos el muro que separa el hotel de la calle

Pablo: Ya tenes experiencia en escaparte?

Marizza: Me escapo de todos lados cuando me aburro de un lugar

Pablo: Bueno vamos?

Marizza: Vamos

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