Capitulo 14:"Brendon Urie".

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Dicen que la mañana es la mejor parte del día ya que el desayuno es donde toda la familia se reúne para estar en armonía y en paz... ¿Por qué a mis padres no les dijeron eso?

—Esto es una mierda.

—Come o vete con tu puta zorra.

—La golfa hablando de zorras.

—¡Callate ya, idiota!

—¡Es por esto que prefiero irme con Emma!

—¡Largate! ¡Si tanto te gusta esa puta vete con ella!

—Eres una maldita lunática, ni para darme hijos serviste Grace y el único que tuviste te salió maricón.

—Maricón igual que tú, Boyd.

Gritó mi madre mientras discutía como todas las mañanas con mi padre mientras yo comía mi desayuno.

Prefería pensar que nada pasaba, que solo yo y el inexistente silencio eramos los que estábamos en la habitación. Imaginaba que estaba completamente solo, sonriendo, riendo como loco...

—¿De que mierda te burlas?—dijo mi padre agarrandome de la camisa con brusquedad.

Golpe de la mañana, estoy listo.

Uno, dos, tres.

Patada, cachetada y mas patadas.

Para ya, para ahora, para por favor.

Mamá se esfuerza.

Jajaja ¡Eres tan talentosa madre! ¡Tan buena actriz!

—¿Para que volvías maldito anormal?

No respondí.

¿Para que hacerlo?

Ahí viene tan puro y lindo, vamos a recibirlo.

Las lágrimas y sangre son el arte mas doloroso pero necesario ¿no? ¿No lo era? Diganme que si ¿no? Jajaja

Como el animal que soy fuí sacado a fuera de mi casa en un empujón.

—Y no vuelvas jamás— dijo mi padre cerrando la puerta.

Escuché un grito y me levante de la banqueta corriendo hacía la ventana para ver como mi padre molia a golpes a mi madre.

—¡No! ¡No!—gritaba golpeando la ventana pero nadie me escuchaba— ¡Dejala!

Seguía gritando pero mi madre en el piso, con el labio roto me decía que me fuera con señas que sólo yo y ella entendíamos. Negaba con la cabeza pero con su mirada llena de súplica decidí irme con todo el dolor de mi corazón.

Eran las 7:30 de la mañana y tenía que ir a la escuela.

Lo bueno es que tenía puesta la ropa decente que tengo y no tuve de otra mas que limpiar mis lágrimas aunque me dolía el ojo izquierdo pero lo ignoré. Arregle un poco mi pelo sin verme en un espejo.

Tenía demasiado frío, no traje suéter, traía solo unos pantalones de mezclilla, vans rojos y una playera blanca con mi pelo mojado y desarreglado porque vamos, ni aunque intentará peinarme con las manos podría controlarlo.

—¡Brendon!— me gritaron por detrás, volteo y era mi jirafa favorita— Demonios ¿Que rayos te pasó?

—¿De que hablas?—pregunte asustado tocandome el rostro, vi mi rostro en la ventana de un auto.

Ojo izquierdo medio morado, labio partido y un poco de sangre seca. Era un horrible monstruo.

—Mi rostro...

Un Sueño De Chico |Frerard| |Peterick| |Ryden|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora