La idea de Wooseok al mostrarle a Seungyoun su anterior santuario era pasarse por ahí de vez en cuando, cuando estuvieran calientes e intimar libremente sin miedo a que iban a ser sorprendidos por alguien.
Sin embargo, debió haber sabido que ellos SIEMPRE estaban calientes, por lo que durante los últimos dos meses, la mayoría de sus cosas habían sido trasladadas al apartamento sin que se dieran cuenta. De hecho, no se habían pasado por casa durante casi tres semanas ni una vez desde la última visita de Cho Hana.
Incluso tuvieron que cambiar la cama, porque aquella vieja cama unipersonal de Wooseok no pudo resistir ni siquiera la primera noche. Fue una situación bastante cómica, puesto que Seungyoun no se había ni inmutado cuando básicamente rodaron al suelo (al parecer estaba decidido a que no iba a dejarse interrumpir esta vez), y Wooseok se estaba riendo demasiado por la determinación de Cho, aunque no era una risa del todo, era una combinación de gimoteos, sollozos, suplicas y risa.
Si las paredes no fueran tan buenas, probablemente alguien habría llamado a la policía o a un hospital mental.
Wooseok sonrió como idiota ante el recuerdo de su primera noche juntos en el lugar y se apuró por el pasillo de su piso, queriendo ver cuanto antes a su cachorro.
Suspiró de alivio al tirar su pesada mochila junto al estante de los zapatos y corrió hacia la figura alta de su novio.
—¡Seungyoun-ah~! —se quejó en tono exagerado— ¡Volví tan tarde otra vez! ¡Por favor dime que comiste sin mi!
—Lo hice, no quería que hyung se sintiera mal por hacerme esperar.
El castaño suspiró de alivio.
Seungyoun dejó a un lado la brillante estrella de adorno y abrió los brazos para recibir al más bajo.
Ya que Kim era propenso a atrapar resfriados en invierno, llevaba varias capas de ropa y una chaqueta gruesa, así que cuando Cho lo atrapó, fue como abrazar una almohada gigante y se rió.
—Estás congelado.
Wooseok sonrió viéndolo desde abajo y preguntó asombrado:
—¿Compraste un árbol de navidad? ¿con tu dinero?
—Por supuesto, también tengo mi propio dinero.
—Te lo regresaré.
—Hyung. —Cho rodó los ojos— Sigues insistiendo en darme dinero todo el tiempo, ¿qué haré si un día me pides que empiece a llamarte Papi?
Wooseok le dio una palmada en el trasero al más alto y sonrió encantador.
—Deberíamos intentarlo.
Seungyoun también pensó que no sería mala idea.
—Te llamaré Papi si quieres, pero ya no pongas más dinero en mi cuenta.
—Aburrido.
El más alto lo ayudó a deshacerse de la chaqueta y fue a colgarla. Wooseok examinó el árbol de navidad.
Cuando empezaron a pasar más tiempo aquí, ambos pensaron que se veía muy vacío y deberían comprar solo un par de cosas para arreglar, al mismo tiempo, Wooseok intentaba deshacerse de sus embarazosas impresiones de Evan Woodz a quien conoció en un bar, y Seungyoun vino con la idea de hacer un árbol de fotos en la esquina de la habitación. El bastardo tenía sus formas de convencerlo y ahora había una esquina repleta de fotos de ambos.
De todas formas, habían más de las que esperaban y no todas cabían, por lo que guardaron las demás, pero ahora las fotos restantes también decoraban el árbol de navidad.
![](https://img.wattpad.com/cover/208511255-288-k547225.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Jam Jam (SeungSeok)
Fiksi PenggemarKim Wooseok era mermelada dulce por todas partes. Seungyoun quería derramarlo sobre sus labios y todo su cuerpo. Quería morderlo y lamerlo hasta hacerlo desaparecer, quería esconderlo dentro de su estómago, ocultarlo y así negarle al mundo el sabor...