Capítulo 23

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⏳Un amor justo a tiempo⌛

Cuando llegué a la sala de espera, miro a mi madre y a mi padre a los ojos por unos segundos, no podía ocultar mi rabia y mis interrogantes en mi cabeza, sé que no es el momento y mucho menos el lugar. Por otro lado estaban mis suegros que se me lanzan con preguntas sobre el estado de Amaia, les dije la verdad y ellos están inconsolables.

Marque a casa para preguntar sobre Dorothy y ella ya esta dormida sin saber lo que esta pasando  con su madre. No entendía ese cambio de Amaia para con nuestra hija y ahora que escuche todo sé que la ama más que a ella misma y a mí. -¿Por qué hizo todo eso con Mathilde?- pronto lo sabré porque no puedo ser tan inhumano con Amaia dejarla e ir en busca de respuestas.

Estuvimos varías horas sin saber nada de Amaia, hasta que sale el doctor......

-Lo siento mucho, tienen que ser muy fuertes, Amaia esta en sus últimos momentos y necesita estar tranquila.

-¡No puede ser!- grita la madre de Amaia al mismo tiempo que abraza a su esposo.

-Pueden pasar, pero ella necesita verlos tranquilos por favor.- Dice el doctor.

De inmedio tratan de calmarse para ir con el doctor quién los llevará a la habitación.

Me he quedado sin palabras y con dudas qué no sé si aguante a que todo esto pase y pueda hablar con mis padres.
Ellos y yo nos hemos quedado solos en una pequeña Sala.

-Hijo, ¿Por qué no vas a descansar?- Me dice mi madre, pasando su mano sobre mi espalda e inmediatamente me retiro.

-¿Qué pasa hijo? Desde que saliste de esa habitación estas muy raro con tu padre y conmigo, ni siquiera nos diriges la palabra.

No aguanto más, tomo aire y exploto......

-¿Por qué le hicieron todo eso a Mathilde y a mí?- Los miro a los ojos, mi padre que está sentado en una silla frente a mí sólo agacha la cabeza y mi madre no sabe ni que contestar.

-¿Qué les hizo ella para que ustedes la odien tanto? ¡Contesten por favor!- Les vuelvo a preguntar y exigiendo respuestas.

Mi padre alza su mirada, pudiera decir que no es una mirada de enojo como aquel día que discutimos por Mathilde, esta mirada era de culpas y tal vez de arrepentimiento.

-Hijo, nosotros tuvimos mucho que ver en que Mathilde se fuera, apoyamos a Amaia y destrozamos tu vida-. Perdón hijo.

-¿Perdón? Tal parece que se les hizo fácil lastimar y si no fuera porque Amaia se encuentra en esta situación no me hubieran enterado de la verdad. ¿Por qué lo hicieron? ¿Qué les hizo Mathilde?- Les digo con lagrimas en mis ojos.

-Por Alexander.- Dice en seco mi madre.

Yo no comprendía a que se refería o que era lo que trataba de decir. Mi padre abrió sus ojos con una mirada penetrante e inmediatamente le dice a mi madre......

-¡No Fatima! No lo digas por favor, fue una promesa ¿La recuerdas?

-Yo no estoy entendiendo absolutamente nada y no quieran volver a mentirme.

-No hijo, Alexander era tu tío, mi hermano.- Dice mi madre con lágrimas en sus ojos.

Volteo a ver a mi padre que está llorando y yo sin entender.

⏳Un amor justo a tiempo⌛ TERMINADA ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora