Capítulo 28

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-Oye, _____, no quería sacar este tema pero...¿por qué viniste ayer con el labio hinchado?

-Em...porque me caí...sí, me caí por las escaleras.

-_____...no me mientas...

-¡No te miento!

-¿Entonces por qué no me has dicho que fue por la pelea con Lydia?

Me deshize de su abrazo y me incorporé, mirándole extrañada.

-¿Quién te lo ha dicho? ¿Y por qué me lo has preguntado si ya lo sabías?

-Quería que me lo contarás tú... y me enteré por una conversación que oí por casualidad. _____, ¿por qué no me lo querías contar?

-No sé...es mi problema... ¿Para qué preocuparte?

-¡Porque me importas! Y no quiero que te pasa nada malo- dijo acariciando mi mejilla. Ese chico me mataba, de verdad.- Así que si te ocurre algo, me lo vas a contar, por muy duro o difícil de explicar sea.

Yo sonreí y me acerqué a él. Pusé su cara entre mis manos y junté mis labios con los suyos.

-¿Me has escuchado?- me decía entre beso y beso, y yo solo me reía y asentía. Me subí a sus piernas y le tumbé en la cama. Mientras nos seguíamos besando, metió sus manos bajó mi camiseta del pijama y buscó en mi espalda la hebilla de mi sujetador, pero no encontró nada. Me miró sorprendido y me reí a carcajadas.- ¿Dónde...?

Yo negué con la cabeza.

-Me gusta dormir...libre- volví a soltar otra carcajada y me bajé de la cama.

-Eh, ¿qué haces?

-Tenemos que arreglarnos, hoy también tenemos clase.

Bajé a la cocina y preparé el desayuno. Le grité que bajara y en seguida me hizo caso, con el pelo alborotado y sin camiseta. Mi mente voló hasta el momento en el que se la quité, los dos tumbados en la cama. Céntrate, _____. Desayuno, ropa, instituto pensé mientras apartaba la vista de Dylan. Iba a ser difícil evitar pensar en él de ese modo durante todo el día.

-¿Y qué va a pasar ahora?

-¿A qué te refieres?

Tomé un sorbo de mi leche y le miré seria.

-Que qué vamos a hacer. Bueno, más bien, ¿qué vas a hacer? Con Lydia, conmigo... O sea...en realidad, ella y tú seguís siendo novios. Y sin embargo, no quieres seguir con ella. O al menos eso interpreto con lo que hemos hecho estos días- dije mientras nos reíamos.

Apoyó las manos en la mesa y bajó la cabeza, supuse que estaría pensándolo. Aunque no había mucho que meditar, tenía que terminar lo que tuviese con Lydia si quería estar conmigo. Finalmente, me miró serio y respondió.

-Tienes razón. Creo que debería cortar con ella.

-Pero no se lo digas cuando haya mucha gente, porque seguramente reacciona mal.

-Está bien.

Nos fuimos a vestir y a arreglarnos. Estaba mirando con preocupación las marcas que me había dejado en el cuello cuando me gritó que llegábamos tarde. Salimos deprisa y me di cuenta de una cosa: si llegábamos a la vez, sospecharían aún más.

-Dylan, vete a por tu coche. Yo voy andando.

-¿Qué? ¿Por?

-Para no llegar a la vez.

-Oh...vale. Pues luego nos vemos.

Nos despedimos y me puse a andar rápido. Ese día había salido más tarde que de costumbre. Cuando llegue al instituto faltaba un minuto para que empezasen las clases. Entré con la respiración agitada a matemáticas, y pude sentir cómo un par de miradas del fondo de la clase se clavaban en mi nuca mientras yo me sentaba. Me giré malhumorada y vi a Lydia y a su "séquito" mirándome y susurrando cosas al oído. Las llamo así porque la siguen a todas partes, sin tener personalidad ni opinión alguna, y aceptan todo lo que les ordena. Son unas imbéciles sin cerebro. Las ignoré por completo, y fui nada más terminar la clase a por mi amiga.

-Tía- me dice en cuanto me ve.- Ayer te lo pasaste bien, ¿no?

-¿Cómo?

-Tienes el cuello lleno de chupetones.

-¿Tanto se notan?

Soltó una risita y asintió. Yo fui corriendo al baño, y al salir tenía la mayor parte cubierto por maquillaje. Menos mal que me lo dijo, ya me veía el día entero con miradas puestas en mi cuello. Pero en clase de música seguía sintiendo que alguien me miraba. Me giré molesta y descubrí que era Lydia quien me miraba. Me volví a mi posición normal asustada, y cogí el móvil con disimulo.

-Dylan, habéis cortado ya, verdad?

-Bueno...más o menos...

-Cómo que más o menos? Esas cosas o se hacen, o no se hacen!

-El caso es que se lo he dicho...pero ella no...

-No qué?

-No lo acepta. Dice que es demasiado popular como para verse envuelta en otra ruptura.

-Pues que joda! Si ya no te quiere, que mas la da...

-Para que no deje de ser tan popular segun ella.

-Y tu que la has dicho?

-Que yo ya no era su novio, y que me dejase en paz. Y entonces ella me ha gritado algo pero yo me he ido y no la he oído.

-Pues ahora creo que pretende amargarme la vida, porque me esta mirando como si me odiase a muerte...

-Normal, tienes todo lo que quiere. Eres guapa, inteligente, tienes un cuerpazo, tierna, simpática, agradable, me tienes a mí de novio.

Noté como mis mejillas ardían y sonreí como una tonta.

-Ains que me pongo roja...

-Mejor, estás preciosa cuando cuando te sonrojas.

-Vale, para ya, en serio, que estoy en clase!

-Jajajaja vale vale

-Te dejo que al final se va a dar cuenta.

-Vale, te quiero, lo sabes no?

-Y tu sabes que me encantas? Y yo a ti, anda tonto, claro que lo sé jajaja

-Por si acaso..

Me mandó un emoticono de un beso y bloqueé el móvil. Creí que explotaría de felicidad en ese mismo momento, pero una mirada de Lydia jurándome venganza me devolvió a la realidad. ¿Cuándo me podría librar de ella?

Creo que me estoy poniendo mala :( así que este cap es bastante relajadito... solo amor flotando en el aire jajaja ya sabéis, cuatro comentarios y ocho votos :D sorry si queríais mas acción, ya habrá en los siguientes.

Entre el odio y el amor (Dylan O'Brien y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora