El Príncipe de Daegu . yoonmin

20

El tratar de alcanzar a Jimin y regresarlo al pueblo fue en vano, Taehyung se devolvió a casa en cuanto el ocaso comenzaba a asomarse mediante el reflejo del río.

Jeon les comentó acerca de lo que el omega mayor le había dicho antes de partir, por lo cual se tranquilizaron un poco al saber que tarde o temprano se encontraría con el peli negro.

Tras disfrutar de la comida, Yubi con ayuda de su hermano trajeron de la casa del omega el pequeño catre donde dormía Jungkook para ahora quedarse junto a ellos mientras Park regresaba.

– Muy bien cariño, espero que te mantengas cómodo junto a mis niños.

– Muchas gracias noona, sé que esto fue demasiado pronto, pero Minie hyung se veía algo preocupado.

– Lo sé lo sé, conozco a Jimin y es demasiado terco como para hacerlo recapacitar de sus acciones.

– Si noona. Por cierto, ¿Dónde está Taetae hyung?

Desde la tarde en que el instinto celoso se apoderó del alfa adolescente no había vuelto a verlo, se sentía incluso triste ante la falta de éste, lo extrañaba demasiado.

– Fue a traer algo de tu ropa para el tiempo que te quedes con nosotros –dijo, acariciando un poco la cabellera de éste– Junnie me dijo que hubo un pequeño problema entre ustedes dos, ¿quieres platicar?

También el rubio sabía sobre su estado de ánimo, sus ojos llorosos aquel día fueron la respuesta, nunca se imaginó ver de esa manera al castaño, su mirada y comportamiento le resultaron extraños cuando enfrentó a Yugyeom.

– No entiendo porque Taetae se puso así con Gyeomie, él es un buen amigo, los quiero a ambos, pero ese día hyung me dio mucho miedo.

Kim Taehyung, realmente arruinaste todo con Jungkookie. Pensó la mayor.

– Mi hermano actuó mal, él no es malo, pero si un poco bruto como sabes. Tae reaccionó de una manera extraña para ti porque... bueno, está comenzando a experimentar, cosas que les pasaban a los adolescentes.

La cara de confusión del menor solo complicó la situación– No entiendo.

– Es algo complicado de explicarte, veras, tiene que ver desde que comienzas a presentarte.

– ¿Hay algo malo en mí?

– No cariño, no hay nada malo contigo, es solo... ah, solo olvidemos el tema, ¿está bien?

– Si noona.

De pronto su nariz comenzó a picar, ese olor tan característico anunciaba la llegada de alguien más. Las pisadas del castaño resonaron hasta llegar al cuarto de los cachorros, encontrándose con su hermana y Jeon.

– Vaya, te tardaste un poco. ¿A dónde fuiste? Creí que solo ibas por la ropa de Jungkookie.

– Por ahí –respondió con pocas ganas– Tenía que terminar de ayudar a Yunho en la siembra. Aquí están tus cosas, solo traje lo necesario mientras Jiminie vuelve.

Agrio, ese olor le disgustaba en sobre manera al menor, el aura de su hyung era otra, inclusive su corazón podía retener lo que comenzaba a sentir en esos momentos. Yubi se mantuvo ante el comportamiento del menor al igual que él.

– ¿Está todo bien Tae?

– Todo bien noona, solo un poco preocupado por Yoongi y Minie. ¿Necesitas algo más?

Sin estar convencida asintió con la cabeza, tomando las pertenencias del más bajo– Ya no, gracias.

– Bien, me voy con los niños entonces.