Sasha Lane
Sentía como todos mis huesos se rompían, y como el dolor recorría cada parte de mi cuerpo, me quedaba sin aire y lagrima salía de mis ojos por todo el sufrimiento y dolor que estaba experimentando. Caí de rodillas al piso y sin poder resistir más de mis labios salió un fuerte grito, uno lleno de dolor puro, uno que podía sentir como raspaba mi garganta y desgastaba mis cuerdas vocales.
El dolor iba subiendo de intensidad, tiré otro grito, en el proceso cerrando los ojos, pero al volverlo a abrir aparecí sentada sobre mi cama, en mi habitación; con el dolor intacto pero más calmado, la cara totalmente mojado por lágrimas, sudor, y hasta moco.
Duré unos segundos tratando de calmar mi llanto y el dolor, más solo podía sollozar y quedarme tranquila sin movimiento alguno.
Escuché pasos por la casa, estos eran rápidos y se detuvieron en mi puerta, la cual fue abierta rápido por igual dejando ver a la silueta de mi madre con una cara de total preocupación. Al momento de verla las lágrimas volvieron a salir de mis ojos.
-¿Qué te pasa?- se acercó a mí.
-Me... me... duele- está me miraba completa como tratando de adivinar que era.
-¿Qué te duele mi amor?-
-Todo...me duele todo... siento como se me destroza los huesos.Su semblante preocupado aún estaba, dirigió su mano a mi cuello.
-Estás prendida en fiebre- Me tocó la frente- vamos a darte un baño de agua fría, ¿Puedes pararte? -asistí, conocía a mi mamá perfectamente para saber que iba a intentar de todo para que se quitará.
Una lágrima salía de mis ojos miel cada vez que intentaba moverme, ya no me dolía como al principio, pero aún seguía sufriendo.
Me pare con mucha ayuda de mi mamá, me costó muchísimo esfuerzo, estaba agarrada de ella para que esta me pudiera ayudar a ir al baño, y a bañarme.
-Creo que ya sé que tienes...-La miré a la cara y vi que su mirada estaba fija en algo en la cama, miré a ver qué era eso que había hecho descubrir que me pasaba esta mañana.
Había una mancha roja en la cama, mis sabanas azul claro estaban sucias de sangre.
-¿El período?- al principio, los primeros mes, me había dado fuerte, pero con el pasar del tiempo se me fueron reduciendo los dolores pero nunca así, nunca para tanto; pero de sienta forma explicaba mucho.
-Te he dicho que nunca te olvidarás de tus fechas.
-Lo siento.
-¿Crees que puedas bañarte sola?, para encargarme de eso
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La Luna del Lobo.
WerewolfSasha Lane: De un día para el otro mi vida cambió... Gracias a dicho chico que me hizo chocar contra los casilleros hasta el punto de casi perder la conciencia. ¿Lo conocía? No ¿Era guapo? Sí ¿Me dolía todo? Sí, ¡y mucho...! ¿Su razón ? ... Creo qu...