Una vez terminada la cena, nos fuimos mi hermana y yo a casa, al día siguiente Claudia tenía excursión y se tenía que levantar antes. Les dejamos con la pedante de Lydia, pobrecitos. Llegamos a casa y mi hermana se fue directamente a dormir. Ella se iba a ir al colegio antes que yo, así que yo me quede despierta un rato más. Me fui al baño y me miré al espejo. Sorprendida, comprobé cómo mi labio había bajado su hinchazón considerablemente desde el mediodía. Me lavé los dientes y me acosté. Cogí el móvil y me puse a revisar tumblr. "Mensaje de Dylan O'Brien" apareció en la barra de notificaciones. Lo abrí nerviosa y salió nuestro chat en la pantalla. Me había escrito "echaba de menos tus besos" con un emoticono lanzándome un beso. En ese instante me derretí, y le contesté:
-Yo los hecho de menos ahora.
Lo sé, era muy cursi, pero las mariposas en mi estómago y el remolino de sentimientos agolpados en mi cabeza no me dejaban pensar con claridad. Vi que estaba escribiendo, y al segundo recibí una respuesta:
-Y yo. Quiero verte, necesito verte.
-Verme? Ahora? Yo también quiero, pero no se puede :(
-Cómo que no?
De pronto, una piedra chocó en mi cristal. Me giré, asustada, y comprendí en seguida quién había sido.
-No me lo puedo creer. Eres tú?
-Pues claro. Venga, ábreme.
-La ventana?
-Ajam
-Pero cómo vas a subir por la ventana? Sabes que mis padres no están y que mi hermana está durmiendo, verdad? Podrías entrar perfectamente por la puerta principal.
-Y que tendría de especial eso?
Me reí nerviosa. ¿Cómo podía ser tan dulce? Abrí la ventana corriendo y le vi abajo esperándome, con el móvil en la mano. Llevaba puesto un abrigo, guantes y un gorro de lana, y aún así estaba tiritando.
-¡Corre, sube! Vas a coger una pulmonía.
Se encaramó a la rama de un árbol bastante alta con la agilidad de un ninja, y desde ahí, puso una mano en mi ventana, cogió impulso y saltó, Metió las piernas primero y luego la cabeza, y me miró divertido mi cara atónita. Se quitó los guantes, cogió con sus manos mi cara y me besó, haciendo que quedase aún más paralizada.
-Vale la pena con tal de verte- Oh dios, en serio, se había transformado en alguien completamente distinto al chico engreído y narcisista que conocí el primer día de clase. Ahora era el chico más tierno que había conocido.
Le miré maravillada y le devolví el beso. Él se quitó el abrigo y el gorro, que por cierto le quedaba genial, con cuidado de no separarse de mí. Sólo nos apartábamos para tomar aire durante un milisegundo, para luego volver a juntarnos. Me tumbó en mi cama suavemente y empezó a besar mi cuello, aquello iba a dejar marca al día siguiente. Le quité la camiseta lentamente, y se desató los zapatos. Volvió a la carga, pero puse mis manos en su pecho y le hice parar.
-Dylan...no creo..que esté...que esté preparada...
Me miró a los ojos, y luego lanzó una mirada rápida a mi cuerpo y se mordió el labio. Asintió lentamente e hizo ademán de coger la camiseta, pero yo fui más rápida y la aparté de su mano.
-Pero puedes quedarte un poco más si quieres.
Me sonrió ampliamente y abrió la cama. Me metí en ella y se metió él, abrazándome cálidamente. Apoyé mi cabeza sobre su pecho desnudo, y mientras me susurraba algo al oído que no llegué a comprender, yo me quedé dormida.
Mis pies se resintieron, congelados, al pisar el frío mármol. ¿Mármol? ¿Dónde estaba? Miré al mi alrededor y descubrí que me encontraba en una especie de templo griego, en la escalinata que conducía al interior. Entré y me quedé maravillada por la grandiosidad de aquel lugar. Había numerosas estatuas de dioses y columnas con volutas en el enorme capitel que se fundía con el techo. Paseé mis dedos por sus estrías, estremeciéndome al contacto. Mis dedos estaban hipersensibles.
-¡______!
Me giré sobresaltada y vi a Tyler mirándome. Pero en seguida se interpuso Dylan, tapándome la vista de mi amigo. Me asomé, pero Ty ya había desaparecido. Miré a Dylan, y me di cuenta de la diferencia de altura. ¿Era yo tan bajita? ¿Y él tan alto? Qué extraño todo... De pronto sentí una mano en mi hombro. Me volteé y vi a Tyler con los ojos llorosos. Intenté preguntarle, pero se fue corriendo. ¿Qué narices acaba de pasar? Dylan se puso delante de mí y me besó, y todo se volvió borroso.
Me desperté sobresaltada y me traté de incorporar, pero pude porque un brazo me retenía. Miré alarmada a mi lado y me calmé al acordarme que había dormido con Dylan. Me acurruqué, pero me volví a asustar al escuchar un carraspeó que le despertó y nos hizo mirar a mi puerta. Mi hermana soltó una risita al ver el que él estaba sin camiseta y me miró divertida.
-Ya me voy a clase.
-Vale...pásatelo bien- sonreí molesta y Dylan asintió todavía con su brazo rondeándome.
Se fue riéndo y escuché cómo cerraba la puerta de la calle.
-Me cae bien tu hermana- dijo con una sonrisa en la cara.
Nuevo capitulo babys :D Como se nota que no tengo nada que hacer...bueno en realidad si tengo deberes...pues como se nota que no quiero hacer nada jejeje. Bueno, espero que os haya gustado, votad y comentad, ya sabéis, cuatro comentarios y ocho votos mínimo para el siguiente. Besoos.
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Entre el odio y el amor (Dylan O'Brien y tú)
Fanfiction¿Qué harías si te enamorases del chico más odioso y tierno del mundo? Créditos de portada: @PonyZhalvajeSensual