—N-nicholás—mencioné tratando de apartarlo de mi.
El se separó inmediatamente.
—Lo siento—se disculpa y rasca su nuca— simplemente que no pienso muy bien cuando te veo y lo único que quiero hacer es besarte.
Me asombre y sentí mis orejas enrojecer.
Debo pensar en otra cosa que no sea lo de hace un momento.
—Gracias por contarme todo; la verdad había creído que no me habías notado—mencioné ignorando los latidos desenfrenados que sentía.
El sonrió y me miro nervioso.
—¿Aun me amas Avery?—preguntó de repente.
Le miré en shock, me sentía presionada y creo que el corazón no me ayuda en este momento.
—Nicholás..
—No se que me pasó por nunca hablarte, por un lado me gustaba que me vieras, se notaba que querías estar conmigo y eso en cierto modo me cautivó.
Por eso no pienso dejarte ir tan fácil, me enamoré de ti Avery Burton.Son muchas cosas que siento en este momento, no puedo decidir con claridad; la locura de Celeste sigue tan fresca en mi mente que es lo que más me preocupa.
—Nicholás, Celeste ha..
—Se lo que es Celeste, Avery..
Me quedé sin palabras.
—Tiene un trastorno—me confiesa— ahora mismo no recuerdo el nombre pero su cerebro debe engancharse a alguien para que no cometa actos suicidas.
«Sus padres me lo revelaron; me pidieron que fuera su novio ya que ella se obsesionó conmigo; no querían que ella se matará por no corresponder, así que accedí.
Todo iba muy bien entre nosotros, pero desde los últimos meses me pedía que la cortará con una navaja; tal vez a ella le parecía excitante. Obviamente me negué y ella pedía cosas mas fuertes..Ya no soporte más y creo que fue esa razón también por la que terminamos.. »
No sabía que decir, Celeste en verdad esta enferma y Oliver también sabía pero nunca me lo mencionó, tonto.
—Me ha amenazado de que me aleje de tí— le comunique—no sé de lo que es capaz de hacer; y sinceramente tengo miedo.
El me rodea con sus brazos y le correpondo.
—Tranquila no voy a dejar que te pasé nada—me consuela—hablaré con sus padres para convencerlos de que deben mandar a Celeste a un manicomio, su transtorno se ha salido de control.
Solo asenti contra su pecho.
—¿Que te parece si voy a dejarte a tu casa?— propone.
—Esta bien— digo y salimos del restaurante caminando en un silencio cómodo.
—Puede ser que Ian esté en casa_le menciono.
El suelta un pequeña risa y me mira.
—Creo que le caigo bien a tu hermano—dice sonriendo.
—Supongo pero creo que aún se hace el duro contigo— dije también sonriendo.
—Entonces iré más seguido a tú casa— dice y me da un beso en la nariz.
Cuando llegamos a mi casa nos despedimos, suerte que Ian se encontraba durmiendo en su cuarto.
Subí a mi habitación y al momento de abrir la puerta un golpe en mi frente me hace perder la conciencia.
ESTÁS LEYENDO
Detrás de tu Sombra ©
Teen FictionJamás me enamoré, jamás experimente ese sentimiento que llaman AMOR, hasta que lo conocí a él. Su sonrisa tan hechizante, su mirada azul tan soñadora era tan admirada. Su personalidad tan ligera y humilde me hizo enamorarme más de él, así que lo d...