Larga vida al ¿Impostor? | 𝐌.𝐘

여섯

—¿Y bien? —Todos bajaron la mirada. Jawang rió mostrando todos los dientes. —Solo convocaron esta reunión para hacerme perder el tiempo. —Dijo el rubio comenzando a levantarse de su trono.

—Principe... —Jawang miró al que habló levantando una ceja de forma déspota y moviendo su lengua por el interior de su mejilla. —Su majestad. —Corrigió el viejo consejero, ahora bajando la mirada. —Debemos hablar seriamente sobre su decisión de reinar. Todos los consejeros creemos que, deberíamos saber exactamente cuál fué la última voluntad de su padre su majestad el rey Joheun.

—¿Voluntad? —Interrumpió Jawang con tono molesto. —Que importa su voluntad si soy el único heredero que queda.

—No sabemos el verdadero paradero de su hermano. —Musitó otro provocando que el rubio no tuviera de otra que ponerse de pie: —Murió. —Soltó. —Yo mismo lo ví morir. Así que, no le pertenecerá el trono a nadie más que a mí.

Los murmullos y reclamos de todos los consejeros en el lugar comenzaron a sonar, la mayoría mostrando inconformidad con lo que acaba de decir el, ahora ya, nuevo rey. Pero este mostraba todo, menos interés en saber si alguien está de acuerdo o no.

—Si no hay más que decir, bien pueden irse. —Jawang bajó los escalones y sin desviar la mirada a alguno de los consejeros que le miran, salió.
La larga fila de servidores que se juraron fieles a cualquiera que tuviera el poder, comenzaron a caminar detrás del de cabellos rubios y dorados adornos en su vestir. Sus pies caminaron hasta llegar a su habitación y dos delgadas sirvientas con la mirada pegada al suelo, abrieron las puertas dejando que pasara; el té que su padre adoraba beber junto a él y su hermano, estaba sobre la mesa que se encuentra en medio del lugar. Comenzó a caminar hacia dicha mesa, pero de inmediato se detuvo.

—¿Necesita algo, majestad? —Preguntó Boho, el guardia real.

Jawang negó con la cabeza: —¿Crees que no soy capaz de reinar? —Preguntó girando hacia quien lo mira con atención. —¿Acaso no me veo como un rey competente?

Boho no respondió de inmediato; de hecho, no sabía si quiera si debía hacerlo. ¿Que tan competente debe ser un rey para poder ser un buen rey? Su padre tenía errores, y de ellos aprovechaba para saber que y que no debía hacer durante su mandato. Boho no temía que el joven frente a él no fuera así, ni siquiera lo quería.
Jawang es diferente, de su padre y también de su hermano, incluso si ambos tienen casi el mismo rostro; ambos tenían diferente pensar y por lo mismo, diferentes propósitos para el pueblo si es que llegaban al trono, pero jamás pensó en ellos como incompetentes o competentes para tal responsabilidad, solo menos o más provechosos para tal. Entonces, ¿Que debía responder?

—Su majestad, una pregunta así podría ser mi camino a la muerte. —Respondió bajando la mirada.

Jawang rió levemente: —Tu lealtad a mi familia ha sido tan grande que hasta yo me considero en deuda contigo. —El de armadura, levantó la mirada y se mostró sorprendido. —Boho, por favor. Como único amigo en este momento, ¿Crees que no soy capaz de reinar? ¿Parezco tan buen rey como padre? —Volvió a preguntar, esta vez con ojos tan diferentes a los que ha tenido que mostrar ante el consejo. Ahora Boho solo podía ver al niño que se sentaba en las piernas de el rey Joheun. —Por favor, responde.

Boho solo suspiró: —Nadie lo es. —Dijo primero. —Su padre tuvo tantos errores que no soy capaz ni de decir la mitad, pero también tuvo aciertos. Y estoy seguro de que nadie sabe cuántos fueron realmente.
Su padre no sabía si era capaz de reinar, pero lo intentó. Porque ese era su deber. —Ahora Jawang suspiró. —Y en cuanto al consejo, lo único que podría decirle es que no confíe en ellos con totalidad. —Aconsejó con voz baja. —El rey Joheun se refería a ellos como la rata que espera que el gato se distraiga para poder robar su comida, porque sabía que detrás de todos sus juramentos de lealtad, ingeniaban planes para derrocarlo. Siempre deseó que uno de sus hijo ocupara su lugar antes que alguno de eso hombre ambiciosos.

—Creo que siempre quiso a Yoongi como rey. —Musitó el de costosas prendas dando la vuelta.

—Como usted dijo hace rato, ahora no importa mucho que es lo que quiso. —Respondió Boho esperando que su hablar no tuviera o provocara algún mal. —Ahora, sea el rey que el pueblo necesita, para que yo pueda ser el servidor que usted necesita.