Capítulo 23: Carlos ༄

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Por tanto, no te avergüences de dar testimonio de nuestro Señor, ni de mí, preso suyo, sino participa de las aflicciones por el evangelio según el poder de Dios,
2 Timoteo 1:8

Por tanto, no te avergüences de dar testimonio de nuestro Señor, ni de mí, preso suyo, sino participa de las aflicciones por el evangelio según el poder de Dios,2 Timoteo 1:8

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-Sam.Seguir en un coche a ésta gente me parece exagerado -habló Bo.

-Si la directora no quiere saber quien es el culpable. Yo voy a descubrirlo.Aunque mirando las cámaras es suficiente

-No está confirmado si hay cámaras

- Es un secreto a voces

-Secreto o no.Estoy cansado de seguirlos

Iván y Carlos se habían subido en un coche deportivo gris. La banda generación Luz iba en el vehículo de Sam y les seguían en la distancia.

-Vamos a investigar , capitán -susurra el de ojos verdes con entusiasmo.

-Sam sigo sin entender porque llevas tantos días llamándome capitán.Creía que ese título era de Chris

-Y lo era. Hasta que dejó de venir con nosotros a todos sitios -dijo molesto ya que la amistad que tenía con Marc se había deteriorado desde que el par salía a diferentes sitios sin decir a dónde ni con quién.

El coche gris paró. Una persona con capucha que cubría todo su cabello y gafas de sol miró a los lados antes de subir.La sudadera era de color rosa pálido y el pantalón de color oscuro. Por su constitución adivinaron que era una mujer.

-Quién será

-Seguro una chica del mare

-Por cómo se esconde dudo que sea del mare. No quiere que la vean con ellos por alguna razón

-Pues menudo cochazo que tienen

-Son del mare. Tinen mucho dinero

Cuando la desconocida entró, el coche arrancó. Sam aceleró siguiéndolos a una distancia prudencial. El gris dió varios giros por la ciudad y casi veinte minutos después pararon en una zona cercana a la plaza. Sam al ver otro aparcamiento libre estacionó el vehículo detrás del coche gris.

Sin dar tiempo a nada, Carlos salió y prácticamente corrió hasta ellos. Golpeó la ventana del conductor con los nudillos.

-¿¡Qué queréis !?

Samuel estaba pálido ya que no creía que podrían descubrirle. Decidió bajar la ventanilla porque si seguía golpeando la ventana iba a destrozar el cristal.

Carlos era un estudiante de cuarto curso en la universidad mare nostrum. Todos le describían como el alma de la fiesta, era arriesgado y divertido, se llevaba muy bien con todos los de la universidad.
Su cabello largo rebelde y sus cejas espesas con el ceño fruncido en combinación con su cuerpo atlético le daban un aire desenfadado y en ocasiones violento aunque en comparación con los indomables este chico era una brisa suave.

Indeleble ©✔︎ (SGL1) [Cristiana]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora