Jam Jam (SeungSeok)

Jam: XXII

—Levántate.

Wooseok gimoteó en negación y se ocultó entre las sábanas.

—Si de verdad estás enfermo, vamos al hospital ahora mismo.

—¡Pero Seungyoun! ¡Es tan frío afuera! —Kim tembló y tosió falsamente— ¿Estás obligando a tu pequeño y débil hyung a salir en este clima? Ay, ¡pobre de mi!

—No lo puedo creer. No tendrás ninguna cara para obligarme a ir a clases la próxima vez que no quiera hacerlo.

—¿Cómo de que no? ¡Yo soy el mayor, tienes que hacer lo que te digo! Además, esto es diferente porque yo de verdad estoy enfermo.

Antes de que Seungyoun pudiera decir algo, Kim lanzó un ataque sorpresa y lo empujó de regreso a la cama, se subió sobre él y soltó una risita.

—Seungyounie, no seas tan duro con tu Hyung. Prometo que mañana estaré mejor para ir a clases.

—Eso dijiste ayer.

—¿Mm? ¿dijiste algo? Estoy tan enfermo que no puedo escuchar nada.

Cho rodó los ojos.

—¿Enserio? ¿No estás asustado de enfermarme también, ya que me sigues besando?

—Si, deberías enfermarte conmigo. ¿Qué dices? ¿No sientes que te duele un poco la cabeza? Deberías descansar. Quedarte conmigo todo el día, bajo las sábanas.

Seungyoun sonrió y suspiró ante la voz de cama de Kim Wooseok.

—Me encantaría, pero no puedo.

El castaño se quedó boquiabierto al ver que su propuesta indecente era rechazada, no podia creer que Cho Seungyoun no quería quedarse con él.

—¿Por qué?

—En primer lugar, tengo que ir porque necesito demostrar algo.

—¿Qué cosa?

—Que no estoy asustado de ningún bastardo.

Wooseok apretó los labios y presionó su mejilla en el pecho del menor, queriendo ocultar su expresión de vergüenza y ansiedad.

Por supuesto que Seungyoun no estaba asustado, siempre había sido Wooseok el cobarde.

El castaño encontró algo de consuelo en los latidos del corazón del más alto, todavía no quería que se fuera, quería quedarse con él en la habitación, ignorando el resto del mundo.

Cerró los ojos al sentir la caricia suave en su cabello.

—Y en segundo lugar, quedé con Hangyul para ir a la joyería al terminar las clases.

—¿Qué? ¿Le va a proponer matrimonio a Yohan o algo así?

—Probablemente, no tengo idea de cómo funcionan los pensamientos de Lee Hangyul. Hyeongjun le dijo que debería demostrarle con sinceridad a Yohan lo mucho que lamenta su comportamiento pasado y lo mucho que quiere estar con él, entonces ese idiota de Gyul vino y dijo que se iba a casar. De todas formas, tengo que ayudarlo si quiere hacer el ridículo.

Wooseok no pudo evitar reírse por las ocurrencias de los más jóvenes.

—¿Enserio? ¿Cuando va Seungyounie a comprar un anillo para mi?

—Creo que para conseguir un matrimonio con Hyung, un anillo podría no ser suficiente. Estoy ahorrando con esmero para comprarte una Isla.

—Eres tan inteligente, pero una Isla tampoco podría ser suficiente.