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El cielo oscuro con unas pocas estrellas me recibió al salir de la empresa. Estaba por caminar hacia la camioneta, cuando una chica recostada en un auto llamo mí atención. Kia estaba allí, mirando el cielo  apoyada en su auto, enfrente de la empresa. La mire confundido, ella dejo de mirar arriba y fijo si vista en mí, levanto su mano a forma de saludo.

  Los chicos miraban entre curiosos y burlones la escena. El mánager también de dio cuenta, solo me hizo una seña dejando me ir, asentí mientras me encaminaba a ella.

Hola, ¿Que tal la práctica? - pregunto una vez me encontré frente a ella - Bien, ¿Tus clases? - respondí algo descontado - Bien - observé como fijo su mirada en las personas detrás de mí - ¿Me seguirán si te secuestró? - interrogó mientras sus ojos se establecían en los míos - Tal vez - contesté burlón - soltó una risa leve, pero ni corazón de alborotó, una sonrrisa apareció en mí rostro - Bueno, ve a decirles que te vas conmigo y que te devuelvo antes de las doce, cenicienta - bromeo, yo reí mientras volvió junto a todos-

  Oigan, ustedes vuelvan, yo iré más tarde - dije mientras ellos me miraban curiosos - bien, no olvides el tapa bocas - contesto Sejin mientras me lanzaba uno - Okey, duerman bien - repliqué mientras me lo colocaba y caminaba hacia Kia.

  Ella abrió la puerta del copiloto, yo entré mientras me sentaba, ella cerró la puerta, para luego subir del lado del conductor.

Mientras ella manejaba, yo cantaba las canciones que pasan en el radio.

Llegamos - apagó el auto, seguidamente bajo de este, yo imite su acción - Woua! - exclamé sorprendido- no me había dado cuenta que el río han era tan lindo de noche - mire a mí al rededor - Si, es un lindo lugar para pensar - contesto mientras me giraba a mirar - Si, es el lugar perfecto - me tiré en la grama mientras observaba el cielo nocturno - Por eso te secuestré, sabía que se gustaría - imito mí acción - No es secuestró si me dejó - reímos - Cierto, la próxima te vendo los ojos - replicó riendo, yo la mire asustado - es broma, no te haría algo así - hizo un gesto de restarle importancia.

  Concentre mí atención en el sonido del agua, las estrellas que brillaban en el oscuro cielo. Ellas me hacían acordar a Kia. Pude escuchar un poco de lo que dijo su padre, se notaba que había pasado por mucho, ella aún en toda esa oscuridad, seguía brillando para los demás, con su sonrisa, sus bromas que hacen reír hasta al más amargado ser humano, su ser es pura luz. En ese momento, un pequeño pensamiento me hizo sonreír.

"Novia"

"Seguro era la novia perfecta, la más única. Afortunado sería si ella fuera la mía"

"Y si?..."

  La mire, ella también estaba pérdida en sus pensamientos se veía tan...

Hermosa - pensé en voz alta, segundos después entre en pánico cuando su mirada interrogante se centro en mí - ¿Que? - pregunto con una risa leve - disculpa, pensaba en voz alta - mire hacia el cielo, incómodo - Hermoso tú - respondió imitando mí acción con total normalidad, mí corazón se aceleró y el calor subió a mis mejillas - No es hermosa la relación de los pingüinos? - pregunto mientras me miraba - eligen una pareja para toda la vida - asentí, antes de hablar - si, es sumamente romántico - sonreí al imaginarnos en una relación.

-¿Quieres ser mí pingüino?-

  Me paralice, su sonrisa sincera y sus ojos emocionados, hacian de mí estómago una fiesta.

¿Q-que?- pregunté perplejo - Nada, solo me deje llevar - vi como su emoción desaparecía poco a poco, su boca formaba una línea recta- Si - respondí con la esperanza de que su carita de iluminará, me miró confundida - Si quiero ser tu pingüino - aclare, no dudo en girar hacia mí y abrazarme.

  Apoyé mí mentón en su cabeza, la abrace por la cintura y sonreí, senti como levantaba la mirada, por lo que yo baje la mía, encontrando con sus ojos, brillando en la oscura noche. Sentí como sus suaves labios chocaban con los míos, una de mis manos se dirigió instintivamente hacia su mejilla, mientras volvía el pequeño beso, en algo más dulce.

🌈

🌈Nota


Nuestra historia entre cafés| knjDonde viven las historias. Descúbrelo ahora