Ambos estaban ya casi en la comisaría, el camino hacia el lugar no era muy largo, sin embargo, si era bastante peligroso. Debido a la tensión que causaba el miedo de ser mordido en cualquier momento por alguna de esas cosas, Leon y Violette apenas intercambiaron un par de palabras.
Leon abrió la puerta de la comisaría y Violette entró rápidamente para que los zombies que les perseguían no lograran tocarles.
— ¿Estás bien? —. Preguntó Leon cuando él y la chica se encontraron al fin adentro del edificio que prometía seguridad.
— Aceptable —. Rieron juntos por un momento tratando de olvidar la tensión y el miedo que sentían en su interior — ¿Y tú? —.
— Tal como se puede estar en medio del apocalipsis —. Respondió el rubio con cierto tono de sarcasmo en su voz mientras subía las escaleras hacia la puerta del sitio.
— Entra tu primero, yo te cubro —. Exclamó la chica
El asintió y abrió la puerta con cautela. Al ver que no había nada sospechoso le hizo un ademán a Violette para que entrara.
Con sus armas apuntando y sentidos alerta se aproximaron a explorar los a los rededores de la comisaría, estaba completamente vacía. Leon se aproximó a un monitor de las cámaras de seguridad. Mientras tanto, Violette estuvo observando la curiosa arquitectura de la estación. Era bastante elegante, sin contar los riachuelos y salpicones de sangre que pintaban de un patrón extraño las paredes de vez en cuando.
No mucho después, Leon logró dar con un sobreviviente que se encontraba corriendo por los pasillos, huyendo de uno de los zombies.
— Tenemos que ayudarle —. Dijo Violette mientras observaba al tipo gritarle a la cámara su ubicación.
— Si, vamos. No estamos lejos —. Dijo Leon mientras se ponía en marcha. El apreció el gesto de ayuda que Violette quiso dar, bien sabía que cualquier persona preferiría quedarse a salvo dentro de las cuatro paredes de la habitación.
Los dos chicos estaban buscando incansablemente por los pasillos sin embargo no daban dar con el paradero del hombre que vieron. Ambos contaban con las pocas esperanzas de poder encontrar algún sobreviviente.
Lo más cercano que escucharon fueron los gritos desgarradores de un hombre a unos pocos metros de distancia. Leon y Violette corrieron de inmediato hacia el lugar es cuestión. Se lograron distinguir los quejidos de alguien detrás de una gran puerta de metal.
La chica abrió la puerta mientras Leon jalaba al hombre hacia la habitación, pero un gigante charco de sangre saltó del cuerpo del hombre manchándolos. Ella se agachó ayudando a Leon, pero no era suficiente, lo único que lograron recuperar del hombre fue la mitad de su cuerpo.
La escena fue terrible, Violette se quedó sentada en el suelo que tenía la sangre del tipo por doquier y el rubio también veía el cadáver con terror. La chica simplemente no podía quitar la mirada de este, los órganos y los músculos se podían observar con facilidad, haciendo que las náuseas se hicieran presentes y el labio interior de ella temblara por el shock.
— Violette, tenemos que irnos —. Dijo el chico mirando con compasión a la chica que no podía despegarse del suelo que todavía no era capaz de reaccionar — ¡Violette! —. Repitió con más insistencia.
El no tuvo más opción que acercarse a ella y levantarla con cuidado sosteniendo su mano. Puso sus manos entre sus hombros, agarrándola con sumo cuidado de no asustarla. El rostro de Violette seguía con su mirada sostenía en el sangriento suelo.
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La Noche En Raccoon City -Leon Kennedy
FanfictionViolette Miller despierta en una realidad que parece querer acabar con ella cada segundo. Un inesperado incidente la introduce a un chico que quiere ayudarla a encontrarse. Pero, sobretodo, ambos quieren sobrevivir. La noche en Raccoon City dejaría...