Mi dulce perdición [SIN EDITAR]

Capítulo 47

Maratón 1/?

Habían pasado algunos días desde que Camille se fue, intente hablar con ella, le escribí pero decidí dejar de hacerlo al tercer día, al parecer ella no quería hablar y yo tampoco seguiría insistiendo.

Supongo que en algún momento ella tendría que regresar y tendríamos que hablar o al menos eso era lo que quería pensar.

La carrera contra Elliot sigue en planes, se hará en algunos días.

Después de la casi pelea afuera de little sin he tratado de mantenerme alejado, no quiero más problemas.

Estaba en Higgins, miro el lugar a mi lado que se encuentra vacío, el lugar que le pertenece a Camille.

Todos trabajaban en su proyecto y yo también lo hacía aunque no había mucho que hacer, no sin la rubia aquí.

Comienzo a escribir algunas cosas hasta que la silla a mi lado moviéndose llama mi atención.

-hola Jack Jack- habla una Amy bastante sonriente tomando asiento a mi lado.

-¿qué quieres?- pregunto de mala manera, hoy no había despertado de buen humor.

-¿mal humor?- pregunta burlona.

Me contengo en responder algo realmente grosero y me mantengo en silencio.

Toma mi quijada y me hace verla- sé cómo puedes deshacerte de ese mal humor- su otra mano libre se apoya en mi muslo y poco a poco intenta subirla para llegar a mi hebilla, tomo su mano en el proceso.

-es una lástima que no esté interesado más en ti- respondo y su sonrisa se borra.

-¿hace cuánto que no follas?- pregunta burlona- no me digas, de seguro Sarah 2.0 no ha abierto las piernas para ti.

Un enojo comienza a crecer en mi, sonrío sin gracia en su dirección.

-deberías de pedirle algunos tips y consejos- respondo- ya sabes, para darte a respetar- le guiño un ojo y aprieta su quijada- deja de venir a arrastrarte a mi cada vez que tienes ganas de follar- aprieta sus puños, había dado justo en el clavo- porque no estoy interesado en follar, no contigo- vuelvo a mi cuaderno y solo la escucho bufar para después largarse de aquí.

Las clases continúan y lo único que deseaba a cada instante era largarme, quería irme a casa y dormir, mi humor estaba por los suelos.

La campana suena y salimos para irnos a casa, camino junto a los chicos quienes hablan animadamente mientras que sólo me limito a escucharlos.

-¿qué tienes?- pregunta Nessa llegando a mi lado y entrelazando su brazo con el mío.

-nada- respondo secamente.

-Jacko- comienza- te conozco, estás bastante callado y aislado, tienes cara de amargado y parece que quieres golpear a todo el mundo, ¿estás en tus días?

Comienza a reír pero solo me limito a mirarla con los ojos entrecerrados.

-está bien, está bien- habla de nuevo- ¿por qué estás tan de mal humor?

Pregunta.

-no lo sé- respondo- solo siento como todo me irrita y siento ganas de golpear a todos.

Piensa unos segundos y después habla.

-sé la manera perfecta en que saques toda esa frustración- habla emocionada.

-no tendré sexo con nadie- respondo y abre sus ojos sorprendida.

-¡Jack!- exclama- no me refería a eso, ¡por Dios! No, no hablaba de eso, que mente tan sucia tienes- por primera vez en el día logro sonreír mientras que ella sigue negando.

-¿entonces de qué hablabas?- pregunto después de unos minutos.

-¡chicos!- habla a los demás quienes van en frente de nosotros, voltean al escuchar a Vanessa- fiesta esta noche en casa de Ryan- sonríen.

-por supuesto- habla Ryan- no sabía que habría fiesta en mi propia casa que amables son al invitarme- reímos- pero esta bien, hagámoslo.

Nessa me mira mientras guiña un ojo y continuamos caminando.

▪

Después de darme una ducha y cambiarme voy en camino a casa de Ryan iba en mi motocicleta, llego y aquí ya hay algunas personas, saludo adentrándome más para buscar a mis amigos aunque no tardo en encontrarlos, están en el jardín trasero mientras beben cerveza, voy con ellos y me uno a su conversación mientras que comienzo a beber, me sentía más relajado que en la mañana.

-llego el momento de demostrar quien es el mejor- habla Carl mientras trae consigo un barril de cerveza, sabía lo que se aproximaba, lo coloca sobre el césped y todos sonríen acercándose- ¿quién empieza?

Dos chicos se acercan, solo me limito a verlos.

Todo consistía en hacer vencidas, el que logrará bajar la mano de su oponente primero después bebía por algunos segundos directamente de aquel barril.

Han pasado ya algunas parejas hasta que Aaron se pone de pie.

-mi turno- habla y todos aplauden mientras gritan.

-¿a quién retas?- pregunta Mike.

Mira a todos.

-a Clayton- sonrío mientras dejó mi cerveza a unos centímetros de mi boca y niego con la cabeza.

-no estoy disponible- respondo y todos comienzan a gritar.

-¡Clayton, Clayton!

Sonrío, Nessa y Brooke quienes están a unos metros me alientan a hacerlo, me pongo de pie para caminar hasta quedar frente al pelirrojo.

Nos sentamos en unos pequeños bancos ahí y apoyamos nuestras manos, Aaron sonríe y hago lo mismo, siempre hacia esto.

-¿será este el fin de su amistad?- habla Mike quien es el que se ocupaba de este juego- prepárense.

Nos ponemos en posición, mientras nuestras manos es tan cruzadas y nuestros codos son el único apoyo.

-ahora- Mike habla y todos se centran en nosotros, Aaron y yo comenzamos a forcejear, ninguno de los dos cede, aunque al final dejo que lo haga, logra hacer que mi mano toque la base y todos comienzan a aplaudir, el pelirrojo ha ganado, sonrío mientras me pongo de pie y él también para beber la cerveza que le ofrecen.

Después de eso la noche continúa entre risas y conversaciones junto a los chicos y tal como Vanessa lo dijo logro hacer que mi mal humor se esfumara por completo.

▪

Mi alarma suena y me pongo de pie para comenzar a vestirme para el Instituto, hoy tocaba deportes entonces tome mi uniforme deportivo mientras guardaba en una pequeña maleta mi uniforme formal, baje y desayune con mi familia y una vez terminado y después de lavarme la boca salí con dirección a Higgins.

Capítulo nuevo.

Espero que les guste.

No olviden comentar, votar y compartir.

Nos leemos pronto.

-Neftali.