Fue su ultima palabra.
Oscuro. Un leve aroma a suciedad y el suelo mas frío del invierno.
Desnutrición. Posiblemente se deba a que no puede comer más de lo que se le permita.
Muerte. Pero viva, al fin y al cabo su corazón sigue bombeando. Seguía sintiendo su sangre correr por sus venas. El ritmo aumentaba una vez la puerta se haya abierto, pero eso solo era cuando el hombre venía con las manos vacías.
Miedo. Ya no existía tal palabra para la joven, luego de pasar mas de un año atrapada en ese oscuro lugar. Solía vivir con miedo pero, en este caso, lo perdió y bloqueó su mente. Aunque no del todo.
Heridas. Como cuando alguien toma tu brazo y, con sus uñas, te desgarra la piel lentamente. La marca en su abdomen estaba sana, pero su corazón se habia destrozado.
Pedazos. De cada una de sus uñas, piel, e incluso sus esperanzas.Su ritmo cardíaco se desboca al escuchar el sonido de la puerta.
- ¿Cómo te sientes?
No hay respuesta.
El joven levantó su mano izquierda e impactó contra la mejilla sucia y, actualmente, roja de la muchacha en el suelo.-¿Cómo te sientes? - Repitió.
Aún así no respondío. Dejó de intentarlo desde la última vez que se dió cuenta que, haga lo que haga, dijese lo que dijese, el haría lo que quisiera con ella.Bufó algo molesto.
Ella ya no era consciente de cuanto tiempo estaba ahí atrapada.
Tal vez fue más que un año.
El pequeño tragaluz del sótano le enseñaba las microparticulas de piel muerta y suciedad que se encontraba en el aire. La envidia surgía de su interior ¿Cómo podía estar celosa de la mugre, sucia pero a la vez, libre?
Cerraba sus ojos imaginando los arboles, un bosque, el cosquilleo de sus pies desnudos en el musgoso césped.
Trataba de recordar el olor de aquel lugar.
Se escucha un motor. El hombre se alejó rapidamente luego de que se haya subido los pantalones y acabase sobre ella. se ha marchado del sótano y del infierno.
Tan delgada...
Tan débil...Al levantar su brazo, en un intento de atrapar su propia "piel muerta flotante", cae y resuena en el suelo su atadura. Lo que la obligaba a pertenecer a ese lugar. Tan desnutrida y huesuda, su mano se liberó del peso de la esposa y su cadena.
Su mano libre... ¿Libre?
Se incorpora con ayuda de la pared, y puede sentirlo...¡PUEDE SENTIRLO! Ese aroma que no lograba reconocer en el bosque, ese pequeño brillo de esperanza cruza sus ojos por un segundo, y se entierra en lo profundo de ella, por que lo siente, entra en ella como una bala entrando en su organismo, siente su vida, su pulso totalmente alterado de la emoción, la vida sigue, la vida le está dando una oportunidad única. Sus ojos reflejan todo: Los abrazos de papá, las risas con su mejor amigo, los momentos románticos de su vida. La adrenalina de subir a una montaña rusa era estúpida al sentir tanta felicidad como en ese momento.
Un ladrillo de construcción, varias cajas apiladas hacia el tragaluz.
Llega a una salida, siente la tierra en sus pies y su vestido sucio ya no blanco.
Blanco...
¿Se suponía que debía ser un vestido feliz?
Deambular por el bosque y caer cientas de veces por sus pobres articulaciones y desnutrición. Sus piernas ya no funcionaban correctamente.
De pronto el suelo se siente duro, es asfalto que está caliente por la luz del cielo. Un auto frena delante de ella y sólo observa.-"Quiero vivir"
Al principio fue precavído. ¿y esas pintas? Para darse cuenta de que estaba en problemas.
El hombre la sube al auto y se la lleva lejos del bosque, lejos de esos dias oscuros. Lejos de él.Fuera de la oscuridad.
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Relatos cortos, historias largas.
Short StoryRelatos que no tienen correlación, pero confió en que son lo suficientemente fuertes o interesantes para que capten tu atención. . . . ADVERTENCIA: Puede contener escenas violentas, sangrientas, lenguaje explícito, temas fuertes no apto para gente...