⏳Un amor justo a tiempo⌛ TERMINADA ✔

Capítulo 2

⏳Un amor justo a tiempo⌛

Sentí como sus manos las ponía sobre mi cuerpo, me lanzo a la arena, su respiración me causaba nauseas, mi grito no salía porque empecé a llorar y mi mente no pensaba en otra cosa más que; este sujeto me va a violar. -¿Qué hago.... Dios mío?- Cerré mis ojos y pensé en aquél día en que Joan me había salvado de unas tipas que querían golpearme porque había obtenido el primer lugar en natación. Y después él me enseño como librarme de cuando alguien me tuviera sujetada. Así que como pude me arme de valor y le di un fuerte golpe en sus partes, empece a forcejear y a pegarle como loca. Rápidamente en un descuido me levante, corrí pero esa arena era tan pesada que no me dejaba correr rápido, sentía que no avanzaba nada.
Fue entonces cuando empece a gritar a todo pulmón, el sujeto corre detrás de mí y logra tirarme nuevamente a la arena, grito con todas mis fuerzas, vuelvo a cerrar mis ojos porque ahora sí, me sentía que ni Dios padre me podría salvar de esta.

De pronto siento mucho peso que cae sobre mí y eso ocurre porque alguien lo dejo inconsciente después de un fuerte golpe en la cabeza.
Bajo la luz de esa luna brillante y de ese sujeto logró ver a mi salvador, -¡Por Dios!- Es el chico guapo de la playa, jajajaja.. No tan tonta la niña, a él si lo pude reconocer y como no, si es el hombre más guapo.
No sé porque, pero el miedo desaparece por completo de mí, en eso llega Antonietta y Joan, preguntan qué es lo que está pasando. Y yo todavía con el sujeto encima de mí, hasta que Joan y ese chico de la playa me lo quitan de encima.
Antonietta me ayuda a pararme, pero el susto se fue por completo y hablo de lo ocurrido.
El chico de la playa viene hacia a mí, me pregunta si no me hizo nada el sujeto. Le contesto que no logró su propósito gracias a su intervención y que solo estaba asustada. Dentro de mí pensaba como había desaparecido ese miedo en cuanto él apareció para salvarme.

Joan llamó a la policía, llegó y todo fuimos a parar a la comisaria.
Dimos nuestra declaración por separado, llegó un abogado que el chico de la playa nos lo presento como su amigo Sebastián, la verdad que yo estaba muy confundida por lo que acaba de suceder, estaba asimilando todo, que hasta del chico de la playa me había olvidado.
Después de un par de horas Sebastián arreglo todo para que nos fuéramos, el sujeto que me ataco ya estaba mejor solo había sufrido un desmayo y pronto estaría pagando por lo que me hizo.

Joan, Antonietta y yo salimos de ahí y nos fuimos a casa, no supe más del chico de la playa y ahora mi salvador.....

El chico que siempre veía en la playa, nunca me había volteado a ver por más que trataba de llamar su atención y esta noche me salvo de una posible violación. Y lo más chistoso que no me dijo su nombre, pero para mí era el chico de la playa, el chico más guapo y ahora mi admiración no sólo se basaba en ese cuerpo tan sabroso, si no, en lo que acababa de hacer por mí.
Yo tampoco le dije mi nombre, ahora lo único que él sabe de mí, es que tengo dos amigos Joan y Antonietta, y yo de él, que tiene un amigo abogado de nombre Sebastián. Pero algún día lo veré para darle las gracias y algo más jajaja...

Llegamos a casa, Joan decide quedarse a dormir con nosotras, Antonietta muy amable le dijo que se quedara con ella en su habitación y que no le importaba compartir la cama. Jajajajaja...
-¡Que acomedida primita!- Le digo yo. Ella solo dice, -Eso lo aprendí en Canadá, prima-.

Esta noche no podré dormir, solo de pensar lo que me hubiera pasado si el chico de la playa no hubiese aparecido a salvarme, empecé a llorar, ya que no había sacado mi rabia y mi susto... Pero después dije entre mí, Mathilde, ¡Calma! ¡Calma! esta playa ha sido mi hogar por mucho tiempo, he caminado a altas horas de la noche cuando quiero despejar mi mente o cuando quiero escribir algo y nada me había sucedido.
Amo este lugar y nada, y nadie lograra quitarme mi paz y mucho menos huir de mi hogar.
Definitivamente de esto mis padres no deben de enterarse, porque ya sé lo que me dirán y además no pienso preocuparlos.

Y nuevamente llega a mis pensamientos ese héroe de la noche, hasta quedar profundamente dormida.

Continuará......

Autora: Elida M.