Estoy dispuesta a darle la guerra a mi hermano. Si bien quizá Lauren sea como yo y nuestro grado de alcohol sea directamente proporcional a nuestro grado de verdad.
Para ser practica, he pensado toda la noche en una segunda posibilidad, que no sea así, afortunadamente no encuentro ninguna razón lógica para que me haya mentido.
¿Venganza? Lauren no es así, o al menos eso creo, pero pensaré muy bien antes de actuar o tomar una decisión
Son las dos de la tarde, acabo de almorzar y estoy llena. El menú fue chuletas de cerdo en salsa BBQ y papás fritas, que delicia. Me preparo para ir a casa de Michelle, necesito sus consejos.
—¿A dónde vas? (pregunta Sofia al ver a Camila peinandose).
—¿Te importa? (contesta Camila sin mirarlo).
—Sí, necesito saber si te demoras, yo también saldré.
—Iré a casa de Dinah y después por ahí. ¿Te verás con Lauren?
—Sí, tenemos planeado ir a cine.
—Pues que lástima, regreso hasta la noche.
—No te preocupes, le diré que venga. La casa sola, los dos solas, mejor así (dice Sofia sonriendo).
—Siempre comiendo mis sobras... Que mala costumbre (dice Camila con una sonrisa, Sofia se sorprende al escuchar eso). ¿Me disculpas? Debo terminar esta trenza.
(Sofia se va).
Continuo haciendo mi trenza, aguanto la risa hasta que se me sale. Pagaría por ver la cara que puso una vez más.
Me echo perfume, agarro mi cartera y me voy sin decirle nada a Sofia. Papá está trabajando y la señora que nos cocina fue a hacer compras.
Le pido a Tadeo que me lleve a casa de Dinah, él me sonríe y asiente. En el camino enciende la radio. Ponen una canción de amor tras otra tras otra y mi cabeza todas las relaciona con Lauren.
Llegamos a la casa de Dinah, me despido de Tadeo.
—¿A qué hora paso por usted, señorita Camila?
—Yo te llamo.
—Vale, que tengas un buen día, adiós.
—Gracias Tadeo, igualmente.
Tadeo se va.
Toco la puerta, me abre Camila.
—Hola Mila (dice Dinah dándole un beso en el cachete a Camila).
—Hola DJ.
—Pasa...
Entro a la casa de Dinah. Miro detalladamente la sala, todo está diferente. Cambiaron los muebles y la decoración.
—Vaya, me gusta lo que hicieron aquí. Quedó hermoso (dice Camila).
—Gracias, Dinah escogió el modelo y yo el color (dice la señora Milika, la mamá de Dinah).
—Señora Milika.
—Camila, tanto sin verte (la señora abraza a Camila). ¿Qué tal te ha ido?
«Lo sé, la mamá de Dina me quiere tanto y yo a ella.»
—Muy bien señora, ¿y usted? ¿Qué tal todo?
—Bien, gracias. Todo está yendo bien (la señora sonríe).
—(Risas) me alegró de eso.
—(Dinah tose) aún sigo aquí.
(Risas).
—No te la robaré más (dice la mamá de Dinah).
La señora Milika se va a su cuarto. Dinah me agarra del brazo y me lleva a su patio. Saca un colchón y lo coloca sobre el suelo. Me tiro sobre el y hundo mi cara en la almohada.
Ella se sienta en mi espalda y empieza a darme nalgadas.
—Sucede algo. ¡A mí no me mientes Camila Cabello!
—(Risas) me conoces tanto.
Me pongo boca arriba, DJ se acuesta junto a mí y miramos las nubes.
—¿Quieres hablar de ello? (pregunta Dinah).
—Sí, necesito un consejo.
—Adelante (dice Dinah con una sonrisa y mira atentamente a Camila).
—(Camila suspira) Mis problemas tienen nombre y tú ya lo conoces (Camila mira a Dinah).
—Oh, no me digas que...
—Sí. Creí haberlo conseguido, creí que todo había vuelto a la normalidad, pero la vi y mi mundo se puso de cabeza, de nuevo (Camila se pone los brazos en la cabeza).
—Quiero detalles, ahora.
—Cristian me invitó a una cena con su mejor amigo. El mundo es un pañuelo de lágrimas, el chico resultó siendo el hermano mayor de Lauren y ella también fue a la cena. Para colmo de males, fue con su novia, quien resulta siendo mi hermana.
—¿QUÉ? (Dinah grita sorprendida, entonces baja la voz y continua) Camila, te juro que no lo sabía.
—Está bien, no te preocupes.
—Sofia es una desgraciada.
—Lo sé... Ella en cambio es tan, wow. Si antes era hermosa, ahora es toda una diosa. Lauren es mucha mujer para la babosa de mi hermana.
—Total. ¿Qué tal la cena? ¿Hablaron?
—Sí y fue muy incómodo. Ella empezó a beber mucho vino y a lanzar indirectas como flechas (Dinah abre la boca sorprendida y mira atentamente a Camila, quien continua hablando). Se emborrachó en un abrir y cerrar de ojos, y bueno, la acompañé al baño. Nos besamos pero detuve todo antes de que pasara a más.
—¡Ah! (exclama Dinah con asombro).
—Sí. Ella estaba tan ebria que temía que no se acordara de nada o que peor aun, se arrepintiera. Además de que estábamos en el cuarto de su hermano.
—¿Arrepentirse? Si te besó es porque aún siente algo por ti.
—Eso creo, recuerdo que dijo que no soportaba verme con Cristian y que no amaba a Sofia.
—Din din, ahí está. ¿Cuál es el problema?
—Que es la novia de mi hermana y que estaba borracha en ese momento.
—Pero primero fue tuya, además la gente cuando está ebria es cuando tiene valor para decir cosas que nunca diría estando sobria.
—No es tan sencillo, DJ. Lauren es de esas que harían mil veces antes lo correcto y eso me hace pensar que actuó por impulso.
—¿Lo correcto? ¿Y por qué es incorrecto que te ame? (Camila suspira y vuelve la vista a las nubes). ¿Quieres mi consejo?
—Por supuesto.
—Dices que aún sientes algo por ella, entonces búscala, habla con ella sin rodeos. Dile lo que sientes, pregúntale por sus sentimientos. Si ambas sienten lo mismo, entonces inténtenlo. Lucha por tu derecho a amar.
(Camila sonríe y abraza a Dinah).
—Hablar contigo me hace tanto bien. Nunca me dejes (dice Camila mirando a Dinah a los ojos).
—Nunca lo haré. Mejores amigas por siempre.
—Mejores amigas por siempre (repite Camila).
—Y ahora, gracias a ti, mejor amiga, Sandra nos mostrará sus senos.
—(Risa) ¿qué?
—Apostamos. Ella dijo que volverías con Cristian, por supuesto yo aposté a que no.
—Ustedes están locas (ambas se ríen).
—¡Pero veremos sus pechos! (Dinah hace un baile triunfador).
—Compraré tequila para entonces (dice Camila riéndose).
—Oh eso estaría excelente.
La mamá de Dinah entra al patio con una bandeja con empanaditas de pollo y carne y dos vasos de jugo de maracuyá.
—Aquí tienen chicas (dice la señora sonriendo).
—Oh muchas gracias señora Milika, no debió molestarse (dice Camila).
—Cierto, pero gracias (dice Dinah).
—No es nada (deja la bandeja en el suelo, sonríe y se va. Camila y Dinah se sientan para comer).
—Tienes una mamá maravillosa, ¿lo sabes? (dice Camila).
—Sí (Dinaj sonríe) lo sé.
¡Oh! Las tradicionales empanaditas de la mamá de DJ. Son tan deliciosas, sin duda ni las de Gourmet VIP le llevan a los talones.
Nota mental: debo pedirle la receta algún día.
De un momento a otro el plato esta vacío. DJ y yo reímos. Aumentaré los kilos que perdí en Madrid con el té y las galletas de la madre superiora.
Madre superiora... convento... Natalia. Demonios, no le he hablado.
Dinah pone música de Panic! at the disco con su celular. Ambas cantamos "New perspective" y antes de que la canción acabe, su celular suena. Una llamada de su novio. Ella contesta inmediatamente con una sonrisa en su rostro. Aprovecho que está distraída y le mando un Whatsapp a Natalia.
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Yo:
Hola Nata, lamento no haberte hablado antes. Ya sabes, el cambio de simcard.
Natalia:
Hey, hola :$
Mentirosa... Jumm. ¿Qué tal todo por allá?
Yo:
No miento.
Normal, ¿qué hay de ti? ¿Cómo estás?
Natalia:
Bien, gracias por preguntar.
Estoy comprando parte de los libros para la U.
¿Tú que has echo?
Yo:
Comer, comer y comer.
Engordaré
Y bueno, salir por ahí.
Natalia:
Hahahaha, me gustaría verte así.
Lucirías hermosa :$
¿Has tomado muchas fotos? Quiero conocer tu país.
Yo:
No muchas, pero te prometo que tomaré fotos de lugares típicos y te las enviaré.
O mejor aún, ven y te hago un tour
Natalia:
Me encantaría eso.
¿Volverás? Ya te extraño.
Yo:
no he hablado de eso con papá.
Yo también te extraño :)
Natalia:
Me debo ir. Mi tía quiere que de una charla. ¿Puedo llamarte a las 9 de aquí?
Yo:
Está bien, buena suerte.
Claro. Muero por escuchar tu voz española xd.
Natalia:
Y yo la tuya♥
Adiós.
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Antes de poder escribir la palabra "Adiós", DJ me arrebata el celular.
—¿Con quien hablas? (dice Dinah revisando la conversación).
—Con una amiga (Camila le quita el celular).
—Debe ser muy graciosa.
—¿Por qué?
—Porque sonreías todo el tiempo.
«¿Lo hice?»
—No digas tonterías. Más bien, vamos al parque de las avenidas. Yo invito los helados.
—¡Woho! Vamos.
El parque de las avenidas es un parque muy conocido, pero no por sus atracciones, si no por los murales hechos por los mejores grafiteros de la ciudad. Queda a unas cuantas cuadras de la casa de DJ. Los graffitis fueron hechos hace 12 años.
La policía intentó removerlo pero una marcha adolescentes impidió todos sus intentos, desde entonces es patrimonio cultural y los retocan cada cierto periodo de tiempo. Los murales son absolutamente preciosos, reflejan la rebeldía, amor y paz.
Por supuesto, son lugares perfectos para tomarse fotos, precisamente los turistas son quienes han hecho el parque tan famoso. Tomaré varias fotos para Natalia.
***
—Estos helados son deliciosos (dice DJ comiendo un helado de fresa y chocolate).
—Lo sé... Ven, tomemonos una foto (Camila saca su celular, las dos sonríen y toma la foto).
—Has tomado muchas fotos.
—Sólo quiero tener recuerdos (dice Camila llevándose su helado de Vainilla con chispas y brownie a la boca).
—¿O quizás te volverás a ir y nos has dicho nada?
—DJ, aún no sé eso. Mi padre no ha tocado el tema.
—Quédate, ¿sí?
Mi celular suena interrumpiendo nuestra conversación.
—¿Alo?
—Camila, ¿podrías venir para la cena? (dice el Sr. Cabello).
—Vale, está bien.
—¿Dónde estás? Tadeo irá por ti.
—En el parque de las avenidas.
—Ok, Adiós.
—Adiós.
Cuelgo.
—¿Pasó algo? (pregunta Camila).
—No, era papá diciéndome que fuera a cenar.
—Extraño.
—(Camila eleva los hombros) lo sé.
Ya estoy terminando mi helado.
Suena mi celular, es Tadeo avisandome que ya ha llegado. Decido comprarle un helado de ron con pasas, su favorito.
Me despido de DJy empiezo a buscar el carro hasta encontrarlo. Tadeo me abre la puerta. Yo le doy el helado, él me agradece con una enorme sonrisa.
En 15 minutos estoy en mi casa, sentada en el comedor junto con papá. Los dos estamos en silencio. La señora Cristina nos sirve los platos. Ahora estamos comiendo. Sofia no está, según papá salió hace varias horas y yo tengo una idea de donde debe estar.
—¿Recuerdas que te comenté por teléfono sobre que viajaríamos como vacaciones? (dice el Sr. Cabello).
—Así es.
—Serán en Hawái. Viajaremos mañana a las 5 de la tarde.
«What the hell?»
—¿Es en serio? (Camila pregunta sorprendida).
—Sí, empieza a hacer tus maletas al acabar la comida.
—Vale.
¿Hawái? Algo extraño sucede aquí.
¿Por qué papá nos llevará a Sofia y a mí a Hawái? Hemos ido a Mexico, Estados Unidos, a Canadá pero nunca tan lejos.
"A caballo regalado no se le mira la dentadura".
Haré mis maletas después de acabar con mis sandwiches y mi leche achocolatada.
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Jugando Amar (Adaptación Camren)
FanfictionCamila Cabello, 17 años, una estudiante de sexto año, llena de lujos vive con su hermana y su padre ha teniado una infancia dificil despues de la muerte de su madre, tiene una relacion con Cristian un chica mayor que ella y llevan varios meses junto...