—¡Ma', viste las noticias sobre el estrecho de Gibraltar!— Pregunto el rubio cuando inició la videollamada con el moreno.
—¿N-no, paso algo malo?— Pregunto el de ojos verdes a su hijo adoptivo el cual lo apodaba con afecto "su ballenita".
—Bueno, te lo paso el enlace.— Contesto con una pequeña sonrisa el rubio de ojos azules, el moreno no evitó una sonrisa al pensar lo adorable que era su hijo adoptivo.
La pareja del moreno al notar que estaba el ibérico en una videollamada con el estadounidense de manera silenciosa se sentó al lado del hispano siendo eso notado por el otro rubio.
El moreno abrió el enlace que le envío el americano, su cara de felicidad se cambió a una sorpresa molesta, al lado de el molesto morenos se encontraba Arthur riéndose con lágrima en sus ojos tansolo por leer el titulo.
Alfred colgó la vídeollamada antes de que Antonio llegara a reaccionar para no que no llegara a regañarlo, pasándole "el muerto" a Arthur.
La mirada Antonio comenzó a lanzar puñales a el británico el cual seguía riendo mientras corría para alejarse del moreno por seguridad.
—¡Besarias la silla si no te quisiera Arthur! — Exclamó el moreno aún enfadado al ser comparado con un cachalote.
—No me gusta la madera de las sillas no sabe bien.—Dijo el anglosajón utilizando la mesa como barrera entre el y Arthur.
La cara de el moreno paso de irá a dudas preguntándose por qué el rubio sabía el sabor de la madera de sus sillas.—¿Como sabes eso?—pregunto aún anonadado el moreno por la respuesta.
—Esa pregunta no planeo responderla.— Dijo el inglés mientras huia por las escaleras aporbechando la confusión del moreno.—Al igual que tú con el sabor de las farolas.— Dijo en un susurro ya en su cuarto para no llamar al peligro.
Feliz día de la Hispanidad aún que seguramente en Hispanoamérica no es ni por la mañana.
