Canción de multimedia: Bad boy - Red Velvet 🎵 🎶
♡ – Sábado, 13 de febrero de 2010.
Taehyung aceleró para cruzar el puente que dividía al pueblo en dos. El sur del pueblo era el protagonista de proezas y hazañas casi fantásticas, pero él estaba bastante acostumbrado a ese lugar. Solo era una zona descuidada, donde el gobernador había perdido el poder, y donde el sheriff tenía poca o nada de autoridad.
Se detuvo frente a la vieja bodega. Solo iba a saludar, y a avisarles que no contaran con él para esa noche. El señor Kim tenía razón. Fue poco responsable faltar a su trabajo el fin de semana anterior —su segundo trabajo—. Kim Namjoon también era propietario del autocinema. Todos los sábados en la noche, a las ocho en punto, el hombre encendía un proyector en el enorme lote, escogía una película, y cobraba la entrada a los autos. Era como un ritual familiar en el pueblo ir a los sábados de película, y Taehyung era el encargado de la cabina de operaciones. Sin duda, no podía volver a faltar.
El pelinegro subió hasta la segunda planta, que era lo más parecido a un apartamento en la bodega. El primer piso estaba lleno de cachivaches y motocicletas. Encontró a Hoseok y a Ji-ho sentados frente a la mesa ratona; el humo de cigarro nublaba el lugar, mientras la música sonaba de una grabadora.
—Hey, ¿qué hacen? —saludó. Pensó que estaba jugando cartas, pero al acercarse se dio cuenta de que ambos estaban contando dinero, fajos peculiarmente gordos. Sintió que había llegado en el momento equivocado, así que antes de que Hoseok se levantara de su lugar, lo detuvo con una mano—. Está bien, no he visto nada. Ya me iba. Solo venía a decirles que no estaré disponible hoy.
—Vale —Ellos no lucían muy desesperados por hacerlo cambiar de opinión, así que Taehyung solo asintió como despedida y dio media vuelta para partir. Al hacerlo, se encontró con Han Bin ingresando al cuarto.
—Detengan ahora mismo lo que están haciendo y escúchenme con atención —dijo. Han Bin estaba ebrio. Resultaba obvio, por la botella de cerveza y por sus palabras arrastradas—. Tengo el chisme completo.
—¿A qué te refieres? —murmuró Ji-ho sin entender, y sin siquiera levantar la mirada del fajo que contaba diligentemente.
—Yerin. Ella dice que el hijo del contador definitivamente es gay. Estudiaba en Seúl con la prima de Yerin, pero lo expulsaron por coger con un profesor de la universidad, o eso dicen —Han Bin dio un sorbo a su botella de cerveza—. Su nombre es Jeon Jungkook. Dicen que por eso dejó la ciudad y vino al pueblo.
El nombre golpeó un poco tarde en la cabeza de Taehyung. ¿El mismo Jungkook que ahora trabajaba en el autoservicio de Min y que había llegado hace poco al pueblo?
—Mierda, menudo nombre de niño rico. Quiero conocerlo y pintarle una verga en la frente —se burló Ji-ho—. Eres una perra chismosa, Han.
—Yo no comprendo —Hoseok frunció el ceño—. No hay nada como tener un buen par de senos en tus manos y amasarlos, acariciarlos, besarlos y chuparlos. Dios. Aquí —Él señaló su pecho—, no hay nada.
—Sí —corroboró el rubio, deteniéndose un momento para darle una calada al cigarrillo olvidado en el cenicero—. Digo, lo más parecido que tenemos son las bolas y son flácidas y horribles. Poco recomendado. —Ambos estallaron en carcajadas.
—Bueno, solo son rumores. Vive del otro lado del pueblo, el lado lindo —comentó Han Bin, deteniendo a Taehyung en su caminar, o más bien en su huida—. ¿A que no te lo has encontrado?

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The village - KookV
FanfictionAcabas de decir que te gusto. Francamente no te culpo. Y yo tengo curiosidad, así que, resuelve mi duda y todos estaremos satisfechos. Historia inspirada en la canción The village - Wrabel