Separados son indomables, Juntos invencibles ¿y su amor? siempre será incontrolable...
Tercer libro de la saga, hay que leer enamorada de lo prohibido y Amando lo desconocido, para entender este.
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-Señor los teléfonos siguen apagados- dijo Fabio provocando que mi estado de nervios empeorara, luego de mi discusión con Sara el arrepentimiento me embargo, fui cruel, mezquino, irrespetuoso y el peor esposo de la maldita historia, después de nuestra burbuja de felicidad le decía a ella que era una mujer amargada y frívola- intente comunicarme con Ignacio y también tiene apagado sus intercomunicadores.
- ¿Qué haremos Sebastián? - pregunto Magnus aterrado- ¿y si les sucedió algo? - suspire tratando de pensar en donde podrían estar metidos ese par y nada se me ocurría.
Todo este martirio inicio a las cinco de la tarde, que es la hora de salida de mi esposa, estaba tan arrepentido de mi comportamiento que compre un enorme cubo de helado, un paquete de chocolates y un combo de tacos en el restaurante de María para llevarle hasta su oficina y rogarle por su perdón.
Por supuesto después de una hora de espera ella no llego y subí hasta el piso de las oficinas de presidencia, encontrándome con la recepcionista quien me aseguró que ella salió con Harry desde las dos de la tarde, un poco después de que se diera por terminada la reunión.
Me acerque a los guardias de seguridad quienes me confirmaron lo mismo, sumándole el hecho de que ella iba con todos sus escoltas; preocupado llame a Magnus quien también estaba esperando Harry en su departamento, pero no llegaba y estaba arrancando para la sede de la firma. Las primeras horas creímos que estaban trabajando, con el paso del tiempo y la llegada de la noche los dos estallamos en preocupación y era el punto en el que no teníamos noticias de ellos.
-Deben tranquilizarse- dijo Gemma- ya te dije que ella me llamo, me dijo que todo esta bien, que no me preocupara y que no la esperara despierta- ella alzo sus hombros- no me dijo en donde estaría, tengo la certeza que sus seis mastodontes están con ella y Harry está incluido en la ecuación.
-Son las putas tres de la mañana Gemma- dijo Magnus frustrado- ¿en donde pueden estar metidos después de darle ese estúpido mensaje a todos en la familia? - jalo su cabello de la frustración- no puedo dormir en paz sabiendo que mi novio y mi casi hermana están desaparecidos por Italia.
-Señor encendieron los teléfonos- dijo Fabio feliz de darme esa noticia, no intente llamar a Sara porque seria obvio que no me contestaría, igualmente quería hablar con el grupo de seguridad que tuvo el descaro de ignorarme de aquella forma, aunque no se dé que me sorprendía, los escoltas de mi esposa eran más leales a ella que a cualquier otra persona, no podía enojarme con ellos y mucho menos despedirlos por seguir ordenes de su loca jefa.
-Llama ahora- dijo Magnus apresurado- ¿Qué esperas hombre? - Fabio obedeció poniendo en altavoz la llamada y dejando el aparato en el centro de mi escritorio, tres tonos de llamada se escucharon cuando la llamada fue atendida.
-Fabio- dijo Ignacio al otro lado de la línea- ¿Qué deseas? - pregunto con desinterés el hombre y mire el móvil con sorpresa- si tu llamada se debe a averiguar por la señora Ricci, ella esta sana y salva- admitió con parsimonia- Igual que el señor Balastro- Magnus pudo respirar nuevamente.
