Fantasía Encantada «|Terminada|» (Lord Milori Y TN)

11

—¡Es tu culpa, te dije que no lo hicieras así!

—¡Por todas las hadas, eres un bueno para nada!

—¡Así no se hace, dame eso!

Estos y muchos más comentarios se podían por entre las multitudes de hadas que estaban fuera de sus camas. Muchas gritaban, otras ordenaban, otras criticaban y otras simplemente lloraban y sollozaba de enojo, pero todas hacian lo mismo; desbordar caos y odio.

—Ay, no.. esto se está saliendo de control —. Susurró Chat y con sus manos, volando sobre toda las hadas, rocío un polvillo rojo que salía de sus manos.

Las hadas poco a poco, y parpadeando confundidas, fueron despertando y el odio que tenían se fue desvaneciendo.

—Mucho mejor. Debo llegar a la Zona fría antes que ella —.

Nuevamente comenzó a volar haciendo lo mismo en cada lugar al que iba. Desplegaba el polvillo del amor y la Unión haciendo que todo el caos que había se fuese.

—¡Espera, Chat! —. Justo antes de cruzar la zona la Reina Clarion apareció junto con los ministros y varias hadas guardianas.

—Reina Clarion, ¿Que hacen todos aquí? —. Susurró cuando todos se acercaron.

—No vamos a permitirte que cruces la zona. Tus alas podrían romperse. Yo iré y hablaré con Lord Milori, haremos que las hadas dejen el odio. Tú te quedarás aquí, vigilando con las Scouts —. Comentó ella preocupada.

—Lo siento, Clarion. Es mi culpa que ella esté en esa condición y soy yo el que debo solucionar esto.. agh.. —. Una fuerte puntada en el pecho lo hizo jadear.

—¿Estás bien? —. La Reina intentando acercarse, junto con dos hadas sanadoras, pero este retrocedió mirando sus manos, las cuales comenzaban a tornarse grises.

—Si no encuentro a ______ será demasiado tarde para ambos. Reina Clarion, hadas.. —. Suspiró bajando la mirada —Yo lamento… hacerles esto, pero.. es mi problema, yo fui quien transformó a _______ en esto y yo seré quien la regrese a la verdadera forma —. De su bolsillo tomó un puñado de polvo blanco y rápidamente revoloteo sobre ellos esparciendo el polvillo.

—¿Que hiciste que? —. Todos estaban confundidos y preocupados, en especial la Reina.

—Esto durará unos minutos. Lo suficiente para que no me alcance —. Les comentó y salió volando rápidamente cruzando a la fría zona.

—Reina Clarion, es un polvillo de inmovilidad. No podemos volar —. La Reina novia sus alas, pero le era imposible elevarse, sin embargo solo podía caminar.

—¿Scouts? —. Miró la reina.

—Es imposible.. —. Las cinco hadas Scouts movían sus alas lo más rápido que podían, pero siempre quedaban en la misma situación, nada. No podían volar.

—Solo queda esperar. Yo confío en él y.. estoy segura de que nada malo sucederá.. —. Susurró la Reina algo insegura.

Mientras en el otro lado de la zona fría las hadas discutían entre ellas y el caos no tardaba en hacer presencia al igual que sus cálidos corazones enfriaban con el paso del tiempo.

—Esto es absurdo, _______. ¡Liberame de aquí! —. Hablaba Lord Milori enojado, mientras se movía con fuerza en la silla a la cual estaba atado.

—No, Lord Milori. Quiero que seas testigo de como esas hadas ridículas discuten entre si y se aíslan de todo. Al ver que no tienen un líder adecuado, yo me haré cargo de ellos. Comenzaré por conquistar la fría hondonada y después que me deshaga de ti iré por Clarion y sus inútiles hadas —comentó ella riendo mientras ponía a Lord Milori de primera fila en su palacio viendo como todas sus hadas comenzaban a discutir, odiarse y llorar.

—No estás conciente de lo que dices, _____ —Lord Milori intentaba soltarse, pero le era imposible—; déjame ayudarte, por favor.

La Princesa ______ sonrió con un toque de maldad y se sentó con delicadeza en una silla, al lado de Lord Milori.

—Lord, Lord, Lord.. —sonrió ella mientras acariciaba su mejilla.

—Admito que eres hermosa siendo mala, pero me causa escalofríos que me acaricies con esas largas uñas y sonrías con maldad. Si no fuese porque mis hadas están en grave peligro, y tú en ese estado, juraría que no dudaría en corresponderte —confesó riendo.

—Vaya confesión —susurró ella parpadeando sin poder creerlo—; pero lastima que sea tarde para eso.

—¡Princesa _______! —. Chaoshate estaba frente al balcón del palacio de Lord Milori con un ejército de hadas frías viéndolos de manera fulminante, en especial a _______.

—¡Pero que tenemos aquí! —reía _____ sonrojada por la confesión de Lord Milori.

—¡Deja en paz a Lord Milori! —.

—¡Deberíamos atacar de una vez! —.

—¡A ella! —.

—¡Alto, hadas, es una orden! —. Gritó Lord Milori viendo lo que planeaban sus hadas —La Princesa ______ no está en un estado adecuado. Su corazón ha sido envenenado y por lo visto no hay cura para unir las piezas de un corazón roto y saciar su dolor —habló serenamente.

—De hecho, si la hay, Lord Milori. La Princesa ______ volverá a la normalidad en cuestión de segundos si toma está pócima que he preparado con Zarina, hada de la Alquimia de la Hondonada —expresó.

—______, tú deberías de… —. Lord Milori, al igual que el resto de las hadas, habían quedado totalmente confundidas cuando se percataron de que la Princesa no estaba —¡Rápido, liberenme para ir tras ella antes de que sea demasiado tarde! —.

Varias hadas veloces se acercaron a desatar a Lord Milori quien salió volando rápidamente con Chat y la lechuza, las pociones y el ejército de hadas confundidas.

Mientras tanto ______ volaba rápidamente para cruzar la zona fronteriza al lado cálido y volver al palacio de Chaoshate, en dónde no saldría en un buen tiempo, pero en el camino sus alas comenzaban a fallarle.

—Agh, no no no, alas inservibles.. —susurró y miró sus manos las cuales lentamente comenzaban a tornarse de un piel pálido. Sintió el diminuto latido de su corazón con si este de a poco estuviera descongelando de a poco y se detuvo al ver que un ejército de hadas de la zona cálida la esperaba al otro lado—. Ay no..

Al darse la vuelta vio el mismo panorama, está vez con un Chaoshate preocupado y un Lord Milori serio, más un escuadrón de hadas aún enojadas.