Lágrimas Sin Precedente

534 82 4
                                    

Las lágrimas no son motivo de vergüenza, lo digo yo que siempre estaba llorando, era una sentimentalista, ahora que no estás lloro más que antes. 

Sorprendente verdad?  Recuerdo que más de una vez secaste mis lágrimas más absurdas, las que derramaba por hombres que no valían la pena, por películas con un final triste, por ver una persona en problemas y no poder hacer nada, porque talaron el árbol donde me sentaba a pensar en el parque. 

Ahora te confieso que también secaste lágrimas por ti, pero eso tu no lo sabías. Más de una vez me ponía triste tu situación, pienso que ahora estás bien, pido a los dioses que estés bien. 

-Kara, cariño, por que lloras? 

No te gusta la fiesta?, de ser así podemos irnos, no hay necesidad de llorar. 

La fiesta me gustaba, donde tú estuvieras a mí me gustaba, siempre me hiciste sentir cómoda. No entendía porque tu no llorabas, como lo soportabas? Eran crueles contigo, no veían lo perfecta, amable, dedicada que eras, veían defectos, imperfecciones, tu familia era  maldad y frialdad, tu cargabas con esa máscara, parecías inmune a sus palabras hirientes. Fue estúpido pensar eso verdad? Claro que no eras inmune, entiendo porque desapareciste, entiendo por qué te fuiste, pudiste acudir a mi, pudiste hablar conmigo, pero que podía hacer yo contra esa avalancha de oído y miedo, tu me protegiste de ella, ahora intento protegerme sola, no les gusta lo que escribo, pero tampoco puedo  detenerme, tengo esperanza de que algún día lo leas. 

-No, la fiesta está bien, es solo… 

No podía dejar de sollozar, y tus ojos alterados no sabían cómo consolar mi sentimental ser, parecías enojada, tu mirada buscaba con la mirada al causante de mis lágrimas. Lloraba por ti. Abrazaste mi cuerpo para mecerlo contigo, como un baile, torpe y reconfortante. Aceleraste mi corazón, haciéndome sentir cálida, eras la mejor de todos ellos. 

-Todo está bien cariño, no hay por que llorar. Además eres más linda cuando sonríes. 

Extraño que me llames cariño, que acaricies  mi cabello, extraño nuestra plática y nuestras comidas. 

Fuiste los mejores años de mi vida, no puedo resignarme a perderte, te seguiré esperando, seguiré  soñando con tu regreso y seguiré lamentado mi estupidez, si nos volvemos a encontrar espero poder besar tus labios, espero sentir tu calidez, espero que seas feliz. 

Aún me recuerdas? O has empezado a olvidarme? 

Los Días Sin TiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora