Me levanté temprano, me vestí con el uniforme que habíamos comprado para los que íbamos a trabajar en la cafetería, desayuné y tomé todo lo que necesitaba. Felipe ya me esperaba afuera con su auto.
Puse las bandejas de brownies en el asiento trasero y me subí al delantero.−Hola. −Saludé dando un suspiro.
−Buenos días, señorita.
− ¿Qué clase de decencia es esa? −Reí poniéndome el cinturón.
− ¡Eh! ¡Uno ya no puede ser caballeroso porque lo juzgan!
−Ahora dilo sin llorar.
El torció los ojos y arrancó el auto. He notado que, no importa cuál de los dos me recoja, siempre es el mismo auto.
− ¿De quién es el auto? −Pregunté.
−Mío, pero cuando Michael lo necesita se lo presto.
−Ah, ya veo.
−Por cierto, te ves bonita en uniforme.
− ¿En serio? ¡Gracias! Aunque creo que bastante simple.
−Creo que, a pesar de eso, sigue viéndose bien en ti.
El uniforme consistía en una camisa roja de mangas con cuello y botones y un pantalón negro simple pegado al cuerpo, junto con unas zapatillas blancas.
Llegamos al rato y Felipe me ayudó a llevar las bandejas hasta mi salón. Felipe llamó completamente la atención de las niñas del colegio: era lindo y era elegante, se veía carismático y tenía un aura atrayente. Felipe parecía verse feliz de llamar la atención.
Entramos al salón y dejamos las bandejas en una estantería detrás del mostrador que organizamos para poner las bandejas con los postres.
−Buenos días. −Dije a mis compañeros que llegaban junto a mí y a los pocos que ya habían llegado.
−Buenos días. −Respondieron en coro.
− ¿Dónde están los actores? −Pregunté.
−Haciendo el último ensayo. −Me respondió Angélica, una de mis compañeras. Asentí y les ayudé con lo que necesitaban.
− ¿Es tu novio? −Preguntó Angélica de repente señalando algún punto en el mostrador.
Dirigí mi mirada a dónde Angélica señalaba y me encontré con la mirada de Felipe.
− ¿Qué? No, es amigo mío y de Michael. Es uno de mis invitados.
− ¿Tiene novia? −Susurró.
−Creo que no, pero es imbécil, te recomiendo que no gastes tu tiempo.
Ella rio como diciendo "sí, bueno, me chupa un huevo. ¡Amor mío, allá voy!". Felipe nos ayudó un poco y luego fue donde estaban los actores para saludar a Michael. Esperaba que el club de fans de Michael no lo atacara a él también, aunque es muy probable que él disfrute la atención.
Terminamos de organizar todos los implementos (las cafeteras, el horno, la neverita, la licuadora, etc) y vi mi reloj: eran las 7:05, eso significa que habíamos tardado alrededor de 15 minutos arreglando todo. Se suponía que la kermés empezaría a las 7:30 y las obras a las 8:00.
Algunos de los actores llegaron hasta el salón, entre ellos estaba Michael y Marta. Marcia y Felipe también venían con ellos.
− ¡Oh, por Dios! −Gritó Marcia− ¡Mi niña es toda una trabajadora útil para la sociedad!
−Por Dios, Marcia, cálmate −Rodeé los ojos−, ¿Cómo les fue con el ensayo?
−Marta reemplazó perfectamente a Camila. No hay de qué preocuparse. −Respondió Michael.
ESTÁS LEYENDO
Damage.
Teen FictionDalila solo quería terminar sus últimos dos años en la escuela viva y tranquila, pasando desapercibida como lo había hecho desde que el salón se dividió en populares e impopulares. Desgraciadamente la vida no es como tú quieres sino como el azar y l...