Capítulo veinticuatro

28 4 0
                                    

Me complace informarles que en este capítulo las cosas van a subir de temperatura ;) justo como a ustedes les gusta

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Me complace informarles que en este capítulo las cosas van a subir de temperatura ;) justo como a ustedes les gusta. Disfruten la lectura!

...

Doy vueltas en la cama, no logro pegar un ojo. Me siento en el colchón duro como una roca, en la oscuridad de la habitación oigo las respiraciones relajadas de mis compañeros, quienes seguro se encuentran en el más profundo de los sueños mientras que yo lucho contra los malos pensamientos e intento dormir con poco éxito. Tomo el reloj que se encuentra dentro de mi mochila y veo que las agujas marcan la una de la mañana. Se me revuelve el estómago al pensar que seguramente Theo ya soltó a mi madre y que ella debe estar huyendo a algún recoveco de la ciudad. Le ruego al cielo que se esconda en alguna parte y que no la encuentren al amanecer.

Pongo el reloj dentro de mi chaqueta. Me vuelvo a acostar y cierro mis ojos para relajarme ya que mañana será un día largo y debo estar con todos mis sentidos preparados.

Fallo en el intento. Resignada, salgo de mi cama con cuidado de no despertar a mis compañeros. Me escabullo y cuando estoy fuera la habitación, suelto un suspiro. Apoyo mi espalda contra la pared. Mis manos sudan por alguna extraña razón y el nerviosismo se hace presente junto con la ansiedad para hacerme sentir como la mierda. Inspiro aire y entonces me digo a mi misma que la única forma de calmar mis sensaciones es si recurro a Theo. Necesito preguntarle y saber si todo ha salido bien por el momento.

Quizás esté durmiendo pero no podré descansar si no hago el intento así que comienzo a caminar en dirección a su cuarto.

En cuanto menos me doy cuenta, me encuentro frente a su puerta. Dudo antes de tocar con mis nudillos pero una voz en mi cabeza me advierte que me adentre lo antes posible antes de que alguien me descubra. Trago saliva, muevo mis piernas impaciente y finalmente, la puerta se abre. Un Theo sorprendido y sin remera me recibe. No puedo evitar el rubor en mis mejillas.

-¿Blake?

-¿Puedo pasar?- Susurro.

-Si.- Se mueve hacia un lado, me adentro a la habitación y él cierra la puerta detrás, haciéndome saber que ahora estoy en terreno seguro. Noto que la cobija de su cama se encuentra desordenada, como si hubiese estado durmiendo.

-¿Estabas durmiendo?- Miro por sobre mi hombro como niega con su cabeza y se dirige a la cama para sentarse en el borde de esta. No paso por alto su cuerpo semidesnudo, su piel perfecta cubriendo sus músculos duros.

-¿Sucede algo?- Su voz es ronca, típica de alguien desvelado.

-No... lamento aparecer así es que no podía dormir.- Confieso.

-Está bien. De todos modos, yo tampoco podía dormir.- Camino unos pasos hasta que estoy frente a él, con mi espalda apoyada en la pared.- Se me hizo imposible pegar un ojo.

Zona BDonde viven las historias. Descúbrelo ahora