Cubano.

Naranja.

Todos estaban reunidos en el salón de descanso, nadie decía nada, pero tampoco es como si fuera necesario.
Estaban cansados y sus cuerpos tensos los delataban.

- ¿Alguien quiere una fruta? - pregunto Hunk mientras dejaba el cesto en la mesa de centro, como única respuesta los otros cuatro se levantaron de su lugar para tomar la que mejor les gustara.

-Tome una naranja- aviso Lance mientras la veía, sin mucho interés, le deprimía recordar a su familia ¿Y cómo no hacerlo? Si eran agricultores.

- ¿Te la pelo? - se ofreció el de listón verde volteándolo a ver, el de cabello castaño parpadeo un par de veces confundido por lo que había dicho mientras apartaba la vista de su naranja para verlo, sonrió malicioso al ver la oportunidad de molestarle.

-Ay Hunk- Allura, soltó un suspiro cansado al ver la sonrisa del paladín azul ¿Porque era tan así?

-Si- se levantó para caminar hacia él, reposando su cabeza en su hombro - y la naranja también- Shiro fue el único que soltó una pequeña risa al relacionar todo, su novio Adam solía hacer comentarios como los que Lance hacia eso le hacía sentir bien, cerca de él.

-N-no me refería a eso Lance- Hunk tomo la naranja empezando a pelarla, ignorando los comentarios de su amigo, sentía sus mejillas arder y se odiaba por tomar esos comentarios enserio.